Sale la señora Polonia de negro, con tontillo1, plumas etc. y un puñal en una mano y en la otra el pañuelo, a paso grave, y siguiéndola las señoritas Juanita, Rosa, Ribera y Vicenta, todas asustadas, y la música no cesa hasta empezar los versos.
Polonia .- ¡Chisss! Suspenda la música las dulces
cláusulas con que adula a los humanos,
dando lugar para que los asombros
conviertan las delicias en espantos.
Sustituya el horror a la armonía, 5
huya el placer a vista del estrago
y solamente quejas y sollozos
se escuchen esta noche en el teatro.
Juanita .- ¿Por qué tanto pesar?
Victoria ¿Por qué ese luto,
ese dolor profundo y ese llanto? 10
Polonia .- Porque murió sin duda.
Las cuatro .- ¿Quién ha muerto?
Polonia .- Nuestra esperanza.
Las cuatro .- ¿Pero cómo... cuándo?
Polonia .- Desde que se formó la Compañía,
testigos habéis sido en los ensayos
de nuestras ansias y solicitudes 15
para las diversiones de verano
Las cuatro .- Es así.
Polonia .- Pues son todas imposibles.
Victoria .- ¿Y tantas prevenciones3 ?
Polonia .- Se frustraron.
Juanita.- ¿Tantas comedias?
Polonia .- No tenemos dama.
Vicenta .- ¿Sainetes?
Polonia .- Sólo hay uno, y ese malo. 20
Juanita .- ¿Tonadillas?
Polonia .- La música no sirve
sin lo mordaz; vivir lo extraordinario.
Vicenta .- ¿La Compañía?
Polonia .- Toda está esparcida
Juanita.- ¿El Autor?
Polonia .- Como el más interesado
es el más triste, el más sobrecogido 25
de su rubor. En fin, que nos cansamos,
murió nuestra esperanza: ya lo dije.
Y para dolor vuestro solo añado
fallecieron con ella nuestro gusto,
interés, opinión celo y aplauso. 30
Vicenta .- La piedad de las gentes...
Polonia .- Será tedio
si con la novedad no la adulamos.
Las cuatro .- ¿Y no hay arbitrio4 ?
Polonia .- No, no hay más arbitrio
que acreditar la pena con el llanto.
Las cuatro .- Lloremos, pues.
Polonia .- Lloremos, y las cuatro 35
con las comunes quejas respiramos.
Se dispersan o apartan a un lado y con un alegre corosalen cantando ybailando las Señoritas Borda, Pulpillo, Mariana y Valdés, con el Autor,Merino, Robles y Ramos. detrás Espejo leyendo un papel como diario ydespués se van apareciendo los que quieran
Coro .- Afuera pesares
afuera cuidados
y disimulemos
nuestro sobresalto 40
con rostros alegres,
cantando y bailando
a la bienvenida
de nuestros Polacos.
Polonia .- ¿Qué es esto, Autor? ¿Compañía, 45
qué es esto? Pues ¿cómo? Cuando
hace tan pocos instantes
que os dejaba en el vestuario
entregados al dolor,
tan mudos y acobardados 50
que no hubo tan animosa
mujer, ni varón tan guapo
que se atreviese a salir
a exponer en el teatro
el digno de compasión 55
apuro en que nos hallamos
por la falta de la Dama
y otros defectos que callo
de funciones y sainetes
para empezar el verano, 60
¿cómo, pues, vuelvo a decir,
en un instante trocando
los afectos, salís todos
aquí tan regocijados?
Espejo .- Ha sido un consejo mío 65
que unánimes aceptaron
Polonia .- ¿Qué consejo?
Espejo .- Ellos lo digan
que yo estoy ahora embobado
con la novedad y el chiste
de un caprichoso diario 70
que se quiere dar a luz,
y su autor ha confiado
a mi discreta censura
para después publicarlo (Se sienta aparte)
Polonia .- Dilo, Paca.
Borda .- Que lo diga 75
el Galán.
Merino.- No, que ese cargo6
debe ser de la Autoría.
Palomino .- Sí, ese más tiene entre tantos.
