Capítulo 30

Diez Maneras de Aprobar con Éxito los Exámenes GED

En Este Capítulo

Hacer todo lo que puedas para prepararte bien antes del examen

Evitar errores comunes el día del examen

Abandonar ciertos malos hábitos para aprobar con éxito

Quieres salir exitoso de los Exámenes GED. De no ser así, no tendrías este libro en la mano ni tampoco pasarías todo tu tiempo libre preparándote para los exámenes, ¿verdad? Para tu beneficio, presentamos en este capítulo diez maneras rápidas y fáciles de ayudarte a alcanzar tu objetivo.

Elegir la Mejor Fecha Posible para el Examen

¿Para qué planear tomar los exámenes GED justo cuando tienes un millón de otras cosas que hacer? Obvio, llevas una vida ocupada, pero intenta buscar un periodo dentro de tu vida ocupada donde puedas concentrar tus esfuerzos en prepararte para pasar los exámenes. Sé astuto al elegir la fecha del examen. Si tienes tiempo suficiente para prepararte, aprobarás. Es así de simple. Elige una fecha que te permita prepararte bien, sin que por ello se ubique tan lejos en la distancia como para jubilarte antes de tomar los exámenes. Consulta el Capítulo 1 para más información sobre programar tu examen.

Prepararse, Prepararse y Prepararse Todavía Más

Si piensas inscribirte para el examen, esperar a que llegue la fecha, y entrar a hacerlo — sin preparación ni estudio previo — te sentirás decepcionado con los resultados. No se te ocurriría empezar a construir una casa llegando a la obra sin nada más que tu irresistible atractivo y tu mejor sonrisa, ¿no? El coronamiento exitoso — de cualquier meta — exige una planificación integral y meticulosa. Consulta el Capítulo 3 para leer algunos consejos generales que te servirán para preparar los exámenes. Además dedica algún tiempo a repasar los Capítulos 4, 9, 14, 19 y 24, que brindan consejos y sugerencias para preparar cada examen en particular.

Estar confiado es genial. Estar demasiado confiado puede darte problemas. Si crees que estás valorando en exceso tu conocimiento, toma tantos exámenes de práctica como puedas, y tómalos bajo las mismas condiciones que los exámenes reales. Si tu confianza excede los resultados, sigue tomando exámenes de práctica, no le eches la culpa a éstos. Considérate afortunado de saber las áreas en las que necesitas más práctica. Después, empieza seriamente a prepararte para el evento que probablemente cambie tu vida. La preparación nunca es tiempo perdido, y el tiempo perdido nunca se destina a la preparación.

Ser Realista

Mientras estás tomando el examen, debes mantener la calma. Prepararse (consulta la sección anterior) es la mejor forma de alcanzar este objetivo. El optimismo por sí solo no es garantía de éxito. Aunque una actitud optimista combinada con una preparación realista te llevará lejos en este mundo. Tu actitud mental puede guiarte hacia esa dirección. Mira el vaso medio lleno, pero sé realista.

Para ayudarte, haz una lista de todas las cosas que podrían preocuparte. Si te resulta más fácil, haz una serie de listas: personal, familiar, comunitaria, estatal, nacional, regional, mundial, ecológica, ambiental, financiera, gubernamental, etc. Procura que la lista sea lo más larga y completa posible. Déjala reposar un día, e intenta agregar más elementos después. Cuando tu lista quede lo más completa posible, léela, tírala y promete no preocuparte por nada de lo que figura en esa lista hasta terminar de rendir los exámenes GED. Preocuparte te distrae de la única cosa que debería estar en tu lista de preocupaciones: aprobar los exámenes GED. Por otra parte, si haces una lista de los cambios que podrían ocurrir en tu vida si apruebas los exámenes GED, estarás mirando hacia el futuro. La preparación realista te ayudará a cumplir tus metas.

Llegar a Horario para el Inicio de los Exámenes

Si llegas tarde al lugar del examen, probablemente no te permitan ingresar y deberás tomar los exámenes otro día. Sin mencionar que probablemente tengas que volver a pagar para tomar los exámenes. ¿Quién necesita tanto sufrimiento? Todo lo que tienes que hacer para evitar esta tragedia es llegar temprano a los exámenes, que en contra de la opinión general, no es tan difícil como parece. Puedes preparar tu ruta y horario de llegada de la misma forma que preparas los exámenes. Consulta mapas de carreteras en Internet. Verifica los horarios del servicio de transporte público local. Investiga, reserva tiempo extra para imprevistos y llega a tiempo y preparado para los exámenes.

