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Un tema pesado
o una cuestión de peso
¿Sientes que tus cinturones comienzan a apretarte? ¿Has
tenido que hacerles un nuevo agujero? ¿Sólo te sientes
cómoda con ropa suelta? Aquí encontrarás la información
necesaria para calcular tu peso ideal aproximado, así como
para ayudarte a modelar tu figura.
A juzgar por lo que se desprende de los titulares de los periódicos acerca de las nuevas estadísticas e investigaciones sobre la obesidad, nos vemos obligados a creer que existe la obligación moral de estar delgadas.
La justificación suele ser que las personas gordas enferman más a menudo y constituyen una carga para nuestro sistema sanitario. Además, nos encontramos con las imágenes de modelos y celebridades extremadamente esbeltas en el cine y la televisión con quienes inevitablemente nos comparamos. El mensaje subliminal es que hay que estar delgada, así es como tienes que verte, sobre todo si quieres ser una persona feliz y exitosa, además, claro está, de sexualmente atractiva. En el otro extremo nos encontramos con que media humanidad se muere de hambre. ¿No es esta razón suficiente para que se te atragante el chocolate?
Una buena idea
Mide tu cintura y tus caderas. Ahora muchos especialistas opinan que la acumulación de grasa en la región abdominal es la que mata. Las personas con tronco en forma de manzana, caderas relativamente estrechas y una gran cintura, corren un mayor riesgo de desarrollar padecimientos cardíacos que aquéllas con el tronco en forma de pera que acumulan grasa en caderas y muslos.
La obesidad constituye innegablemente un problema creciente en el mundo occidental, debido fundamentalmente a un consumo excesivo de alimentos erróneos, así como al descenso del nivel de actividad física. Los expertos advierten también de la multitud de enfermedades que acarrea el exceso de peso entre las que destacan insuficiencias cardíacas, diabetes, hipertensión arterial y, para las mujeres en particular, aunque no de manera exclusiva, problemas de fertilidad. Esto no supone que una persona obesa desarrolle todos los tipos de patologías asociadas al sobrepeso, sino simplemente que la obesidad incrementa los riesgos de padecerlas, a pesar de lo cual la mayoría de nosotras continuamos manteniendo el exceso de peso hasta que algo comienza a ir mal. La única salida que te queda entonces al comenzar a padecer alguna de las patologías antes mencionadas, es que tu médico te aconseje que pierdas peso y te prescriba una dieta.
Para la mayoría de nosotros, adelgazar, más que una medida preventiva de salud, es una cuestión estética porque no nos gusta como nos vemos. Esto no es malo, siempre y cuando no interfiera en nuestra vida diaria provocando desórdenes alimenticios (anorexia, bulimia, etc.). Si éste es tu caso, por favor busca ayuda a través de tu médico o terapeuta. La vida es demasiado corta y preciosa como para no disfrutar plenamente de ella.
Calcular si realmente tienes sobrepeso es fácil a través del Índice de Masa Corporal (IMC). Hemos de destacar que este método no está exento de críticas (en especial porque si eres una persona con una masa muscular importante, no grasa, pesarás más que una persona gorda con tu mismo volumen) ¡pero por algún lado hay que empezar! Todo lo que debes hacer es pesarte y anotar el resultado en kilogramos. Después mide tu altura en metros y realiza la siguiente operación:
Peso en kilogramos partido por (altura en metros x altura en metros)
= IMC
Por ejemplo si mides 1,60 metros de altura y pesas 70 kg
70 / (1,6 x 1,6)=
70 / 2,56 = 27,34
IMC = 27,34
Otra idea más
Si dudas o deshechas la idea de incrementar tu actividad física, ve a la IDEA 12, El ejercicio es tan bueno como dicen, ¡de verdad!
Compara tus resultados con los de la siguiente tabla:
IMC para hombres | IMC para mujeres | Resultado |
Menos de 20 | Menos de 19 | Bajo peso |
20-24,9 | 19-24,9 | Peso normal |
25-29,9 | 25-29,9 | Sobrepeso |
Más de 30 | Más de 30 | Obesidad |
Yo me encuentro dentro de los límites del peso normal, lo cual es estupendo desde el punto de vista de la obesidad, pero soy consciente de haber aumentado un par de tallas en la última década y creo que perder tres kilos (¡y no recuperarlos!) me ayudaría a sentirme mejor. Ya tengo fijado mi objetivo de pérdida de peso, ahora calcula tú el tuyo.
La frase
«No me sobran kilos, me faltan centímetros».
SHELLEY WINTERS
¿Cuál es tu duda?
P Pero si provengo de una familia de obesos, ¿tengo alguna posibilidad de lograrlo?
R Podemos culpar a nuestros padres por muchas cosas, incluida la tendencia a engordar. Sin embargo, muchas de estas tendencias al sobrepeso no son tanto una herencia genética sino una herencia de hábitos mal aprendidos. Por ejemplo, si provienes de una familia que adora comer, el comer más de la cuenta forma parte de tu estilo de vida, es un hábito. Y los hábitos pueden cambiarse.
P ¿Puede ser mi exceso de peso el resultado de un metabolismo lento?
R Tu ratio de metabolismo basal es el número de calorías que tu cuerpo necesita para mantener sus funciones vitales. Viene determinada en parte por tu herencia genética. Una amiga con un peso y talla similar al tuyo puede comer más que tú y no ganar peso. Esto puede resultarnos especialmente molesto, pero es probable que tú seas mejor en otras cosas que ella. Hay dos cosas que debes recordar. En primer lugar, si tu cuerpo es menos gordo y más musculoso, tu metabolismo es más alto ya que los músculos queman más calorías que la grasa. Este es el motivo por el que incluir ejercicios en tu plan de pérdida de peso resulta realmente efectivo. En segundo lugar, la drástica reducción de calorías hará que tu metabolismo comience a funcionar a un ritmo más lento para ajustarse al nuevo consumo, y te sentirás hambrienta todo el tiempo. Comer menos pero comer bien es la clave para una pérdida de peso mantenida en el tiempo.
P ¿Por qué los hombres comen más que las mujeres?
R La razón es que son más grandes que las mujeres y, por lo tanto, emplean una mayor cantidad de energía en su mantenimiento diario. Además ellos tienden a desarrollar más masa muscular que las mujeres, masa que resulta desde un punto de vista metabólico más activa que la formada por grasa, lo cual supone que necesita un mayor consumo calórico para su mantenimiento. Las mujeres, sin embargo, presentan una mayor tendencia a la acumulación de grasas.