La calle en donde se encontraba la dirección que me dieron estaba oscura y desierta cuando nos dejó allí el taxi a mi esposo y a mí, a eso de las diez de la noche. Percibí el sonido de sirenas en la lejanía, y también el del pulso inconfundible de la bachata latiendo en el aire tranquilo de la noche. Momentos después, el productor y bachatero Lenny Santos me explicó que ese ambiente le era integral a la bachata moderna, forma a la que él mismo ayudó a dar vida, y que sigue tocando y produciendo: “Nací y crecí en el Bronx, de hecho, a unas dos o tres cuadras de aquí. Ahora vivo en el norte del estado … [de Nueva York] … pero tengo mi estudio aquí, porque aquí me surgen todas las ideas … todo viene de aquí. No puedo hacer música en frente de los venados y las ardillas. Necesito oír las sirenas y el ruido”.1
En tal ambiente, la bachata se ha evolucionado para expresar las realidades de estas nuevas generaciones de dominicano-americanos. Es una fusión de idiomas—las letras son una interacción del español y el inglés—y de influencias musicales como el blues, pop, rock y reggaetón que la complementan. Más tarde, los músicos enfatizaron “las progresiones del R&B y los efectos de sonido infundidos por el R&B” juntos al “ritmo marcado por un bombo durante toda la bachata”2 para hacerla urbana. La pegada internacional de la bachata moderna y urbana ayudó a transmitir el género por todo el mundo.3 La bachata moderna y de la corriente dominante es representativa de lo que significa ser dominicano dentro de un entorno transnacional y también influyó en un revaloración del género en su contexto tradicional.
Aunque los hijos suelen rechazar la música de sus padres como algo pasado de moda, los jóvenes dominicano-americanos escuchaban cada vez más la bachata.4 Con frecuencia eran aficionados en secreto, tal como sucedía en la República Dominicana. El bachatero moderno Henry Santos, que se graduó en una secundaria estadounidense en 1996, recuerda, “Uno veía a mis amigos de la secundaria escuchando bachata, pero a escondidas. Se escondían…. Aun en mi casa, recuerdo que mi papá me decía, ‘En mi casa no se escucha bachata’”.5 Estos jóvenes dominicano-americanos aceptaban cada vez más la bachata como una música simbólica de sus raíces étnicas durante los 90,6 escuchando y coleccionando las grabaciones de bachateros tales como Antony Santos, Luis Vargas, Joe Veras y Frank Reyes.7
Estos jóvenes aficionados no solo eran consumidores de la música sino que se hicieron bachateros también, y en sus manos y voces, transformaron la bachata típica con las influencias musicales y lingüísticas que los rodeaban para darle vida a la bachata moderna. Aunque estos músicos no eran de familias privilegiadas en el contexto norteamericano, sí tenían acceso a oportunidades que no tenían los bachateros en República Dominicana,8 incluyendo ventajas lingüísticas que ayudaron a llevar a la bachata a un mercado más amplio: “nacieron y crecieron en Estados Unidos. Hablan inglés, conocen muchas más palabras cultas que esos muchachos del campo que no saben”.9 En sus manos, “la bachata tiene muda de piel…. Pero con la consciencia de lo que es la bachata original”.10 Su bachata se basaba en su comprensión y su interpretación de la esencia musical del género.11 Henry Santos afirma, “Para hacer la bachata moderna, hay que conocer el alma de la bachata tradicional”.12
Para estos inmigrantes, la vida también era una mezcla de idiomas, y el espanglish en las letras de la bachata moderna, más que un esfuerzo de mercadotecnia, es una realidad cotidiana. Lenny Santos describe esta mezcla de español e inglés como representativa de quiénes son: “queremos mostrarle a la gente que somos los dos. Somos americanos y latinos. Y queremos mostrarles de dónde somos, cómo nos criaron, nuestra cultura. Ya sabes, yo hablo espanglish”.13 Lenny reitera que tal cambio de código—“el uso alternado de dos idiomas”14—depende del destinatario: “Ya que tú hablas español también, sencillamente intercambio el español y el inglés…. Así es que lo hacemos con la música”.15
Tal como sucede en la literatura, el cambio de códigos en la música “representa una realidad en la que hay segmentos de la población que viven entre culturas e idiomas”.16 Estos cambios no son el resultado de un uso descuidado del idioma, sino que reflejan las realidades de gente bilingüe que cambia de un idioma a otro para encontrar una palabra o frase que mejor exprese un pensamiento o concepto.17 Tal como observa Grosjean, el cambio de códigos “también se usa como una estrategia social o de comunicación, para demostrar la participación en la conversación … [y] … para señalar la identidad del grupo”.18 El inglés es el idioma principal o de base para muchos de estos migrantes de segunda y tercera generación, mientras que el español es su segundo idioma. El bachatero Toby Love observa:
Supongo que así nos criaron—hablamos español con nuestras familias, y en las calles con nuestros amigos, hablamos más inglés…. Ya tú sabes, muchos de mis amigos latinos no hablan el español con soltura, así que tengo que hablar inglés…. Quería devolverle la música a mi gente, de dónde soy…. Así es como hablamos normalmente.19
El cantautor Henry Santos describe el uso del espanglish como el resultado de las calidades rítmicas y melódicas de las palabras. Según él, el colocar las palabras con cierta melodía es “como un rompecabezas … la melodía me dice ciertas cosas…. Y si está en inglés o español, verdaderamente no me puedo sentar y decirte, ‘Te voy a escribir una canción en inglés ahora’. Porque así no funciona…. Nace por sí misma”.20 El unir las palabras al ritmo de la melodía es un proceso natural y orgánico que no se puede forzar.21
Todas estas innovaciones llegaron con su propia dosis de crítica y discriminación de los puristas. Algunos aficionados y músicos criticaban a los bachateros modernos por haber dañado su música con la inclusión del inglés, otros instrumentos, y diferentes géneros,22 tal como hicieron los aficionados del bolero con las primeras bachatas. Otros la pensaban demasiado refinada y decían que le faltaba “grajo”.23 De todas maneras, la bachata moderna atrajo rápidamente a un grupo grande y fiel de seguidores entre los jóvenes dominicano-americanos y dominicanos, y también entre los públicos al nivel mundial. La creciente popularidad internacional de la bachata dio la vuelta para llegar a la República Dominicana por rutas transnacionales, y el poder del consumidor y las prácticas de consumo de los migrantes ayudarían a darle un empujoncito a la bachata para que terminara al frente del ámbito musical internacional.24
Los cuatro miembros del grupo Aventura ofrecieron la primera expresión importante de la bachata moderna. Se proclamaron los “Kings of Bachata” (Reyes de la Bachata) o “K.O.B.” y le dieron un nuevo sonido y una nueva cara a la bachata que son únicas a la experiencia de los migrantes dominicanos y sus hijos en Nueva York. Tal como muchos de sus aficionados, el cantante principal, Anthony “Romeo” Santos, el guitarrista y arreglista Lenny Santos, y el bajista Max “Mikey” Santos (Max Agende) nacieron en el Bronx; el cantautor Henry Santos nació en Moca, República Dominicana y migró a Nueva York a los trece años. Como adolescentes, eran aficionados de los innovadores de la bachata, Antony Santos y Luis Vargas, y de los bachateros románticos, tales como Joe Veras y Raulín Rodríguez.25 Recuerda Lenny Santos, “La bachata empezó a gustarme después de oír a Antony Santos y a Luis Vargas tomar por asalto toda de la zona de Nueva York y a la comunidad dominicana. Ya esos otros hicieron su trabajo—gente como Paniagua y Luis Segura. Pero aquí, la gente estaba señalada, y todavía no formaba parte de la corriente principal”.26 El distanciamiento famoso entre Antony Santos y Luis Vargas le atrajo más atención a la bachata tanto en el país como en el exterior. Mientras Lenny escuchaba cada vez más bachata, la guitarra le llamó más la atención, y se preguntaba cómo los bachateros le sacan esos sonidos a su instrumento.27
Lenny empezó a ver videos de su ídolo, Antony Santos, incluyendo los videos personales de sus parientes que asistían a conciertos cuando visitaban la República Dominicana. Asombrado por el sonido de la guitarra, Lenny se compró una guitarra por veinticinco dólares en una farmacia local, y le pidió a su primo que le enseñara a tocarla. Lenny practicaba los tres acordes que le enseñó su primo y los tocaba mirando los videos y discos de Antony Santos, y también los de otros géneros tales como el rock y el heavy metal; siempre se esforzaba en imitar lo que veía en esos videos. En la medida que se desarrollaban sus capacidades, su deseo de presentarse en público seguía creciendo. Cuando aún estudiaba en la secundaria, formó su primer grupo, Sueños, con su hermano Max en el bajo, otro primo como cantante principal, y varios amigos que tocaban el bongó, la güira, el piano y la batería. En ese entonces, el grupo era un pasatiempo para Lenny, importante, pero no le parecía una posible profesión.28
El grupo practicaba en un club social puertorriqueño y tocaba frente a los negocios locales con una caja en el suelo para recibir cualquier dinero que dejaran los que pasaban por allí. Un día, el pianista de Lenny le habló de la posibilidad de incluir a un nuevo cantante en el grupo. Lenny recuerda que insistía ese amigo, “‘Siempre está cantando. O sea, canta como un pájaro…. Tiene una voz dulce…. Es que suena tan único’”.29 Así que Lenny invitó al cantante, Anthony “Romeo” Santos, a practicar con el grupo, pero primero, Romeo lo visitó en su apartamento en el Bronx. Los dos compararon a sus bachateros favoritos en la escalera antes de que Romeo le ofreciera una muestra al cantar un tema de Antony Santos. “Estaba asombrado”, recuerda Lenny. “Y con ese eco que te da un pasillo, estaba como, 1guau! Este tipo suena fenomenal. Este muchacho es impresionante!”.30 Y así se unió Romeo a la agrupación.
