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Me sentía tan aliviada de saber que la presencia de Alexa en la feria había sido pura coincidencia. En cuanto a Mike, era solamente un amigo de nuestra vecina. Eso probablemente incluía seguirse en Instagram. Incluso si Alexa estaba enamorada de Mike, ya no tenía chances con él. Cuando vi a mi hermana agarrada de la mano de Mike, mi corazón saltó de alegría por ella. Aún no era oficial, pero ese paso sucedería pronto; estaba segura de ello.
Esa noche, mientras estábamos sentados en la sala de televisión con nuestra familia esperando que empezara la película del domingo de la noche, la boca de Ali se curvó en una sonrisa, que quedó pegada en su cara, sabía que estaba reviviendo todo lo que había pasado en la tarde.
Lucas estaba desparramado sobre una bolsa de dormir, quejándose de las alertas de las noticias que parpadeaban en la pantalla, mamá por tercera vez le pidió que se callara para que ella y papá pudieran escuchar las últimas noticias.
Según el periodista de noticias, por la falta de lluvia, los incendios forestales en la parte norte del estado habían aumentado llegando al nivel de emergencia, mientras que en otras zonas del estado también habían estallado incendios los que sospechaban habían sido encendidos deliberadamente por niños y adolescentes
“¡No puedo creer que hayan prendido esos incendios intencionalmente!” La indignación en la voz de mi padrastro era más que claro. “¡Qué les pasa a esos chicos!”
“¡Espero que los atrapen y los encierren!” Exclamé, igual de indignada. “Tienen que pagar por lo que han hecho”.
“Se ha perdido tanta flora y fauna”, añadió mamá. “Y algunas familias incluso han perdido sus casas. Es todo muy trágico”.
Sus palabras fueron interrumpidas por un chillido de Lucas. “¡Al fin!” dijo cuando la cara del periodista de noticias fue reemplazada por los créditos del comienzo de la película.
Para Lucas, la película era mucho más importante que hablar de cosas que no tenían nada que ver con él. De repente la imagen de Ali y Mike tomados de la mano se filtró en mis pensamientos una vez más, la preocupación por los incendios se esfumó de mi cabeza también.
En la parada del autobús a la mañana siguiente, nuestros vecinos no estaban a la vista.
“Tyler y Alexa no han llegado todavía”, dijo Lucas, mirando con preocupación calle abajo.
“¿Puedes enviarle un mensaje a Alexa y decirle que el autobús está llegando?”
“¡No voy a enviarle ningún mensaje!”
“¿Por qué no?” resopló Lucas.
Sacudí la cabeza con exasperación. “Porque no quiero hacerlo”.
Enfadado, se adelantó y se puso en la fila de los chicos que hacían cola. Lucas no tenía ni idea de lo que estaba pasando. Vivía en su propio pequeño mundo de la Play Station. Era todo lo que le importaba o en lo que pensaba en estos días: Play Station y Tyler. Tyler era el nuevo ídolo de mi hermano. Imitaba todo lo que Tyler decía, incluso alguna que otra palabrota. Si nuestra madre lo escuchara decir palabrotas, tendría grandes problemas. Pero ella estaba ajena a la influencia que Tyler estaba teniendo. Mientras Lucas no rompiera la paz del hogar, ella era feliz. Estaba contenta por no tener más a Lucas encima de mí pero aun así, no creía que Tyler fuera una buena influencia para él.
Ali se ubicó en un asiento cerca de la parte trasera del autobús, se corrió para hacerme lugar y miró por la ventana. “Me pregunto dónde estará Alexa”.
“¡Quién sabe! ¡Y a quién le importa!” dije con una risita. “Lo importante es que tú y Mike son casi novios. A todo esto, ¿a qué hora te dormiste anoche?”
“Bastante tarde”, Ali se rió, feliz de hablar del chico de sus sueños. “Mike y yo estuvimos chateando durante horas”.