Digo que cuando más tristes
a todos nos vio temblando 80
la salida, y escuchó
el tono de voz amargo
y estilo con que a las gentes
estaban desconfiando7 ,
dijo: ¡Qué gran disparate! 85
¿Quién a Polonia ha engañado
para que ella desengañe
al público del estado
deplorable en que nos vemos?
¿No ve que lo fuerza? Cuanto 90
menos dinero más freno
como algunos mayorazgos;
a menos razón, más voces;
cuanto uno es más mentecato,
más hablador; cuanto menos 95
banquete, más aparato;
y cuanto más afligidos,
hoy debemos presentarnos
más alegres. Acordó
después unas tres o cuatro 100
piezas nuevas y muy breves
que bastan para animarnos
el empeño de la noche
en algún modo; y sacando
las castañuelas después, 105
nos mandó que le sigamos
y nos sacó a todos hechos
unos locos al teatro.
Polonia .- ¿Y ustedes salieron?
Todos .- Pues8 .
Ramos .- El pensamiento no es malo. 110
Robles .- Lo que ahora nos hace falta
es que acabe de explicarlo.
Espejo .- La descripción con que empieza (Leyendo)
de los dominios del reino
pase, vamos adelante 115
a ver: “Amos y criados”
Borda .- Tío Pepe.
Espejo .- “Un caballero
necesita un secretario
que sepa guisar; peinar
y afeitar; ha de ser apto 120
para escribir y entender
el francés y el italiano;
ha de estar muy bien vestido
y ha de ir detrás de su amo.
Se le dará de comer 125
y dos pesos de salario.
Cualquier pretendiente a esta
conveniencia de que hablamos,
desde las nueve del día
se estará al fresco esperando 130
hasta la seis de la tarde
junto al canapé del Prado9 ,
que allí le irán a buscar”.
Palomino .- Tío Espejo, que ahora no estamos
para frioleras 10 .
Espejo .- Yo 135
ahora qué falta hago?
Merino .- ¿Y a dónde están Aldovera
Casas, Chinita y Mariano?
Ramos .- En una boda.
Merino.- ¿De quién?
Ramos .- De una moza de su barrio 140
que tiene una gran merienda.
Espejo .- ¡Qué tal llenarán el pancho!
Palomino .- ¡Habrá tal descuido11 ! ¿ Y dónde
es? Les enviaré un recado.
Polonia .- ¿Tienen papel12 ?
Palomino .- ¡Qué sé yo! 145
Primero es que conozcamos
lo que se va a hacer Espejo.
Espejo .- “Una moza de quince años
recién venida a Madrid
sin camisa ni zapatos, 150
desea hallar conveniencia
en que tenga a los tres años
dos cofres de ropa blanca
y de seda con sus cabos
correspondientes, un novio 155
y tres cortejos o cuatro.
Sabe hacer de todo, menos
lo que es labores de manos,
planchar, guisar y barrer;
darán razón junto al Rastro13 160
en la taberna-figón
donde la depositaron
para que esté recogida14 ”.
Merino .- ¡Hombre! ¿Querrá usté escucharnos?
Espejo .- Mientras que no vengan todos 165
prosigo con mi diario15 .
“Un título necesito,
para educar con cuidado
un señorito que tiene
hijo único, de un ayo 170
que sepa leer y escribir,
y que está muy mal criado.
Gozará por sueldo y gajes
mil y cien reales cada año.
El susodicho sujeto 175
necesita de un lacayo
hábil y de buena estampa;
se le dará todo cuanto
pida para su decencia
y además de mil ducados 180
que se regulan los gajes,
cuatrocientos de salario. “
Ramos .- ¿Dónde vive? que al instante
voy a ver si yo le agrado.
Espejo .- Almonedas16 . ¡Lo que aquí 185
habrá de bueno y barato!:
“Venta pública de efectos
y de bienes que han quedado
por fin y muerte de Don
Ginés Dulzaina, abogado 190
en esta corte: seis capas,
cuatro vestidos de majo,
setenta y dos redecillas,
un reloj con veinticuatro
sellos, diez pares de hebillas 195
de la última marca. Autos
de Calderón, treinta tomos
de comedias todas varias17 ,
novelas de Zayas18 y otros19 ,
pero ninguno del caso20 200
ni de leyes; un violín
y un tiple desencordado,
diez libros de contradanzas21
y una golilla22 .
