JUANA PEREYRA

INGENIERA

Había una vez una joven llamada Juana que amaba las matemáticas. En esa época no era muy común que las mujeres se dedicaran a las ciencias, se esperaba que su educación formara parte de la preparación para un futuro doméstico.

Sin embargo, Juana se enfrentó a las barreras de su tiempo y a la oposición familiar y se inscribió en la Facultad de Ingeniería de la Universidad de la República. Junto a su amiga Emilia Loedel, en 1920 se convirtieron en las primeras ingenieras de América del Sur.

Juana trabajó en el Ministerio de Obras Públicas y se especializó en la construcción de puentes y caminos. Fue profesora de física y matemática en la Universidad de las Mujeres y profesora en la Facultad de Ingeniería, ocupó importantes cargos en el Ministerio de Obras Públicas e integró la Academia Nacional de Ingeniería.

Además de su ejercicio como ingeniera, Juana participó en las luchas que las mujeres de su tiempo llevaban adelante para conquistar derechos. Se integró al Consejo Nacional de Mujeres y junto a Paulina Luisi trabajó incansablemente por la aprobación del derecho al voto femenino en las elecciones nacionales.

Juana no solamente planificaba y construía los puentes más importantes del país, también fue la creadora de puentes políticos y civiles. Con su coraje, pasión e inteligencia abrió senderos que estaban cerrados para que otras mujeres pudieran caminar con libertad.

8 DE NOVIEMBRE DE 1897 – 16 DE DICIEMBRE DE 1976

MONTEVIDEO

Ilustración

ILUSTRACIÓN DE LUCÍA FRANCO

CONSTRUIR PUENTES Y ABRIR CAMINOS.

JUANA PEREYRA