“¡Te dije que todavía le gustabas!”
“Sé sincera”, presionó. “Tú también tenías tus dudas”.
Asentí, sin aceptarlo del todo. “Sí, lo admito, estaba un poco preocupada, especialmente cuando Alexa apareció ayer. Es tan insistente, ¿no? Quiero decir, ella sabe lo mucho que te gusta, incluso le dije que tú y Mike estaban juntos y ella seguía coqueteando con él. ¡Es tan mala como Meg!”
Ali puso los ojos en blanco. “Tienes razón en eso y hablando de Meg, recibí un mensaje de ella esta mañana”.
“Oh no”, me quejé, recordando a la mejor amiga de Ali de su escuela anterior. “¿No me digas que quiere volver a visitarnos?”
“Ella no dijo nada de venir a visitarnos. Pero ya sabes cómo es Meg. En algún momento lo planteará”.
Me estremecí. “Asegúrate de decirle que no. No podría soportarlo”.
“En realidad, yo tampoco”.
“¿Le contaste lo de Mike?”
Ali se sonrojó y sacudió la cabeza. “¿Qué hay que contar?”
“¿Es un chiste?” Me reí. “Vamos, ustedes serán novios antes de que te des cuenta”.
“Eso espero”, se rió.
“¡Tal vez deberías preguntarle!”
“¿Preguntarle qué?”
“Que sea tu novio”.
Ella me miró con horror. “¡Ni loca!”
“¿Por qué no? ¿Quién dice que el chico es el que tiene hacer la pregunta?”
Se encogió de hombros y sacudió la cabeza. “¿Y si dice que no?”
“Ali, vi cómo te miraba ayer antes de irse por la tarde. No va a decir que no. Pero si es demasiado tímido para pedirlo, nunca pasará”.
“¿En qué momento empezaste a tener tanta seguridad en ti misma, Casey? Te juro que eres una persona diferente estos días. Te enfrentaste a Ronnie, justo en medio del pasillo de la escuela, delante de todos. ¡Como si fuera poco le diste un flor de empujón! ¡Juro que nunca lo olvidaré!”
Me reí a carcajadas. “¡La reacción de Ronnie! Eso nomás hizo que valiera la pena el problema en el que me metí con la Sra. Jensen”.
“Es curioso cómo funcionan las cosas. El video viral te convirtió en una heroína y todos te admiran y a la vez te temen. No creo que nadie se atreva a traicionarte otra vez”.
Nos reímos durante todo el viaje a la escuela. Compartimos tantas bromas divertidas entre nosotras. Mi gemela y yo habíamos vuelto a ser las hermanas íntimas que habíamos sido y eso hacía que mi corazón cantara.
Sin Alexa alrededor, era como si nos hubiéramos quitado un gran peso de encima. Quizás ella y Tyler habían vuelto con su madre. Si eso explicaba su ausencia, sería la mejor noticia de todas. Después de las novedades de Ali y Mike, sería lo más.
Mi duda era si Mike era demasiado tímido como para dar el siguiente paso, entonces Ali debería hacer lo que le había sugerido. Aunque yo misma, no había sido lo suficientemente valiente para pedirle a Jake que fuera mi novio, en el caso de Ali, tomar la delantera con Mike podría ser la mejor opción. Decidí consultarlo con Jake y ver qué pensaba él.
Cuando el autobús paró en la zona de la escuela, vi al tío de Alexa entrando al edificio y se lo señalé a Ali.
“Tal vez él trajo a Alexa y a Tyler a la escuela”, dijo Ali pensativa.
“Si, tal vez, pero ¿por qué estará entrando a oficina de la directora?
Ali se encogió de hombros mirándome, “Quién sabe, y ¡a quién le importa!”
Las dos lo dijimos justo a la vez riéndonos de lo más divertidas.
Todo le estaba saliendo súper bien a mi gemela. ¡Imposible estar más feliz!