El grupo dio su primera presentación en el club social donde practicaban. El evento era informal, sin publicidad ni un orden específico de canciones, y los dos cantantes principales se turnaban. Poco después, el primo de Lenny dejó el grupo, dejando a Romeo como el único cantante principal; el primo de Romeo, Henry Santos, se unió como cantante también. El grupo se cambió al nombre de “Los Tinellers”, una pronunciación dominicana de la palabra inglesa teenagers, o “adolescentes”. Tocaban bachatas conocidas en los eventos locales. Con el pasar del tiempo, empezaron a ensayar los temas compuestos por ellos mismos, y eventualmente, grabaron su primer álbum, Trampa de amor. Aunque no llegó lejos el álbum, eventualmente les abrió la puerta cuando Romeo se lo tocó al productor, Julio César. Este reconoció su talento, firmó un contrato con ellos, y cambió su nombre al grupo Aventura para representar la atracción nueva y fresca de un grupo de bachata compuesto por jóvenes dominicano-americanos. En 1999, Aventura sacó su álbum, Generation Next, el cual incluía nuevas versiones de varios de los temas de su primer álbum.
La música de Aventura refleja sus experiencias de crecer rodeados por múltiples idiomas, culturas y ritmos en el Bronx. Para los integrantes del grupo, la vida siempre era un collage de diferentes sonidos que los rodeaban en casa y en la calle.31 Lenny Santos cita la presencia constante de la música en su vida como su motivación: “Me metí en la música porque por todas partes, solo se oía música. Sales, y oyes a la gente con la música subida en los autos … hip-hop, R&B, música rock…. Pero en casa, oía música de merengue y bachata. Era una mezcla”.32
Aventura aporta estos sonidos innovadores a su bachata, la cual se inspira mucho en los arreglos de Lenny Santos: “La primera persona que de verdad le metió sonidos a la bachata y que tenía el valor de cambiarlo todo, en términos de implementar los efectos de guitarra, y del hip-hop y R&B, fui yo—Lenny”.33 Lenny señala al bachatero Antony Santos como su influencia principal al crear el sonido nítido de punteo en las cuerdas, por bajarlas y tocarlas con el toque del pulgar.34 Con este punto de partida, Lenny experimentó para crear su propio sonido al incluir la guitarra eléctrica, el pedal wah-wah (efecto que imita la voz humana) y el trémolo.35 Lenny identifica los sonidos nuevos e innovadores, la instrumentación y los temas de su bachata moderna como los elementos que realmente la separan de la bachata típica: “Usamos más armonías…. Hay más R&B y rock. Usamos más instrumentos—sintetizadores y cuerdas—y ritmos en la bachata…. Somos los primeros que incluimos canciones sociales y temas actuales”.36
Además de sus innovaciones musicales y líricas, Aventura mostraba una cara contemporánea y joven de la bachata sin perder nada del sentimiento tan importante para el género. La portada de su primer disco, Generation Next (1999), declara que el grupo representa “La nueva generación de la bachata”, mostrándolos en jeans, con Romeo llevando una camisa blanca de manga larga desabrochada y Lenny, Henry y Max en camisetas blancas sin mangas. Este look se contrasta con las portadas de los primeros discos de bachata que mostraba a los bachateros como Rafael Encarnación en traje y corbata. El atuendo de Aventura, tanto en sus portadas como en el escenario, refleja ese look contemporáneo, con su vestimenta común de jeans, camisetas, sudaderas con capucha, cachuchas de béisbol con la visera plana o gorros, sacos informales, y chalecos. Cuando el grupo se vistió con traje y corbata para de portada de K.O.B. Live (2006), fue para enfatizar su imagen como líderes del último grito juvenil. Esta portada en blanco y negro mostraba al grupo con el corte de pelo mop-top, trajes de la época de los Beatles, y corbatas delgadas, lo cual enfatizaba su papel de ídolos. El sabor neoyorquino de la bachata de Aventura también se reitera con las portadas que hacen resaltar un trasfondo urbano y los edificios de Nueva York recortados contra el horizonte.
Para algunos aficionados puristas de la bachata, la instrumentación en los temas de Aventura, además se sus letras en espanglish y la inclusión de otros géneros como R&B y hip-hop, le ganaron la crítica y las quejas de que el grupo “‘arruinaba nuestra música’”.37 Los de Aventura ni siquiera se inmutaron cuando les dijeron que no eran más que una boy band de la bachata, o sea un versión dominicana del grupo norteamericano N’Sync.38 Siguieron adelante con su estilo innovador, y el título de su segundo disco, We Broke the Rules, es uno que responde a los que decían que Aventura había estropeado o desvalorado la bachata.
El look y el sonido de Aventura resonó con una generación joven de los consumidores dominicanos y dominicano-americanos, y también con un público latino más amplio y otro mundial. Tal como señala Larry Rohter, “Según el censo del 2010, la población hispana de los Estados Unidos asciende a más de 50 millones, lo cual los hace el grupo minoritario más grande de la nación. De los que tienen 18 años o menos … más del 90 por ciento nacieron en este país, y muchos son bilingües y biculturales”.39 Tal conexión con un mundo multicultural y multilingüe es esencial para la popularidad de Aventura en el contexto dominicano-americano. Leila Cobo de Billboard explica la atracción de Aventura por medio de un paralelo con la estrella tejano-americana, Selena Quintanilla, “‘quien era de Tejas y le hablaba a la gente que se parecía a ella…. Romeo atrae a un público que se parecía a él y que no veía a otra gente como ellos en el escenario’”.40 Los temas comunes de la bachata—el amor perdido, la penuria, el sufrimiento, y el deseo de algo mejor—sazonados con los temas y las realidades del siglo XXI, resuenan con los hispanohablantes de diferentes orígenes. Cuando se toca por medio de las experiencias dominicano-americanas, el sonido único de Aventura apela a los migrantes en general.
