un poema real

(para mi amigo, Chuka)

alguien me dijo una vez

que cada hombre no es un poema

pero algunos hombres son poemas de y por sí mismos

eucaliptos y lirios

atienden su llegada

besos ligeros

traicionan su ternura

a veces un abrazo es testigo

de densos secoyas y cipreses

que crecen por el pacífico

las peñas muestran su fuerza

granadas enteras

su delicadeza

qué hacer con un poema en dos patas

cuyo tacto trae temblores

a su alma un hombre sensible y

extraordinario en este mundo

dame un momento solamente un momentoI

en su presencia

soy bendecida

una mujer en el reino de un poema

sobre dos patas


I. Cursiva en español en texto de partida.