Era una noche de verano y en la
amplia estancia con ventanas que daban
al jardín hablaban del pozo negro.
Virginia Woolf
¡Que Dios reverdezca mi memoria!
Charles Dickens
Por muy vasta que sea la oscuridad
debemos aportar nuestra propia luz.
Stanley Kubrick
Pensé en esa persona,
él o ella, como llevándome a un país
lejano elevado soleado donde supe que ser feliz
solo era un momento, una frágil llama en la hoguera
que no obstante reducía a cenizas toda la tristeza
si pudiera, un tamiz de escoria como aquella por la que lloramos
mientras los féretros se hunden con espantosa indiferencia
en el fragor, en el humo, en la luz, en casi nada.
Esa casi nada que celebro y escribo.
Edwin Morgan
¡Oh, siento su calor!
William Shakespeare