Aun con las innovaciones instrumentales y la mezcla de idiomas y géneros, el estilo sentimental de larga tradición bachatera además de los temas del amor, pena y desilusión también están presentes en la música de Aventura. Por ejemplo, la voz narrativa de “Cuándo volverás”41 canta de su abandono inmerecido, y se pregunta lastimeramente en dónde se encontrará su amor y cuándo volverá. De la misma manera, el narrador de “Por un segundo” lamenta su amor perdido, y describe su romance como un cuento de hadas en el cual él tiene el papel estelar del rey, y su amada juega el papel de una princesa. El hablante de “Dile al amor” conversa con Cupido y lo critica por no dar en el blanco con sus flechas encantadas. “Ella y yo” retrata la doble traición de la mujer y un amigo. En este reggaetón con Don Omar, un hombre tiene que enfrentarse a la realización amarga de que su mujer le fue infiel con su amigo. Antes de que se revele la verdad, el esposo disculpa las acciones adulteras de su amigo y le recuerda que vale la pena luchar por el amor, sobre todo si el esposo de su amante ya no la quiere. El esposo se retracta cuando la verdad sale a la luz. Así, esta canción presenta un doble estándar del machismo: seducir a múltiples mujeres es aceptable con tal de que no se trate de la mujer de uno.
El amor figura como tema central en otras canciones de Aventura. En “Un beso”, el narrador relata como Cupido dio en el blanco con su flecha con un beso de su amada. De la misma manera, el poder redentor del amor es el enfoque principal de “Princesita”. La voz narrativa admite que antes era un sinvergüenza que iba de flor en flor. Ahora, frente al amor purificador de la mujer, jura dejar esa vida atrás para crear un futuro a su lado. El amor del narrador se ha vuelto una obsesión en la bachata del mismo título, “Obsesión”. Ya no tiene amigos y perdió el sentido de la realidad, y aunque insiste que lo que siente es amor, de la misma manera la mujer asegura que se trata de una obsesión.
Aventura también canta de las situaciones que reiteran los papeles sociales propios de cada género, tales como el machismo y el marianismo.42 Su merengue, “Mujeriego”. presenta los elementos centrales del machismo. La voz narrativa de este es la del conquistador por excelencia que admite que sale con dos mujeres a la vez. Se dirige a un grupo de oyentes masculinos y se perdona sus acciones al declarar que es mujeriego por haber nacido hombre, y sobre todo, por ser hombre dominicano. Insiste que Dios le dio esta característica, y se disculpa al insistir que no le miente a ninguna de las mujeres que seduce. Cuando sus oyentes lo reprochan, justifica sus acciones al indicarles que no es el único que tiene más de una mujer, y sigue con una lista de culpables.
Aventura abrió nuevos caminos al tratar temas sociales en su bachata. “No lo perdona Dios” relata la situación contemporánea de una mujer que tiene la libertad de optar por abortar a un hijo concebido fuera del matrimonio y en la pobreza; a la vez, subraya los papeles tradicionales de la familia y la importancia aún más amplia del papel de madre de la mujer. En esta canción, el narrador critica severamente a su pareja por decidir abortar, aunque ya no están juntos. Su selección de palabras la describe de ignorante, sin corazón e insensible. Declara que su antiguo amor mató a un inocente quien, como lo esperan muchos padres dominicanos, pudiera haber crecido para ser pelotero o bachatero; por toda la canción, enfatiza su pérdida y la oportunidad de ser padre que perdió. Pone en tela de juicio sus razones por abortar, las que dice ser excusas: su arrepentimiento por su amor fracasado y su deseo de no traer a un niño al mundo en la pobreza. Por lo tanto, “No lo perdona Dios”, aunque presenta una situación contemporánea, refuerza los papeles y valores sociales tradicionales de ambos, hombres y mujeres.
“Amor de madre” apoya la construcción de la mujer como una madre que sufre y lo aguanta todo por el bien de su familia. En esta canción, una madre soltera se encuentra en apuros económicos. Descubre que no es suficiente el bienestar social, y se mete en la prostitución—su única opción, según la canción—para mantener a su hijo. Los esfuerzos de la madre de asegurarse de que nunca le falte nada a su hijo sirven para consentirlo: manejo un auto nuevo y ropa de la marca Armani. La madre tiene telarañas en los ojos con respecto a las acciones de su hijo, quien eventualmente está encarcelado por asesinato. En esta canción, se disculpan las acciones de la madre por su amor de madre, a la vez que se critica al hijo el no haber reconocido el cariño y el sacrificio de su mamá a tiempo. Juntas, estas representaciones refuerzan los valores tradicionales y propios de cada género.
En contraste, “Hermanita” critica la violencia doméstica. En esta canción, la voz masculina trata de hacerle ver a su hermana la realidad de su situación. La selección de palabras es directa y honesta, retratando ambos, el abuso físico y el emocional de la mujer golpeada. El culpable se retrata como un monstruo, una rata y un perro—un borracho cruel a quien no le importa nada su pareja ni sus hijos. A pesar de este ambiente violento, este tema aún reafirma los valores familiares, pues el narrador recuerda a su hermana que son familia y se ofrece para poner en su lugar al hombre abusivo.
El tema de la mujer sirena que lleva al hombre por mal camino es central en “Su veneno” y “Peligro”. En “Su veneno”, la voz masculina acusa a su amada de envenenarlo con sus besos y de quitarle su sano juicio y su sentido común. Ya no controla sus acciones ni sus decisiones y es incapaz de resistirse a su atractivo venenoso. En “Peligro”, la mujer infiel es descrita como una serpiente peligrosa, una diabla vestida de mujer. Ella engaña al narrador inocente para aprovecharse de sus sentimientos y su dinero.
El Grupo Aventura fue muy exitoso al hacerle llegar la bachata a un público más amplio de la corriente dominante que incluye a anglohablantes. En septiembre de 2007, el grupo hizo historia al ser el primer grupo de bachata que tocó en Madison Square Garden.43 Dos años después, Aventura logró otra primicia para la bachata cuando fueron invitados a presentar “Su veneno” ante el Presidente de EE.UU. y la Señora Obama en el concierto “Fiesta Latina”, parte de una serie de presentaciones en la Casa Blanca norteamericana (In Performance at the White House). Aventura hizo resaltar sus raíces dominicanas—“Queremos compartir nuestra cultura dominicana con ustedes”—y su crianza en el Bronx—“1Ya llegó el Bronx!”.44 Un producto único de la experiencia dominicano-americana, Aventura cumplió con la meta del programa Fiesta Latina: “celebrar el lugar de la música latina en el tapiz rico y lleno de colores que es la cultura norteamericana”.45
En la actualidad, Aventura ha tomado lo que se ha llamado una “pausa”.46 Los cuatro integrantes siguieron sus propios caminos después de sacar su álbum, The Last (El último) (2009), el cual identificó ACROARTE como uno de los 100 esenciales47 y que describió como “el mejor álbum de su transcendental discografía”.48 Estos artistas cambiaron por siempre el mundo de la bachata: “Fuimos los que innovamos la bachata moderna. Hicimos que la gente del mundo escuchara este ritmo que se llama bachata…. Se la enseñamos al mundo…. Ampliamos el mercado y lo abrimos”.49 El Grupo Aventura se disolvió, pero sus fundadores siguen influyendo en la bachata, como veremos a continuación.
