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Elije tu infusión: ¿de hierbas,
té negro, una adelgazante?
La verdad es que sería un sueño: tomar un sorbito de una
infusión y ver cómo desaparecen los kilos por arte de magia.
Pero ¿realmente estas infusiones son algo más que bebidas
refrescantes?
Voy a leer las hojas de tu té. Veo una que indica claramente que la infusión adelgazante que estás tomando es una pérdida de tiempo. Come con cabeza y haz más ejercicio en lugar de sentarte a beber decenas de tazas de infusiones «come grasa».
Todos buscamos la solución fácil, y ¿hay algo más fácil que perder peso bebiendo una infusión adelgazante? Las tiendas de alimentación y parafarmacias ofrecen algunos de estos brebajes, pero es en Internet donde encontrarás la gama completa. Pero también es cierto que en Internet se puede decir y vender lo que a uno le dé la gana y quedarse tan pancho. Como en otras cosas de la vida, no es oro todo lo que reluce… y las infusiones no son una excepción.
Una buena idea
Hazte tu propia infusión. Utiliza una cucharada (de tamaño café) de hierbas secas o dos de hierbas frescas por taza que vayas a preparar. Cuece agua y vierte la correspondiente a las tazas que vayas a preparar sobre las hierbas intentando cubrirlas. Déjalas entre cinco y diez minutos y cuela el resultado antes de bebértelo.
Vamos a analizar el té negro y el té verde, que son algunos de los más frecuentes en las tiendas. Ambos contienen flavonoides, con muchas ventajas para la salud, entre las que destaca la protección frente a enfermedades cardiacas. Está probado, por lo que bebe y estarás haciendo un favor a tu cuerpo. Eso sí, utiliza leche desnatada y córtate un poco con el azúcar. El té verde ha estado de moda y ha sido el protagonista de algunas investigaciones recientes. Se ha relacionado con la prevención de todo tipo de enfermedades, incluidos algunos cánceres, además de aceptarse que reduce el colesterol e, incluso, acelera la oxidación de grasas (esto es, que aumenta la quema de calorías). Aunque estos estudios tienen que continuar, puedo recomendarte sin miedo a equivocarme que si te gusta el sabor del té verde, no tienes nada que perder si lo bebes (bueno, a lo mejor, pierdes un par de kilos, pero no creo que te importe).
SABIDURÍA TRADICIONAL
Las infusiones de hierbas no son nuevas. Las medicinas china e hindú las utilizan desde hace siglos. Están muy extendidas por todo el mundo como alternativa al café y al té, y en algunos países se utilizan como «remedios caseros» ante algunas dolencias; por ejemplo, se usa el hinojo para ayudar a hacer la digestión y la camomila para reducir la ansiedad y facilitar el sueño. Por supuesto, su eficacia es motivo de discusión, entre otras cosas porque la cantidad de hierba que contienen no parece ser suficiente como para generar ningún efecto en el cuerpo humano. En cualquier caso, una infusión de hierbas no puede hacerte ningún daño siempre y cuando conozcas sus ingredientes. Con lo que sí tienes que tener cuidado son con esas bolsitas de hierbas que se venden con la promesa de ayuda a perder peso.
Otra idea más
Pero, ¿no hay complementos y pastillas para adelgazar que puedan ayudarme a perder peso? Sí, las hay, pero sólo ayudan a perder peso, no reemplazan la necesidad de hacer ejercicio y de una buena alimentación. Mira la IDEA 46, Me tomo una pastilla y ya está, ¿no?
De hecho, muchas personas opinan que las infusiones adelgazantes (como las raíces de regaliz, senna y buckthorn) realmente deberían llamarse simplemente laxantes, ya que es el efecto real que provocan. En pequeñas cantidades, simplemente provocan la pequeña molestia de tener que correr una y otra vez hacia el servicio. Si los tomas en grandes cantidades, te estás buscando un lío. Algunos actúan como diuréticos (sobre todo si tienen diente de león, perejil o enebro entre sus ingredientes), por lo que únicamente perderás agua. También están las hierbas medicinales que contienen estimulantes, como la yerba mate, la kola y el guaraná. No tienen porqué ser malas en pequeñas cantidades, pero si te afecta especialmente alguno de estos ingredientes o tomas una cantidad elevada, puedes sufrir palpitaciones, ponerte nerviosa y tener problemas para dormir. No es habitual, pero también existe el riesgo de ataque cardiaco. Como entiendo que perder peso es el único motivo por el que bebes las hierbas marcadas como adelgazantes (ya que normalmente su sabor no es, precisamente, agradable), y como no está demostrado que tengan ninguna incidencia en este campo, yo me olvidaría de ellas. Tómate una buena taza de té normal o de una infusión tradicional, y disfruta de su sabor.
La frase
«Beber una taza de té diariamente matará de hambre al curandero».
PROVERBIO CHINO
¿Cuál es tu duda?
P El té normal contiene cafeína. ¿No puede afectar también a los nervios?
R Sí, el té contiene cafeína, pero en cantidades muy inferiores al café, a las bebidas de cola normales y a las tabletas de chocolate. Tendrías que beber una cantidad ingente para que te afectara, a menos, por supuesto, que seas especialmente sensible a su efecto.
P También es diurético, ¿verdad?
R Según un estudio reciente, no. Tendrías que tomarte cinco o seis taza de té seguidas para acumular los 250-300 mg de cafeína necesarios para provocar un efecto diurético. De hecho, se considera que el té contribuye a tu ingesta diaria de fluidos, que se recomienda esté entre 1,5 y 2 litros. En países como el Reino Unido en los que muchas personas toman entre tres y cuatro tazas de té diarias, parece que esta «anticuada» costumbre no es tan mala después de todo.
P ¿Cómo debería tomarse?
R Puedes beberlo caliente con leche o limón, o frío con hielo. Depende de ti. Este tema no afecta a las propiedades que el té negro o verde tienen sobre la salud; por tanto, bébelo como quieras. Eso sí, es mejor no beberlo mientras se come, ya que reduce la absorción de hierro.