Hay matrimonios que duran toda la vida y matrimonios que duran pocos días. Hay personas que viven juntas toda una vida y personas que viven juntas unas horas. El nombre de su relación no determinará cuánto va a durar. Las decisiones respecto a qué va a hacer con su vida y con quién la va a compartir son muy importantes aunque el nombre que use no sea el de matrimonio. El compromiso y el apoyo son necesarios tanto si está casado como si no lo está. Una relación es lo que las dos personas hagan de ella y prosperará mientras que las dos personas sean capaces de hacerla durar... no importa el nombre que le demos.
A Pete y Vanesa no les gusta la idea de declarar su amor frente a un funcionario anónimo en una oficina o en una iglesia. Por lo tanto, no se han casado. No se casaron cuando se fueron a vivir juntos, ni cuando compraron su primera casa, ni cuando tuvieron su primer hijo, que actualmente tiene 16 años.
“La idea era que si por esta razón lo molestaban en el colegio, pensaríamos en casarnos”, dijo Pete, que ha vivido con Vanesa por 23 años. “Pero nunca fue un problema”.
Vanesa admite que la decisión tuvo algunos efectos incómodos: “Seguramente mi mamá le ha mentido a algunas de sus amigas; bueno, tal vez no mentido, pero no les ha contado toda la verdad”. Pero para Vanesa hay una verdad más importante: “Con frecuencia el amor y el matrimonio van juntos, pero es completamente posible tener el uno sin el otro. Hay matrimonios con poco compromiso y parejas muy comprometidas sin haberse casado”.
Pete piensa que asuntos como casarse o cuándo casarse son considerados cada vez más como escogencias muy personales, libres de los juicios morales tradicionales de la comunidad, la familia y la iglesia. “Me parece que lo más importante es la calidad de la relación, no el hecho de si las personas están o no casadas”.
El 63 por ciento de las parejas que viven juntas piensa que el matrimonio cambiaría significativamente su relación, los niveles de compromiso, la ayuda que se prestan y la forma en que comparten su vida. Sin embargo, estas cosas que antes se consideraban exclusivas de las personas casadas son ahora igual de comunes entre aquéllas que viven juntas.
Bumpass y Sweet 2001