¡Asombroso! ¡Increíble! Lo que te espera al llegar a Axle te maravilla. La gente está mejor. La fiebre ha remitido. La civilización vuelve a ponerse en marcha. Los axleianos te reciben rebosantes de felicidad. Curiosamente, la cura para la enfermedad era sencilla: reposo absoluto bajo la luz de las tres lunas del planeta y tres semanas sin comer sólido, tomando solo líquidos con moderación. Sencillo, antiguo y efectivo.Ya te has librado de la enfermedad y tienes todo el futuro por delante.
FIN