Octavio Rivera, cuyo nombre artístico es Toby Love, nació en el Bronx, de padres puertorriqueños. Love es de una familia musical y describe el ambiente familiar como uno en donde “siempre había música, sea Navidad o un cumpleaños…. Así somos como familia”.50 Love empezó a tocar varios instrumentos de percusión antes de su estreno como cantante como un candelero en una producción musical de La bella y la bestia a los nueve años.51 El papá de Love tenía un grupo de merengue, y Love lo acompañaba a sus presentaciones, tocando el bongó y la güira cuando era niño. Más tarde, Love cantaba y tocaba güira en su propio grupo de merengue.52
Empezó su carrera formal a los 16 años como cantante con Aventura, antes de que lanzara su propia carrera como solista en el 2006. Admite que la primera música que le gustó era el R&B, y también la música pop de Michael Jackson, aunque su familia escuchaba una variedad de géneros. Para Love, la bachata le significaba una respuesta dominicana al ritmo y amargue que tanto le gustaba, y cuando su amigo, Max Agende, lo invitó a ser parte del grupo, se unió sin firmar ningún contracto, cumpliendo los deseos de sus papás.
La bachata de Love combina el rock suave, el R&B y el hip-hop con la bachata y lo interpreta todo con su voz tierna. Love enfatiza que quería diferenciarse de Aventura con algo nuevo, así que cuando grabó un sencillo con el rapero Pitbull, le dio el nombre de “crunkchata”.53 Love describe su estilo como uno “más callejero” que el de la bachata tradicional y moderna.54 Según Love, él empleó por primera vez el vocablo “urbano” en una entrevista para describir las fusiones con la bachata. Se pegó el nombre y ahora, se usa con frecuencia para referirse a toda la bachata moderna.55
La bachata de Toby Love contiene muchos de los temas comunes del amargue, mientras que con su apodo—“la Voz de la Juventud”—y su atuendo de última moda reitera una conexión con una nueva generación de consumidores de bachata. El desamor sigue como tema común, pero Toby Love lo canta en inglés y español. El narrador de “Lejos” condena a la mujer como una seductora cruel que lo hechizó y se aprovechó de él. Ahora, le dice que se ahorre sus lagrimitas de cocodrilo y que se vaya lejos. En contraste, el hablante de “Tengo un amor” sigue la tradición bachatera y del bolero de hablarle directamente a la mujer para quejarse de su abandono. El narrador de “Llorar lloviendo” también sufre del amor perdido. Revela que los hombres a veces necesitan llorar, por muy machos que parezcan. No obstante, pide que le caiga un aguacero para esconder la prueba de sus lágrimas, para que no sepa nadie que tiene el corazón roto. De esta manera, “Llorar lloviendo” sirve como un espacio seguro donde es socialmente aceptable que llore un hombre—o sea, una canción de bachata—y a la vez reitera que los machos esconden sus sentimientos.
El amor y la posibilidad de amar también son temas en la bachata moderna de Love. Su versión de “I Just Can’t Stop Lovin’ You”—“Todo mi amor eres tú”—del 2013 celebra los atributos de la mujer y el amor que comparte el narrador con ella. Aunque la voz narrativa de “Nueva York” perdió su corazón en alguna parte del mundo, aún abriga la esperanza de que encuentre a su amada otra vez en Nueva York—el lugar en donde se cumplen los sueños y se juntan todos los caminos. De la misma manera, el hablante de “Y volveré” tiene la esperanza de que amanezca un nuevo día que le ponga fin al sufrimiento de la pareja y un nuevo mañana a su amor.
La incertidumbre del amor es el tema central de otras bachatas de Love. “Casi, casi” retrata a un hombre cuya timidez le impide declararse. Este narrador no sufre del amor perdido sino del amor aún no realizado. En “Te parece poco”, el cantante tampoco está seguro, aunque en este caso, surge su confusión de la aparente falta de aprecio de su amor por parte de la mujer. Enumera todo lo que ha hecho por ella, acciones que ella considera insignificantes.
Ahora, Love es uno de los nombres más importantes de la bachata moderna, pero admite que los aficionados de la bachata tradicional no aceptaban sus experimentos: “En el principio, los dominicanos tradicionales no aceptaban mucho lo que hacía, o sea toda la fusión del hip-hop, R&B, con la bachata…. Pero los jóvenes lo aceptaban”.56 De todas maneras, no se queja Love de la crítica:
Siempre habrá crítica, pero sin la crítica, pues eso significa que no haces bien tu trabajo…. Cuando empezamos algo diferente en este género, fue difícil de romper esos límites. Y ahora, la gente lo acepta por todo el mundo. Es verdaderamente increíble porque he estado desde el principio, la transición, hasta adónde ha llegado la bachata.57
El dúo de la bachata Xtreme estaba formado por los dominicano-americanos Danny D y Steve Styles, ambos nacidos en los EE.UU. Este grupo también salió en el 2004 y gozó de varios éxitos antes de disolverse en el 2011. Xtreme complementó la bachata con hip-hop y R&B, además de las interpretaciones sentimentales de los temas tradicionales de la bachata. En “Te extraño”, por ejemplo, el narrador le habla directamente a la mujer de sus lágrimas y su sufrimiento, aunque lo ha dejado y ya no está presente en persona. Reitera su sufrimiento con imágenes de quemarse, del dolor y de la soledad. El desamor también es el tema principal de su colaboración con la actriz y cantante Adrienne Bailon en “No me digas que no”. Esta canción presenta al dúo como una sola voz narrativa que conversa con su amada, pidiéndole que le explique por qué piensa irse. La voz femenina enumera sus transgresiones y niega amarlo. Entonces, cambia el enfoque y el narrador habla de su amada con la tercera persona, reiterando que lo deja a pesar de sus esfuerzos por reparar sus acciones.
Su canción “Shorty, shorty” representa la mezcla más fluida entre la bachata y el hip-hop. Este tema, cuyo título incluye un vocablo del hip-hop de referirse a una mujer bonita como “shorty” (bajita), depende mucho del cambio de códigos mientras el narrador relata la historia de sus esfuerzos por encontrar a la mujer que lo dejó. En toda la canción, le habla directamente a la mujer y le explica que sufre de insomnio y que muere sin ella. Tales imágenes de sufrimiento se entremezclan con las expresiones de la belleza de la mujer en español e inglés. Esta combinación fue un éxito, y “Shorty Shorty” subió al puesto número uno en la categoría de Sencillo Latino de la revista Billboard.
Xtreme también aportó su propio look a la bachata con sus caras jóvenes (ambos Danny D y Steve Styles nacieron en 1985), sus trenzas cornrow, los pantalones flojos y el accesorio común de Steve Styles, una banda para la cabeza. Los pasos de baile del dúo en sus videos musicales hicieron hincapié en este look. Por ejemplo, en “Te extraño”, llevan jeans flojos, zapatos de tenis y camisetas blancos, y chaquetas de cuero negras. Presentan un número coreografiado de hip-hop durante el mambo, que hace resaltar sus pasos.
Xtreme señaló otra primicia para la bachata al participar en una serie de la televisión reality de ocho episodios para la cadena de cable en español, Mun2. Tal como sugiere el nombre del programa, On the Verge (A punto), se trataba que el grupo estaba a punto de llegar al éxito total, o de no llegar a ninguna parte. Tal como otros programas parecidos, este subrayaba los conflictos entre los dos cantantes al seguir su vida diaria y sus carreras musicales, tanto en el Bronx como de gira. Aunque Xtreme se disolvió, su sonido y su look aportaron mucho a la creciente popularidad de la bachata entre un público global.
