RAVIOLES DE BERENJENA, TOMATE SECO, PAPA Y CEBOLLA CONFITADA

Para 6 personas

1 kg de masa para ravioles

5 berenjenas asadas

2 cucharadas de ajo asado

1 cucharada de tomillo fresco

3 cucharadas de tomates secos hidratados y picados

4 cebollas cortadas en pluma, confitadas y picadas

2 papas hervidas y hechas puré

Pan rallado c/n

Aceite de oliva c/n

Sal

Pimienta

Salsa:

2 kg de tomate fresco cortado en concassé

200 g de panceta ahumada

1 diente de ajo

1 puñado de hojas de albahaca

Aceite de oliva extra virgen c/n

Para la salsa:

Picar el ajo o dejarlo entero en camisa. Calentar 3 cucharadas de aceite de oliva en una cacerola.

Agregar la panceta cortada en lardones. Dorarlos. Agregar el ajo. Una vez que esté ligeramente dorado agregar el tomate concassé.

Dejar cocinar a fuego lento por aproximadamente 30 minutos.

Apagar el fuego. Ajustar (si fuera necesario) la sal y agregar las hojas de albahaca.

Mezclar y reservar.

Colocar en un bowl grande la pulpa de las berenjenas asadas. Agregar la pasta de ajo asado, los tomates secos y las cebollas confitadas, todo picado muy fino. Añadir el puré de papas, el tomillo fresco, 3 cucharadas de aceite de oliva y la cantidad de pan rallado necesaria para que la mezcla resulte homogénea, ni muy compacta ni muy blanda.

Verificar la sazón y agregar eventualmente sal y pimienta a gusto.

Extender la masa para los ravioles (1/1,5 mm de espesor) y preparar los ravioles como de costumbre, utilizando el relleno de berenjenas. Cocinarlos en abundante agua ligeramente salada. Cuando suban a la superficie, colarlos.

Salsear y servir.

Si les quedan ravioles (sin cocinar) los pueden congelar y utilizar en otra oportunidad, con esta u otra salsa.