Borda .- ¿Nos vamos
allá dentro o calla usted? 205
Espejo .- Vayan ustedes hablando;
yo decía... (Sale Tadeo)
Tadeo .- ¡Autor! ¡Autor!
Haga usted bajar por cuatro
compañeros al portal
que juzgo vienen borrachos. 210
Palomino .- ¿Y quienes son?
Tadeo .- ¡Escuchad,
que ellos lo vienen cantando!
(Salen Chinica, Aldovera, Casas y Mariano borrachos moderados,cantando los cuatro las seguidillas hechas a propósito que siguen)
No tengamos camorras,
ni haya alborotos,
que el vino de La Mancha 215
se pinta solo.
Casas .- ¡Que te desentonas!
Aldovera .- No me desentono
que tengo un oído
yo, como un demonio. 220
Chinica.- Una cosa es uno
y otra cosa es otro.
Mariano .- O no ha de ir ninguno
o habemos 23 de ir todos.
Los Cuatro .- Que el vino de La Mancha 225
se pinta solo.
Mariano .- ¡Cógete la copa!
¿No ves que hace lodos24 ?
Aldovera .- ¡Deje usted que llueva,
que así no habrá polvo! 230
Casas .- ¡Amén, Dios me libre
de lidiar con tontos!
Chinica .- ¡Señores! ¿No basta
que lo diga el otro?
Los Cuatro .- Que el vino de La Mancha 235
se pinta solo.
Palomino .- ¡Sean ustedes bienvenidos,
señores!
Chinica .- Hasta las cuatro
no se empieza la comedia,
con que no hay que regañarnos. 240
Merino .- ¡Hombres¡ ¿Es esto razón?
¿De dónde venís?
Casas .- De ahí25 bajo
Mariano .- ¡Muy buenos días, señores!
Aldovera .- Si usted viera qué fandango
en un santiamén y menos 245
seis guitarras se pintaron...
Merino .- ¿Todo está bueno?
Casas .- ¡No hay
que decir que se han portado26 !
Robles .- ¿Y qué tal vino?
Chinica .- Eso sí,
solamente que era blanco. 250
Polonia .- ¿Y es hora de venir esta
y de ese modo al trabajo?
Chinica .- Mande usted luego encender27 ,
que yo ya vengo peinado.
Polonia .- ¡Estamos buenos!
Espejo .- “Se vende 255
un deshabillé28 encarnado
con chinela29 de la misma
tela, diecisiete frascos
vacíos y trece llenos
de agua de olor; un legajo 260
de recetas, dos arrobas
de polvos empapelados;
muchos botes de pomada
algunos peines usados,
de la madera común 265
diez cajas para tabaco,
un clave, un perro de lanas,
una ama vieja y un gato;
se vende por la justicia
y son bienes que quedaron 270
por muerte y fallecimiento
del abate Don Eustaquio
Zicato, pretendiente a todo
menos a canonicato30 .
Chinica .- ¿Qué hace tanta gente junta? (Casi en s í) 275
Robles .- ¿Señores, se han serenado
ustedes?
Chinica .- Aquí31 está fresco
por esta noche.
Polonia .- Yo aguardo
que lo esté más las que siguen.
Palomino .- Diga usted ese diario, 280
Espejo, y vamos a ver
la idea que usté ha apicarado32 .
Merino .- ¿Qué comedia es?
Espejo .- ¡Dale bola!
Si dije todo al contrario.
Lo que a mí me había ocurrido 285
solo puedo intitularlo
De todo y de todo nada
Según el uso en que estamos
de graduar34 por cualquier cosa35
las piezas en solo un acto. 290
Merino.- Ese “de todo” es preciso,
amigo mío, probarlo.
Espejo.- Una Loa
Merino.- ¿Y donde está?
Espejo.- En saliendo allí turbados
si hay función, si no hay función, 295
y retirarse gritando
unos y cantando otros
sin letra y desentonados,
tenemos Loa; ¿después,
no hay una pieza...?