Prince Royce (nombre artístico de Geoffrey Royce Rojas) irrumpió en el mundo del arte en 2010 como solista con su bachata moderna, un cover en espanglish de la canción clásica de Ben E. King (1961), “Stand by Me”. Nacido en el Bronx de padres migrantes dominicanos, las experiencias de Royce se asemejan a las de otros bachateros modernos y urbanos, pues creció con un pie en la música, el idioma y la cultura de dos mundos. Royce concretizó esta realidad con su versión de “Stand By Me”, pues este mezcla de forma bilingüe la bachata y un clásico norteamericano. Siguió este primer éxito con otros de su álbum de estreno del 2010, y este llegó a ser el álbum latino de mayor venta en 2011; Royce ganó el premio Billboard como el Mejor Artista Latino Nuevo del 2011.58 En su segundo disco, Phase II (2012), Royce mezcla otros sonidos y estilos con su bachata, tal como el de la música mexicana de mariachi en “Incondicional”; en otras canciones, abandona por completo la bachata para tomar la música pop y tempos bailables más rápidos. En el preludio (“Prelude”), la artista, La Bruja, habla al compás de tambores afrocubanos, narrando cómo Prince Royce llegó del Bronx a ser una estrella y cómo es un representante orgulloso de la dominicanidad. Royce también ha experimentado con otras fusiones con el grupo rockero mexicano Maná en “El verdadero amor perdona”, con el salsero Luis Enrique en “Sabes”, y con la cantante mexicana Thalía en “Te perdiste mi amor”.
Con su voz enternecedora, su cara de niño, y su elegante forma de vestir—con frecuencia lleva sombrero—Prince Royce retrata la sinceridad cuando interpreta los temas románticos y tradicionales de la bachata en sus canciones del siglo XXI, muchas de las cuales son escritas por él mismo. En su éxito “Corazón sin cara”, por ejemplo, el narrador reprende a la mujer que ama por preocuparse por su apariencia física y le recuerda que el verdadero amor es ciego. De la misma manera, el narrador de “Tú y yo” recuerda a su novia que son el uno para la otra, y le suplica que no les haga caso a las mentiras de sus amigas con respecto a su supuesta infidelidad. Tal como sugiere el título de “Incondicional”, el narrador declara su amor incondicional. Mantiene que su amor es verdadero y desinteresado, y siempre va a luchar por él. De la misma manera, “Las cosas pequeñas” ensalza la belleza de los pequeños detalles, como un abrazo, un beso, o una mirada, que juntos constituyen el amor.
Prince Royce también canta al amor perdido. En “El amor que perdimos”, el hablante se pone nostálgico por su antiguo amor. De la misma manera, “La última carta” se presenta como la última carta que le escribe el narrador a su esposa en un último esfuerzo por su perdón. La voz narrativa de “Mi habitación” está solo en su cuarto donde lamenta su amor perdido y su traición, mientras que reconoce su culpa de haber lastimado a su amada en “Te me vas”. El narrador de “Memorias” recuerda cada aspecto de un antiguo amor. El timbre de esta canción, que se parece tanto a la música pop como a la bachata, hace que el desamor casi parece insensible.
La música de Prince Royce también tiene su dosis de machismo. En “Su hombre soy yo”, el narrador recuerda a su novia que le pertenece a él. La reprende y le dice que lo respete. El tema pop/rock bailable, “Rock the Pants” (principalmente en inglés) es una declaración machista y urbana del dominio masculino a que hace referencia el narrador, asegurando que él es quien lleva los pantalones en la relación. En esta canción, el hombre declara que está harto de las preguntas de la mujer y piensa comportarse de tal manera que sus peores sospechas se hagan realidad. La reprende por no darle suficiente espacio, y se va para el club. Tal como un gallo que se pavonea, piensa volver locas a las mujeres en el club con sus movimientos hábiles en la pista de baile.
Prince Royce sigue siendo uno de los bachateros modernos más pegados. Su look y sonido le han cosechado nominaciones y premios, entre ellos, los Premios Billboard, Premios Lo Nuestro, Premios Juventud y los Latin Grammy. Los Premios Billboard de la Música Latina lo reconocieron como el Compositor del Año en el 2012, y se convirtió en el más joven en ganar este galardón a los 22 años.59 Sus dos álbumes han llegado al número uno en las listas norteamericanas Latin y Tropical de Billboard. Fue el entrenador de voz para la participante ganadora, Paola Guanche, en La Voz Kids.
El antiguo cantante principal de Aventura, Romeo Santos, fue el primero de la agrupación en sacar un álbum como solista en el 2011, Fórmula Vol. 1. Este disco incluye la voz inconfundible de Romeo cantando sus bachatas características en espanglish, además de varios temas pop y rock, y varios músicos invitados: Usher, Lil Wayne, Mario Domm, la rapera La Mala Rodríguez, y el guitarrista flamenco Tomatito. El álbum tiene como marco dos escenas, el “Intro” y el “Outro” (juego de palabras que se refiere a una salida), que explican que la fórmula musical de Romeo es única y que se enfrentan a sus críticos. Por todo el material, Romeo sigue refiriéndose como el King (el Rey, pero ahora en forma singular) de la Bachata.
Las bachatas de Romeo tratan los temas comunes: el amor, el sufrimiento y el desamor. Su primer sencillo como solista, “You”, celebra el amor y su poder para cambiar a un antiguo mujeriego a un hombre de una sola mujer. “Promise”, a dúo con Usher, mezcla inglés y español por encima de una base de bachata. Esta canción retrata al narrador como un prisionero, condenado y atrapado en el cuerpo de la mujer. Aunque se trata de un dúo, la acción se plantea desde la perspectiva de un solo hombre. Por sus letras bilingües (Romeo canta en español y Usher en inglés), esta canción a dúo puede entenderse como una sola persona que se expresa en dos idiomas. “Mi santa” presenta el amor como si fuera una religión. En esta canción, el narrador le rinde culto a la mujer y promete comprobarle su amor ante desafíos, peligros y hazañas valientes. El tema depende mucho del simbolismo y del lenguaje religiosos, por ejemplo, oraciones, prender velas, ayunos y el sacramento del bautismo. En contraste con una santa, la mujer se pinta de diabla en “La diabla”. Aunque el narrador reconoce que se arriesgó voluntariamente, esta mujer fatal es más lista que el hombre inocente y le gana en el juego del amor. “Soberbio” también hace uso de las imágenes de los cuentos de hadas, pues un rico se encuentra abandonado y solo, y en su castillo no tiene a su princesa.
El tema más interesante del disco es “Debate de 4”, la colaboración de Romeo con Luis Vargas, Raulín Rodríguez y Antony Santos, que pinta un enfrentamiento entre los cuatro bachateros que quieren ganarse el amor de una mujer. Cada uno reitera sus virtudes individuales, enfatizando su papel dentro del mundo de la bachata: Romeo, el King (rey); Luis Vargas, el Rey Supremo de la Bachata; Raulín Rodríguez, el Cacique; y Antony Santos, el Mayimbe. En el coro, enumeran las armas que traen al debate, armas todas que simbolizan la bachata y su papel de música romántica: rosas, una guitarra y una botella de alcohol. Los argumentos de cada cantante reiteran sus propias calidades como bachatero y su lugar dentro del género. También incorporan numerosas referencias intertextuales a sus propios temas. Romeo canta en espanglish y se retrata como el King of Bachata infeliz que sufre. Luis Vargas está loco de amor,60 pero es sincero, e insiste que todavía hay una chispa entre él y la bachata. Raulín Rodríguez enfatiza que es un macho de hombre61 y apela directamente a la mujer/bachata,62 e insiste que ya no quiere nada con la soledad.63 Antony Santos describe a la mujer bachata como “linda y difícil”,64 y admite que su corazón es culpable y que sufre por ella.65 No obstante, está seguro de ganar la batalla.66 Santos le dice a la mujer bachata que deje su jueguito y que no lo deje plantado, aun por su timidez.67 Aunque “Debate de 4” es, a primera vista, un enfrentamiento entre cuatro hombres que se compiten por la misma mujer, esta canción también puede entenderse en otro nivel en que cada uno de los cuatro bachateros busca dominar la bachata. Al final, aún no se sabe quién ganó. La bachata no escoge a ninguno de ellos, y se puede inferir que los necesita a todos para sentirse completa.
