Leyes del movimiento de Newton

Primera ley. Un objeto inmóvil tiende a seguir inmóvil, y uno en movimiento a seguir moviéndose. Es como cuando vas en bici: si está en movimiento, puedes seguir sin pedalear, pero si está parada continuará así hasta que la impulses.

Segunda ley. Cuanta más fuerza apliques a un objeto, más rápido se moverá. Aunque, si usas la misma fuerza con un objeto más grande, se moverá más lento. Por ejemplo, si estuvieras columpiando a Albert Einstein, iría mucho más lento que si me columpiaras a mí, Max, porque Albert es mucho más grande (tiene más masa) que yo. Fuerza = Masa x Aceleración.

Tercera ley. Por cada acción hay una reacción igual y contraria. Hagamos un experimento. Levántate e impúlsate hacia arriba con las piernas. Has saltado, ¿verdad? Eso es porque la fuerza que has aplicado al suelo también te ha impulsado en el aire.

Teoría de la relatividad

Esta teoría de Albert Einstein es mi favorita… aunque creo que eso ya te lo imaginabas. En realidad, son dos teorías. Una se llama «especial» y la otra, «general».

Relatividad especial

Los científicos descubrieron que la luz es muy friki: ¡no actúa como nada más en el universo! No importa lo rápido que te muevas o en qué dirección, la velocidad de la luz es siempre la misma. Esto confundía a los investigadores, hasta que Albert Einstein encontró la razón: ¡solo es posible si el tiempo se ralentiza!

Lo llaman dilatación del tiempo. Si vas a caballo, conduces un coche de carreras o pilotas un avión, al medir la velocidad de la luz es siempre la misma. Por lo tanto, el tiempo ha de ir más lento cuanto más rápido vayas tú. Es por eso que los astronautas de la Estación Espacial Internacional, que rodean la Tierra a 8 km por segundo, envejecen más lentamente que quienes viven en el planeta. ¡Alucina!

Relatividad general

La otra teoría de la relatividad de Einstein dice que la gravedad (la poderosa fuerza que nos mantiene en el planeta Tierra y no nos hace flotar hasta el espacio) y la inercia (un objeto en movimiento tiende a seguir en movimiento) son casi iguales. Por ejemplo, cuando un avión acelera por la pista, la inercia te empuja contra el asiento de una forma que parece la gravedad. Es por eso que los diseños de los vehículos espaciales del futuro tienen a menudo cilindros que giran; estos producen gravedad artificial. ¡Ahí es nada!

Efecto fotoeléctrico

Un fotón es un «paquete» de energía electromagnética. Es la unidad básica que compone la luz. En ciertos casos, los fotones son absorbidos por una cosa (los científicos la llaman materia), y el resultado es más energía, que sale en forma de calor. ¿Alguna vez has caminado descalzo por la acera? ¡Está que arde! Eso es porque el asfalto absorbe los rayos del sol (es decir, los fotones) y desprende calor.

A veces, cuando los fotones interactúan con la materia pueden soltar electrones. Esto recibe el nombre de efecto fotoeléctrico. Así fue como los paneles solares del Congo convertían la luz en electricidad. Albert Einstein ganó el Premio Nobel en 1921 por su explicación de este efecto. ¡Los Implementadores del Cambio ganarían un Premio Nobel a la amistad!

Algunos contenidos han sido creados por Room 228 Educational Consulting, con la profesora de la enseñanza pública Michelle Assaad como educadora responsable.