Por qué a los chicos les gustan las chicas

Cierto día en que leía mis correos electrónicos me encontré con uno de esos en los que, debido a que va dirigido a cientos de personas, se tiene que avanzar hacia abajo una eternidad para poder llegar al texto.

Bueno, por lo general borro de inmediato esos correos. Pero este me intrigó. Se titulaba: “Algunas razones del porqué a los chicos les gustan las chicas.” Las instrucciones eran leer el correo, añadirle una o varias razones y enviarlo al menos a veinticinco personas más. Si no seguías las instrucciones, tendrías mala suerte en las relaciones, pero si lo enviabas a veinticinco personas o más, entonces serías el afortunado ganador de una dicha romántica.

Después de leer las razones por las que a los chicos les gustan las chicas, se me ocurrió una idea. Si yo podía obtener la dicha romántica por enviar el correo electrónico a veinticinco personas, imagínense qué afortunada sería si se lo enviara a millones de personas. Mi esposo y yo esperamos alcanzar la perfección marital gracias a todos y cada uno de ustedes que lean esto.*

Algunas razones del porqué a los chicos les gustan las chicas

1.   Siempre huelen bien, aunque sólo sea a champú.

2.   La forma en que sus cabezas encuentran siempre el lugar correcto en tu hombro.

3.   La facilidad con que se acomodan en tus brazos.

4.   La forma en que te besan y la repentina sensación de que todo está bien en el mundo.

5.   Lo lindas que son cuando comen.

6.   Las horas que tardan en arreglarse, pero al final vale la pena.

7.   Porque siempre están calientitas, aun cuando la temperatura exterior sea de menos treinta grados.

8.   La forma en que se ven bien sin importar lo que lleven puesto.

9.   La forma en que les halagan los cumplidos.

10.  Lo bonitas que se ven cuando discuten.

11.  La forma en que sus manos siempre encuentran las tuyas.

12.  La forma en que sonríen.

13.  La forma en que te sientes cuando en el identificador de llamadas ves su nombre justo después de haber tenido una pelea terrible.

14.  La forma en que dicen “ya no peleemos”, aun cuando sabes que una hora después…

15.  La forma en que te besan cuando hiciste algo agradable por ellas.

16.  La forma en que te besan cuando les dices “te amo”.

17.  En realidad, simplemente por la forma en que te besan…

18.  La forma en que se dejan caer en tus brazos cuando lloran.

19.  La forma en que se disculpan por llorar por cosas tontas.

20.  La forma en que te golpean y esperan que te duela.

21.  Después, la forma en que se disculpan cuando sí te duele (aunque tú no lo admitas).

22.  La forma en que dicen “te extraño”.

23.  La forma en que tú las extrañas.

24.  La forma en que sus lágrimas te hacen desear cambiar el mundo para que nada vuelva a lastimarlas.

Sin embargo, independientemente de si las amas, las odias, si deseas que todas mueran o si sabes que morirías sin ellas… no tiene importancia. Porque una vez que entran en tu vida, cualquiera que sea el lugar que ocupen en el mundo, se convierten en todo para ti. Cuando las miras a los ojos, viajando a las profundidades de sus almas y dices un millón de cosas sin emitir ningún sonido, comprendes que tu propia vida se consume inevitablemente con cada uno de los rítmicos latidos de sus corazones.

Las amamos por un millón de motivos. No tiene que ver con el razonamiento sino con el corazón. Es un sentimiento. Sólo siéntelo.

Kimberly Kirberger

[* No se pretende que la referencia a las cartas cadena se tome en serio.]