Romeo ha sido nominado para los Premios Billboard de la Música Latina, Billboard, Juventud, Lo Nuestro, y Soberano por su talento como cantante, compositor y productor. Ganó el Premio de la Sociedad Americana de Compositores Autores y Editores (ASCAP por sus siglas en inglés) por la Canción Tropical del Año y otro en el mercado norteamericano de pop en el 2006, siendo así el primer hispano que gana un premio ASCAP en dicho mercado.68 Lo reconocieron como el Compositor del Año,69 y su tema, “You”, le cosechó un premio ASCAP por la Canción Tropical del Año en el 2012.
El cantautor Henry Santos, antiguo integrante de Aventura, también ha sacado dos álbumes como solista, el primero, Introducing, en el 2011, que tiene solo bachata, y el segundo, My Way, en el 2013, que incluye un merengue y música bailable. Las canciones de Santos, muchas de las cuales escribió él mismo, hacen resaltar la sensibilidad de su estilo de interpretación. La primera canción que sacó, “Poquito a poquito”, trata de la petición del narrador de que su amada le abra poquito a poquito su corazón. Además de facilitar la rima, el uso abundante del diminutivo comunica la misma ternura que se oye en la voz de Santos. “Dame una sonrisa” pinta una situación semejante, pues el narrador por fin se sobrepone a su timidez y se declara. Le pide que le dé una sonrisa y que no demore al enamorarse de él.
Henry Santos también canta los temas ampliamente probados de la bachata, el desamor y el desprecio. “Por nada” pone en tela de juicio la conveniencia de seguir con una relación cuando los dos se lastiman sin razón alguna. A pesar de sus palabras y actos dolorosos, el narrador admite que todavía la ama y que no la puede olvidar. En “Mi adicción”, la voz narrativa describe a su amada y su amor como una adicción insuperable. Aunque le da un alivio pasajero, al final será su perdición.
En contraste con el sufrimiento de estos temas, el narrador de “Deja de llorar (Mi desprecio)” es el que inicia la ruptura. Esta canción sigue un relato breve, “Flippin’ Channels”, en el que el narrador hace zapping y se oyen fragmentos de anuncios y un breve pronóstico de tiempo que sitúa la acción plenamente en Nueva York. Termina con una escena de telenovela en español en que un personaje rompe con una mujer sollozante, y se niega a dejarse convencer por sus lágrimas de remordimiento. “Deja de llorar” se basa en esta escena, y la voz narrativa, igual que el personaje de la telenovela, le dice a su antiguo amor que no llore y que se olvide de él. La telenovela esta entretejida de manera intertextual por la canción, pues los personajes aparecen con cortos diálogos, lo cual enfatiza el papel de los dos géneros dentro del paradigma romántico cultural de los latinoamericanos. Esta interacción entre expresiones culturales, sin embargo, se presta a diferentes interpretaciones, ya que el amor verdadero siempre triunfa en el género de la telenovela, y hay un final feliz.70 Así, está presente la posibilidad de reconciliarse, pues nunca se sabe lo que puede pasar—tal como el pronóstico del tiempo en “Flippin’ Channels” predice un día sin lluvias pero les advierte a los televidentes que lleven paraguas, por si acaso.
La denuncia más fuerte y más moderna del tema tradicional de infidelidad en el primer álbum de Henry es “Gotcha”, o sea, “te caché”. En este caso, el narrador revela que ya va un tiempo que sabe de la infidelidad de su novia. Aunque estaba ciego al engaño en un principio, pone cámaras para comprobar si son verdaderas sus sospechas, y estas le sirven de otros ojos que pueden ver con más claridad que los suyos. Se enfrenta a su novia con las pruebas que la muestran con las manos en la masa y le anuncia que también subió los videos a YouTube. Aunque la inclusión de videocámaras y de YouTube sitúa la canción en el siglo XXI, sus temas forman parte de una larga tradición bachatera de cantar el desengaño, el desamor y el amargue.
El segundo álbum que grabó Henry Santos como solista, My Way (A mi manera) (2013), contempla los temas comunes de la bachata dentro de un amplio marco cultural. En “Mi poesía”, el narrador define a su amada como la musa de ambas, su música y su poesía. Se clava en sus pensamientos, tal como una canción popular se pega en la mente, y le inspira a que realice grandes hazañas valientes, como cruzar descalzo el desierto. Piensa constantemente en ella y por lo tanto está inquieto. Según la tradición del amor cortés, el amor es un culto gobernado por Cupido; también es una enfermedad y ella, su único remedio. La voz narrativa de “Vuelve conmigo” también está enfermo de amor. Admite que se equivocó, lamenta sus acciones y pide perdón. Le pide a su amada que vuelva para salvarlo de la muerte que lo espera sin su amor. Cuando ya no encuentra palabras, el narrador busca un intermedio en la guitarra y le pide que llore por él. La instrumentación punteada de la guitarra imita las lágrimas. Al final, la voz narrativa pide perdón en ambos, español e inglés. “No sé vivir sin ti” es un dúo con el músico tejano Bobby Pulido, y también presenta el amor como enfermedad y locura. Este narrador lamenta su abandono y le dice a su ex que es el único remedio que puede curarlo. Se vuelve loco y sostiene que muere lentamente sin ella. “Preso en tu cárcel” nos recuerda la novela sentimental española medieval, Cárcel de amor. Mientras el preso enamorado de este best seller de 1492 se deja morir por el amor no correspondido, la bachata de Santos retrata a un narrador que se deja cautivar voluntariamente por el amor de su amada, y lo hace con el mayor agrado. Está enfermo de amor y locamente enamorado de su carcelera, y aunque no pensaba enamorarse, jura que se enamoraría de ella de nuevo. Este narrador está tan enamorado de ella que no teme casarse y convertirse en su preso de por vida.
Otros temas del álbum forman parte de tradiciones musicales. “Tango a la diva” se refiere a la telenovela como un marco para entender los recovecos del amor. Esta canción mezcla la bachata y el tango, otro género originalmente de la clase baja, para retratar a una mujer cruel y de besos venenosos. Es la protagonista de la telenovela personal del narrador, y también de su desgracia. La selección de palabras hace hincapié en un ambiente teatral en el que las apariencias engañan y la mujer, por su engaño, es merecedora de la misma canción que le canta el narrador: un tango. El título de “Bésame siempre” nos recuerda al bolero clásico “Bésame mucho”. Este expresa la idea de vivir el momento con muchos besos y alargarlo como si los dos amantes pasaran su última noche juntos. La bachata de Santos, “Bésame siempre”, enfatiza que el beso que propone el narrador es de por siempre; no obstante, es un solo beso—un beso profundo que pasará a la historia para ganarle el corazón a su amada. El amor es una religión que le inspira al narrador a dejar atrás su timidez y jugarlo todo por ella. En contraste, la bachata urbana, “My Way”, se enfoca por completo en el momento vivido. Este tema sirve como la invitación íntima, personal y apasionada que el narrador le da a su amada, y cuenta con detalles todo lo que hará para que su experiencia sea inolvidable. El coro de esta bachata, que llegó al puesto número uno en el listado Billboard de temas tropicales de mayor difusión, nos da un excelente ejemplo del cambio de códigos, y el narrador cambia sin esfuerzo entre el inglés y el español para convencerle a ella que lo deje demostrarle su amor. “Amor y dinero” le da una vuelta al tema bachatero común de sufrir por el dinero. En esta canción, un narrador rico se pregunta si la mujer que ama se quedaría con él si fuera pobre. Emplea imágenes de cuentos de hadas, tales como un castillo y la Cenicienta, pero observa que su princesa llevaba ropa de marca y manejaba un Mercedes. Las contemplaciones hipotéticas de este narrador acerca de los motivos interesados de su amada lo convencen que un amor falso no es ningún amor.
