FIORELLA BUZETA

ACTIVISTA Y POLÍTICA

Cuando era niña, Fiorella solía jugar con sus hermanos en el patio que compartían con abuelos, tíos y primos. A pesar de que la situación económica del hogar era difícil, su familia se esforzaba para que ella y sus hermanos se educaran y fueran felices.

Cuando tenía doce años, la vida de Fiorella cambió. Mientras estaba en el liceo recibió un disparo accidental. A pesar de los esfuerzos de los médicos, la bala quedó alojada en su columna y Fiorella no pudo volver a caminar.

La solidaridad de mucha gente de todo el país hizo que pudiera acceder a un tratamiento de rehabilitación en Argentina que le permitió regresar y continuar su vida. Durante los primeros tiempos, su madre siempre le aconsejó que no guardara rencor:

—El poder está en tu interior —le repetía constantemente.

Comenzó a hacer deporte y se participó en el equipo nacional de hándbol en silla de ruedas. A medida que se fue integrando a distintos grupos, comprendió que la sociedad margina y excluye a las personas en situación de discapacidad y resolvió trabajar por un mundo donde nadie quede afuera. «Cambié mi forma de dar las batallas solitarias y me puse a participar de cuanto colectivo andaba en la vuelta: en la lucha por transporte accesible, la educación inclusiva, la oportunidad de trabajar, el derecho a rehabilitarse», cuenta.

Fiorella estudia Comunicación y llegó a ser la presidenta del Concejo de Participación de las personas con discapacidad. Recientemente fue electa edila departamental de la Junta de Montevideo.

Si bien hubo momentos difíciles, Fiorella todos los días encuentra en su interior la fuerza para trabajar por una sociedad equitativa, justa e inclusiva.

1 DE SETIEMBRE DE 1991

MONTEVIDEO

Ilustración

ILUSTRACIÓN DE LAURA CARRASCO

LA FORMA EN QUE NOS POSICIONAMOS FRENTE A LAS ADVERSIDADES ES PARTE DE LA SOLUCIÓN PARA SUPERARLAS. NO FRACASAMOS, APRENDEMOS CONSTANTEMENTE.

FIORELLA BUZETA