Chinica .- ¡Ya caigo!36 , 300
aquí a la mano derecha
con una ventana al patio.
Polonia .- ¡Déjanos!
Espejo.- ...Que se intitula
“ El padrino mentecato
y El pretendiente enfadoso”? 305
Merino .- Polonia y yo la estudiamos
con la Valdés y Aldobera
Palomino .- ¿Y la tenéis pronta37 ?
Merino .- En cuanto
nos mudemos de vestido,
para hacerla, no hay reparo. 310
Espejo .- ¿No hay otra pieza llamada
“La India”, de gran boato,
de acción y de versos serios,
por la certeza del caso
y que suena a disparate 315
conforme se va escuchando?
Borda .- ¡Esa yo la sé! aunque temo
el capricho, por lo raro,
y el estrenarla, no sea
que nos tiren algún banco. 320
Palomino .- No lo creas, que, antes bien,
al vernos buscar este año
modo de agradar al pueblo,
dirán que nos esforzamos.
Mariana .- En la hora del esfuerzo 325
no debe dejar el campo
la familia de García,
y así, ya que yo no bailo
porque dicen que estoy gorda,
mis tres chicas, que están flacas, 330
entre esas dos piececitas
para divertir el rato
bailarán una alemanda38
graciosa que han estudiado.
Todos .- ¡Bien!
Espejo .- “Se vende una armería 335
de fuego y los demás trastos
de cazar con red, al aire,
en batida y con reclamo39
a buen precio, bienes libres
por la muerte abintestato40 340
del doctor en medicina
Don Juan de Mata y Catarro
Tadeo .- ¿No les basta a estos señores
lo que matan en poblado,
sino que también nos quieren 345
hacer mala obra en el campo?
Merino .- ¡Por amor de Dios, Espejo!
Espejo .- Pues si ustedes me han cortado
la oración, ya no me acuerdo.
Palomino .- Hasta lo dicho, llevamos 350
Loa, pretendiente, baile
y La India.
Polonia .- Yo me encargo
de una bella tonadilla
después.
Merino .- ¡Viva!, que entre tanto
nos prevenimos nosotros 355
a concluir, acobardados
con un nuevo Fin de fiesta
que se presenta aprobado
por la principal nobleza
de la corte, y esperamos 360
que del público no sea
esta noche reprobado.
Polonia .- Espero que no; no obstante
que41 para desempeñarlo
nos faltan las muchas gracias 365
de aquellos que le estrenaron,
y a mí la primera.
Chinica .- ¿Con que
estamos desocupados42 ?
Ramos .- ¿Y ustedes más frescos43 ?
Aldovera .- Yo
estoy como un Alejandro. 370
Casas .- Yo estoy hecho un Marco Antonio
Merino .- Yo, un emperador sin Marco.
Chinica .- Y yo un Manolo, que fue
la honra del género humano.
Todos .- ¿Pues qué resta?
Palomino .- Que a Madrid 375
y al auditorio pidamos
permiso para servirle.
Borda .- Eso lo están deseando;
lo que hay que pedir es que
nos perdone y nos de aplausos. 380
Aldovera .- ¡Dios lo quiera! y que no empiecen
de la crítica los bandos
a desaminar44 autores
y aburrir apasionados.
Chinica .- Por lo mismo un caballero, 385
título de aquellos rancios,
tan discreto como él solo,
tan festivo como el mayo45 ,
por divertir sus pesares
en uno de sus palacios 390
reconociendo sus obras
le decía a Dios postrado:
“Os suplicamos a gritos
que no nos dejes caer
en las manos de eruditos 395
que deshacen los escritos
y no los saben hacer”.
Palomino .- ¡Hermosa copla!
Chinica .- Es prestada,
no crean que la he robado.
Espejo .- La he de copiar y la tengo 400
de añadir en el diario.
Robles .- ¿Qué falta pues?
Merino .- Trabajar.
Polonia .- Y que se digne animarnos
el público para que
de su favor confiados, 405
Todos .- felices aseguremos
el interés y el aplauso.
Fin.