Henry Santos también ha destacado la presencia de la bachata con otras actividades artísticas. Fue el director musical de la película dominicana, La soga. En el 2012, ganó la competencia, Mira quién baila, del canal televisivo, Univisión. Santos fue el primer dominicano que participó en la competencia, y jamás lo nominaron para eliminarlo, lo cual es testimonio no solo de sus destrezas de baile sino también del grado en que se congenia con su público.
Las letras refinadas de las bachatas de Henry Santos dibujan el panorama variado del amor en todas sus dimensiones. Aunque dice que solamente el 20 por ciento de sus letras se basan en sus vivencias,71 Henry interpreta las melodías sólidas de sus bachatas con sinceridad. Para Henry, su bachata es el resultado de un proceso intricado y una combinación de elementos, especialmente “el alma” de la bachata tradicional. Lo explica así: “No es tan fácil como tomar y combinar una música, porque hay una química tácita que nace…. Hay que entender el sentimiento, de dónde viene para comprender la bachata”.72
Lenny Santos, productor y guitarrista, y su hermano Max Agende se han unido con Steve Styles, el antiguo cantante principal de Xtreme, para formar el grupo Vena, un conjunto que Jon Caramanica describe como un “supergrupo dominicano”. La agrupación toma su nombre de la visión elemental de que los dominicanos llevan la bachata en la sangre73: “Vena básicamente es la música corriendo por nuestras venas”.74 A pesar de sus éxitos con Xtreme y Aventura, Styles, Santos y Agende enfatizan que su agrupación, Vena, es una empresa nueva—un mundo nuevo, como mantienen en sus canciones—y que su meta consiste en siempre mejorarse. Dice Styles, “Comenzando de nuevo, otra vez … una nueva era, un nuevo grupo, un nuevo mundo”.75
Los cuatro sencillos de Vena hasta la fecha tienen un timbre que complementa el contenido sentimental y el ritmo tradicional de la bachata con otros géneros y el espanglish. Su primera canción, “Señora”, retrata a un narrador que se encuentra incapaz de olvidar a la mujer que amaba, aunque reconoce que la culpa la tiene él de que se haya ido. El hablante de “Por Mentiras” también reconoce su responsabilidad por las mentiras que hicieron fracasar su relación. Al reflexionar, se rompe la cabeza pensando en lo que pudo haber sido y le suplica a su amada que vuelva. En contraste, la voz narrativa de “Ya no” es la víctima del desprecio, la indiferencia y la falta de sinceridad de la mujer. No entiende cómo le pudo haber sido infiel, ya que él sí siempre le fue fiel. Siendo el esclavo de ella, se declara libre y le pone fin a la relación dañina.
El tema “Sangre de mis venas” emplea imágenes elementales para presentar a la amada como una parte vital del narrador. Ella lo completa, y su amor sabrá resistir toda prueba, hasta los chismes. También se puede interpretar esta canción desde otro ángulo, como un comentario sobre la bachata misma. Tal como la novia del narrador es la sangre de sus venas, la bachata corre por las venas de estos bachateros. La pareja de esta canción no le hace caso a los que quisieran destruir su amor, tal como los aficionados y bachateros tampoco les hicieron caso a los críticos de la bachata.
Steve Styles, el cantante principal de Vena, cree que “es importante que … la bachata salga del corazón”,76 y la música de esta agrupación le da voz a una miríada de emociones. Los temas de Vena—el amor, el amor perdido y el sufrimiento—sirven como un vínculo entre su música y la tradición bachatera a la vez que su sonido innovador y fresco los diferencia. Vena se empeña en darles a sus aficionados una experiencia divertida y única en sus presentaciones en vivo. Ya tienen un público fiel antes de publicar su primer álbum. Hay clubes de aficionados en varios países, y las Vena Mamis—mujeres aficionadas—los apoyan incondicionalmente. Este comienzo prometedor indica buenas posibilidades de que sean la “súper agrupación” que pretenden ser.
Muchos están convencidos de que Romeo Santos será la cara misma de la bachata crossover, o sea, que tendrá éxito en el mercado de la corriente dominante de la música en inglés (e.g., Richards; Rohter “Crossing Over”; Rohter “Romeo”). Se basan sus razones en la experiencia de Romeo como el cantante principal del grupo Aventura, el éxito que ha logrado con su primer disco como solista, y un futuro programa de televisión.77 Prince Royce, con su look del chico sencillo, su imagen elegante, y su cover bilingüe y de bachata de “Stand By Me”, también es un excelente candidato para tomar ese paso.78 Efectivamente, los bachateros y los grupos de bachata moderna y urbana, como Aventura, Prince Royce, Toby Love y Xtreme, aportaron mucho a la difusión de la bachata en otros países hispanohablantes, más allá del Caribe. Ahora, la bachata forma parte del sonido popular de los discos en muchos lugares de Europa, Centroamérica y Sudamérica. El efecto secundario lamentable de esta popularidad es que muchos desconocen la bachata fuera de esas formas moderna y urbana.
Estos músicos a quienes les ponen “crossover” son los que tenían éxito en el mercado de lengua española antes de entrar en el mercado de lengua inglesa con canciones para un blanco de público anglohablante. El vocablo crossover, sin embargo, conlleva ciertas expectativas y valoraciones. Aunque la palabra implica un movimiento horizontal entre géneros musicales, culturas, lenguas y consumidores, movimiento por el que una música latina “simplemente cambió de carril para entrar en la corriente dominante norteamericana”, este vocablo efectivamente conlleva un orden jerárquico.79
Varios cantantes latinos empezaron con éxito sus carreras como músicos crossover en los primero años del milenio. Ricky Martin estalló en la escena musical del mundo de habla inglesa en mayo del 1999 con su famoso éxito, “Livin’ la Vida Loca”. Este sencillo incluía una fusión de rock, ritmos latinos y el espanglish, además de la imagen de Martin, bailando con mucho movimiento de cadera, que recordaba a Elvis Presley en el escenario. Aunque había sido reconocido internacionalmente por sus discos en español, el disco en inglés que Martin sacó el 11 de mayo de 1999 lo convirtió en uno de los músicos más populares de ese verano. Creció su popularidad a tal grado que pocas semanas después, su foto adornaba la portada de la revista Time.
De semejante manera, la rockera colombiana Shakira hizo el crossover al mercado de habla inglesa con su disco de 2001, Laundry Service. Para Shakira, hacer el crossover significaba más que cambiar de idioma, pues también incluyó un cambio de look. La Shakira rubia y seductora que adorna su primer disco en inglés era opuesta a como se veía a la de la portada de su primer disco en español, Pies descalzos (1996), donde lleva el pelo castaño y liso, o la de Dónde están los ladrones (1998), donde lleva trenzas sencillas y una camisa de manga larga. Esta transformación de Shakira revela claramente que no solamente se blanquea el idioma de la música crossover, sino tal vez su apariencia también.
