EL GIRASOL

I

El gallardo girasol

de tanto adorar al sol

tomó su fisonomía;

cual amador a su amada

le sigue con su mirada

todo lo que dura el día.

Ve que nace tras la aurora

y le mira sonriente,

ve que muere en occidente

y triste su ocaso llora.

Y entonces su desconsuelo

y duelo

aparece sobre el mundo,

profundo.

II

Girasol de Jesucristo

fuisteis vos ¡virgen María!

desque en Belén le habéis visto

después que de vos nacía.

Tras él vuestras ansias van

cual va la aguja al imán.

Allá en el humilde establo

para vos fué sol naciente:

de la cruz en el retablo

al verle por fin muriente,

¡oh María!

girasol de un sol poniente,

vos pasasteis su agonía...

__________