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Me tomo una
pastilla y ya está, ¿no?
Algunos consideran que las pastillas adelgazantes compradas
en las farmacias son seguras y efectivas. Otros opinan
que simplemente son complementos o, lo que es peor,
algún tipo de drogas o anfetaminas. ¿Quién tiene la razón?
Hace algunos años, cuando era editora de una revista de salud y gimnasia, toda la redacción recibimos con entusiasmo un nuevo producto que quemaba grasa y que aumentaba la masa muscular. Eran unos polvos que mezclabas con agua y tenías que beber todos los días. Por desgracia, no funcionó.
Ocho personas de la redacción decidimos probarlo. Después de una semana, siete tuvieron que dejarlo al sufrir retortijones y diarrea. Una siguió (yo). Mi estómago se encontraba perfectamente y decidí que era lo suficientemente fuerte como para seguir. Pasado el periodo de dos meses indicado, lo dejé, ya que no notaba ninguna diferencia ni en peso ni en tamaño.
Hay muchos complementos que prometen inhibir el apetito, perder peso y aumentar la masa muscular. Estos productos se encuentran normalmente en las farmacias, en las parafarmacias, en tiendas de alimentación y, por supuesto, en Internet. También es fácil que encuentres algún monitor de gimnasio (o entrenador personal) que los recomiende. Pero, ¿son realmente efectivos? Vamos a ver los más comunes:
Picolinato de cromo (Chromium picolinate)
El cromo es necesario para ayudar a la insulina a transferir la glucosa y los nutrientes desde el flujo sanguíneo a las células, además de desempeñar un papel importante en la producción de energía. Se encuentra en alimentos como las setas y el brócoli. El atractivo de los complementos que combinan cromo con picolinato es la posibilidad de perder grasa y ganar tono muscular (basado en varios estudios). Sin embargo, estudios más avanzados no han sido capaces de corroborar los resultados iniciales y, además, algunos estudios han relacionado la ingesta masiva de estos complementos con daños en el ADN y otros inconvenientes. De hecho, en el momento de escribir este libro, hay países que se están pensando su prohibición, como el Reino Unido.
Una buena idea
Si quieres probar una hierba inhibidora del apetito, los científicos han aislado las moléculas activas de la planta Hoodia gordonii, utilizada por las tribus de Kalahari para evitar los retortijones de hambre que se producen durante los largos viajes realizados para cazar. Hay ya algunos productos disponibles que se venden como inhibidores del apetito y están recibiendo buenas críticas. Sin embargo, es necesario seguir con las investigaciones.
Chitosan
Está hecho de caparazones de cangrejo y de langosta molidos. La teoría es que la fibra de los caparazones captura la grasa y la absorbe antes de que el cuerpo la metabolice. Algunos estudios han mostrado que puede ayudar a perder peso, pero no existen estudios a largo plazo, por lo que quién sabe. Las contraindicaciones vienen dadas por el hecho de que el chitosan también reduce la absorción de las vitaminas solubles en la grasa además de que produce un efecto laxante. No es recomendable, ¡sobre todo si eres alérgico al marisco!
Otra idea más
¿Tienen alguna ventaja las infusiones dietéticas? Probablemente no, y no son un producto milagroso. Lee la IDEA 44, Elije tu infusión: ¿de hierbas, té negro, una adelgazante?
Creatina
La creatina la utilizan los atletas y quizás algunas personas de tu gimnasio para incrementar la capacidad muscular. La mayoría de los estudios son incompletos. No está pensado para el común de los mortales.
Aminoácidos
Están disponibles tanto en pastillas como en polvos, pero excepto si nos basamos en la publicidad, no hay pruebas de que aumenten la masa muscular o quemen grasa. El único uso probado de los aminoácidos consiste en usarlos en la alimentación intravenosa de personas que se encuentran bajo ciertas condiciones de salud, como una enfermedad renal. Sería mejor que probaras a comer alimentos proteínicos como la carne y los huevos e hicieras más ejercicio.
La frase
«Las personas normalmente dedican más tiempo a elegir su próximo coche o PC que a seleccionar sus complementos dietéticos».
FELICIA BUSCH, THE NEW NUTRITION (LA NUEVA NUTRICIÓN)
PRESCRIPCIÓN MÉDICA
Producir una pastilla que controle el peso es, sin duda, uno de los Santos Griales de los laboratorios farmacéuticos, ya que cualquier producto que medio funcionara sería una mina de oro. Hay algunos productos ya disponibles. Puede que hayas oído hablar de la subutramina, vendida con el nombre de Reductil, Orlistat (o Xenical), por citar algunos. También han tenido éxito las pruebas de un medicamento llamado Rimonabant tanto en la pérdida de peso como en ayudar a los que están dejando de fumar a no engordar. Por ahora, es necesario que un médico recete este tipo de medicamentos. Pero si vas a tu médico a pedirle una receta, lo más seguro es que te prepare un plan de adelgazamiento, te derive a un dietista o endocrino y te recomiende hacer más deporte. Esto se debe a que, por lo general, se intenta atajar el problema sin acudir a los medicamentos. Sin embargo, si tienes un sobrepeso evidente (que roce la preocupación) o has intentado todos esos medios anteriormente, es posible que tu médico acceda a recetarte algún medicamento específico.
Resumiendo, desconfía de los complementos que prometen perder peso y ganar tono muscular sin esfuerzo. En el mejor de los casos, no funcionarán y simplemente representarán una pérdida de dinero. En el peor de los casos, pueden ser peligrosos para tu salud, especialmente si se combinan con otros complementos y medicinas. Si no eres una persona muy obesa, lo más seguro es que no te prescriban estos medicamentos. Por tanto, vuelve a la ya tradicional máxima de «come bien y haz ejercicio», que está muy probada y que se adapta a todos.
¿Cuál es tu duda?
P He oído maravillas de algo llamado leptina. ¿Qué opinas?
R Esta creencia viene de hace unos años y está relacionada con algunos estudios en roedores en los que la falta de leptina incrementaba su apetito. La idea parte de que las personas obesas pueden estar faltas de leptina y que si la ingieren, se reducirá su apetito. Sin embargo, es muy raro encontrar humanos con bajos niveles de leptina. De hecho, las personas obesas pueden tener un nivel alto de leptina. Aunque siempre se puede pensar en un problema de resistencia a la leptina, no hay nada todavía probado y los estudios siguen su curso.
P Vale, pero si no puedo tomar pastillas, ¿qué puedo usar para controlar el apetito?
R Come poco y más veces para mantener controlado tu nivel de azúcar en sangre y evitar los retortijones de hambre. Prueba a beber muchos líquidos para sentirte llena antes (cualquier cosa desde agua hasta tomate triturado). Come despacio cuando tengas una comida fuera de casa y siéntate a comer en lugar de comer de pie; de ese modo, el cerebro percibirá antes que estás lleno. Evita los aperitivos azucarados, que te proporcionan energía de manera muy rápida, pero que no te sacian teniendo hambre al poco rato. ¡Prueba cualquier cosa que te evite pensar en la comida!