Examinar a los músicos crossover que más éxito han tenido en la industria musical de habla inglesa revela que han sido en su mayoría “músicos blancos, con estudios, y de las clases media y alta”,80 como, por ejemplo, Gloria Estefan, Juan Luis Guerra, Ricky Martin, Shakira y Enrique Iglesias. Tal como observó acertadamente Willie Colón, “‘las músicas negras solamente fueron aceptadas cuando venían disfrazadas de blanco’”.81 Este proceso de aceptación, que recuerda el proceso semejante por el cual pasaron el rap y el hip-hop, lo describo como un proceso de filtración por medio del cual la música es blanqueada a través del tiempo para crear un producto que más atrae a nuevos públicos del grupo dominante.82
Los bachateros modernos y urbanos podrían ser la mismísima imagen de los que logran atraer los gustos musicales norteamericanos, por su tez más clara, su papel de cantantes ídolos que cantan dulcemente en espanglish y sus fusiones musicales. Royce ya ha incluido canciones completas o principalmente en inglés en sus dos discos, y se rumorea que trabaja con el sello Atlantic para sacar un disco en puro inglés.83 Romeo, sin embargo, sostiene estar decidido en hacer el crossover como él quiere, o sea, con bachata y en español.84 En contraste con los artistas que cambiaron completamente o casi por completo al inglés y al pop o rock para su crossover, Romeo se ha quedado casi completamente con la bachata y un espanglish en el que predomina el español.85 Romeo desafía la noción que plantea al crossover como cosa de dirección única: “‘Nunca me gustaba el vocablo crossover, o por lo menos la definición de él que tiene todo el mundo, o sea, que tú grabas un disco en inglés, y ese es un crossover…. Pensaba que si iba yo a hacer el crossover, ¿por qué no lo hace también el público de habla inglesa, por qué no hacia mi mundo?’”.86
Por lo tanto la demanda por la música crossover de los artistas latinos no debería de interpretarse equivocadamente como una demanda solamente de los anglohablantes monolingües. Tal como observa Frances Aparicio, “un nuevo y emergente público hispano, ‘imbuido cada vez más de la cultura anglo y animado por sus propias aspiraciones políticas y económicas’, ha hecho posible el crossover, y no ha sido el resultado ‘de una atracción a un público nuevo y principalmente anglohablante’”.87 El productor Sergio George reitera,
Sean mexicano-americanos, puertorriqueños, dominicanos, ya no les importa de donde viene la música…. Estos son jóvenes hispanos de la cuarta generación, son norteamericanos. La mayoría nació y creció aquí. Así que quieren estar a la moda; pero todavía quieren retener su cultura, con el idioma [español].88
El éxito supuestamente crossover de la bachata, entonces, tal vez a la larga sea unido a la cara verdadera del demográfico norteamericano en que los hispanos son el grupo minoritario más grande.89 Los primeros diez años del nuevo milenio señalaron un aumento importante de latinos en los Estados Unidos con un cambio de crecimiento de 43 por ciento.90 Los hispanos constituyen además el grupo minoritario más joven del país, pues cada uno de cuatro recién nacidos en los Estados Unidos es hispano, tal como lo es cada uno de cinco colegiales.91 Aunque el estilo, el sonido y la apariencia de Romeo y de Prince Royce tal vez atraigan a un público de habla inglesa, el público que los ayudará en el crossover bien podría ser hispano.
Para los anglohablantes, el propuesto crossover de la bachata se contempla desde el lente hegemónico de la corriente dominante, o sea, el pop en inglés. Se describe a Romeo como una cantidad “poca conocida”92 más allá del mercado de habla española, y “un secreto escondido en plena vista”.93 Los escritores de habla inglesa pintan la bachata como “una balada dominicana sensual … una música pueblerina de dudosa reputación … una música folklórica del Caribe”94 que tiene “letras verdes … y que se toca en fiestas y bares-cabarets de mala muerte”, música tocada por músicos que visten “atuendos chillones”.95 En contraste, se describen a los bachateros modernos y urbanos como los que refinaron el género por mezclarlo “con R&B, hip-hop y una actitud propia de las grandes ciudades … [que] … ha creado un estilo arrogante, distinto de Nueva York”.96 De la misma manera, Cantor-Navas le atribuye el crédito a “los ídolos de Aventura … quienes convirtieron a la bachata con su sonido dominicano del barrio en una música de los jóvenes pan-latinos”. De igual manera, el carácter urbano (entiéndase negro) de esta creación dominicano-americana tiene que filtrarse también. Castor-Navas reconoce al antiguo productor de Prince Royce, Sergio George, por haber transformado a Royce, “un bachatero del underground que llevaba gorra de béisbol … [en] … un intérprete bien vestido”. Estas representaciones subrayan la mirada colonial inherente a las consideraciones de las músicas y los músicos denominados “crossover” y que los ven como algo que no existe o que es inferior hasta que pasen por el filtro de la música en inglés de la corriente dominante norteamericana.
La importante comunidad dominicana transnacional ayudó a crecer nuevos públicos de la bachata. Este género, que frecuentemente trata de las vivencias de la gente que vive en las urbes, es emblemático a las experiencias de muchos dominicanos que han vivido en el exterior, a la vez que una nueva generación de dominicano-americanos interpreta la bachata por el lente de sus propias realidades. Su sonido moderno, que mezcla la bachata con R&B, rock, pop y hasta reggaetón, hace el cambio de códigos entre español e inglés. Esta generación de dominicano-americanos ha adoptado la bachata moderna como una música representativa de lo que significa ser dominicano dentro de la comunidad transnacional. Esta combinación única refleja las realidades tanto musicales como lingüísticas de este grupo, a la vez que todavía confirma la herencia musical de los dominicanos en el país.
En “Mi niña cambió” de Aventura, la voz narrativa observa que bien dice el dicho que Nueva York te puede cambiar, hasta la piel. Esta canción se entiende, por una parte, como la crítica del narrador de su novia, ya que esta se cree superior a los de su país porque habla inglés y conoce Europa. El narrador reconoce que ha progresado, tal como se entiende el progreso en República Dominicana; no obstante, lamenta que haya olvidado tanto a él como sus raíces. Por otra parte, esta canción y este dicho reiteran el papel desempeñado por la bachata moderna en la aprobación general de la bachata y cómo simboliza la dominicanidad. Los migrantes abrazaron la bachata porque les era pertinente en su situación como una expresión de la dominicanidad dentro del contexto de la migración. Trajeron la música de vuelta al país, además de los símbolos de la movilidad social a los cuales tenían acceso, así desvinculando la bachata de la clase baja. Los vínculos entre la clase y la raza también se reflejan en este proceso: la mejor posición social de la bachata equivale a su blanqueamiento gradual, lo cual mejoró su creciente atracción.
Lenny Santos describe este fenómeno como una fuerza incontrolable: “Fue imposible pararla. A fin de cuentas, lo que importa es lo que le gusta a la gente. Si hay millones que dicen, ‘No, esto es lo que quiero oír’, tendrás que seguir con lo que dicen. No intentes controlarlo—1esa cultura dominicana te va a buscar!”.97 Henry Santos articuló cómo la bachata se validó en el país por su visibilidad internacional: “Es un poco triste que así tiene que ser. Tiene que ser aceptada por el mundo antes de que sea completamente aceptada. Nos odiaron…. Entonces conseguimos la fama internacional, por todo el mundo, y ahora nos aman”.98 Las innovaciones de la bachata moderna de la corriente dominante y la bachata norteamericana llevaron la bachata por todo el mundo, y su pegada internacional ayudó a validar la bachata en el país.