Guárdate Tus Comentarios para Ti

Un poco de estrés es normal al entrar a rendir un examen. Pero lo último que quieres es aumentar tu nivel de estrés. Aunque parezca antisocial, mantén tu charla seria a un nivel mínimo e indispensable antes de los exámenes. Si quieres intercambiar bromas sobre el clima, adelante. Si quieres arreglar para tomar un café después de los exámenes, haz tus planes. Si quieres involucrarte en una charla seria acerca de cómo todo lo que has hecho hasta ahora sólo puede garantizar un fracaso, ¡huye tan pronto como puedas sin decir una palabra a nadie! La gente matando el tiempo en el centro de exámenes o que va a dar el examen y tiene cientos de consejos para darle a todo el mundo seguro van a acrecentar tu nivel de estrés. Si te preparaste, estás listo. Escucha tu voz interior que dice que estás listo. No escuches a los expertos de la calle que entran a dar el examen contigo. Si fueran tan listos, ya tendrían su GED.

Concéntrate en la Tarea en Cuestión

Un arquero que quiere dar en el blanco, concentra todas sus facultades mentales en el objetivo que tiene entre manos. Nadie nunca acertó en el blanco fantaseando sobre la próxima fiesta. Por eso, controla tu mente, no dejes que divague durante el examen. Dejar que tu mente se remonte hacia las vacaciones más fantásticas que tuviste puede ser muy relajante, pero si pasa durante un examen será un desastre. Necesitas mantener tu mente alerta y concentrada antes y durante los exámenes, así que concéntrate en la tarea que tienes a mano — poner lo mejor de ti para aprobar los GED.

Asegúrate de dormir bastante en las noches y semanas previas al examen. Si estás bien descansado, te resultará más fácil concentrarte en cada pregunta y responder correctamente.

La Mirada Puesta en Tu Examen

Si existiera el Premio al Peor Error para los que toman exámenes, se lo darían al que mira el examen de al lado. Esta acción se llama copiarse y es muy grave. No sólo te pedirán que te retires del centro de exámenes, sino que deberás esperar de varios meses a un año para que te permitan programar otra fecha de examen. Mantén la mirada únicamente en tu examen. Mientras duren los exámenes, tu examen y cuadernillos de respuesta son los objetos más bellos y fascinantes del mundo. Así pues, es imposible desviar la mirada de ellos. Lo más probable es que tu vecino tenga un examen distinto.

No des el menor indicio de que tal vez, ni remotamente, puedas estar mirando el examen de otro. Al supervisor del examen no le importará lo que estabas haciendo en realidad, lo que él vio fue que tú mirabas en dirección al examen de otra persona, lo que como tú sabes, es considerado hacer trampa.

Escribir Clara y Atentamente

Los GED tienen un solo examen que te permite escribir una respuesta (en lugar de rellenar círculos). En el ensayo de la Parte II del Examen de Redacción de Artes del Lenguaje (consulta la Parte II de este libro), asegúrate de escribir clara y atentamente. Dos calificadores de exámenes van a leerlo, y si leen algo mal porque el texto es ilegible, perderás puntos. Si eres descuidado para escribir, dedica tiempo a mejorar esto o aprende a escribir rápido con letras de imprenta. Sé bueno con quienes calificarán tus exámenes — escribe de forma clara. Puedes escribir en cursiva o letra de imprenta. Simplemente, sé prolijo. Consulta el Capítulo 4 para más consejos.

Pensar en Positivo

Los chicos suelen decir a sus padres que ellos “pueden solos”. Si bien esto no siempre es cierto para un niño de 4 años, es bien cierto para un adulto. Tú estás a cargo de tus pensamientos. Puedes pensar en positivo o en negativo. Todo lo que podemos decir es que los pensamientos positivos te harán sentir más feliz, más productivo y más seguro; todo lo cual te ayudará a rendir mejor los exámenes GED.

Pon lo Mejor de Ti, Sin Importar lo que Pase

No todos pasan los exámenes GED la primera vez. Si ya has tomado los exámenes, no te sientas un fracasado por no aprobarlos — tómalo como una experiencia de aprendizaje. Utiliza tu último examen como un motor para descubrir tus puntos débiles en el aspecto académico. A veces es posible obtener más ventajas de no tener éxito que de tenerlo. Ya sea que estés tomando los exámenes por primera vez o no, concéntrate en poner lo mejor de ti.

La vida está llena de altibajos. Aunque pongas lo mejor de ti en el examen, desafortunadamente, el destino podría jugarte una mala pasada. Puede que no te sientas bien, o que los chicos te hayan puesto los nervios de punta justo antes de salir de casa. No importa el motivo, no te preocupes. Siempre puedes volver a hacer los exámenes. Ten en cuenta que poner lo mejor de ti te brindará la confianza necesaria para acercarte más a tu objetivo la próxima vez.

Puedes rendir los exámenes hasta un máximo de tres veces al año y durante muchos años, de ser necesario. Fallar una sóla vez no es una condición permanente, pero no poner lo mejor de ti puede convertirse en tal.

Sólo debes volver a rendir los exámenes que no aprobaste. Nota: Hay un arancel adicional por volver a rendir un examen en particular. El precio puede variar, así que consulta con tu administrador local.