SINOPSIS

 

 

 

 

—¡¿Qué?! —exclamé asombrada mirando a mis padres.

—Sí Oana, te casas —continuó diciendo mi madre, tan tranquila, con una sonrisa de oreja a oreja.

—No quiero tener una boda a los diecisiete —contesté con los ojos muy abiertos tratando de analizar la situación.

—Lo siento cariño. Lo harás, quieras o no —declaró mi padre mirándome muy serio.

—¡Os odio! ¿Me habéis escuchado bien? Os o-d-i-o —dije recalcando cada letra y tirando un florero mientras me levantaba para salir de esa casa.