NOTAS DE LA AUTORA

Quisiera destacar que algunos hechos han sido modificados por exigencias narrativas. Los personajes fueron reconstruidos en base a fuentes históricas, a descripciones transmitidas oralmente o a través de las cartas originales que estuvieron depositadas en mis manos, las que cuido con afecto.

Agradezco a mi madre, Ana Prieto, por su memoria rica de detalles, a Rosina Dal Bianco por sus narraciones anecdóticas tan llenas de pasión, a Marcelliana Dalla Costa por sus recuerdos de infancia. A Guido Tosetti por haber mantenido un puente entre los dos paises, custodio de una herencia cultural. A Leonor Dalla Costa, por su coraje, su profesionalidad y que desde EEUU me ha soportado con empeño instancable, animándome a pesar de mis errores. También agradezco a todos los que de una manera u otra han estado muy cerca mio en la creación de la historia, leyéndola toda o en parte, estimulándome, corrigiéndome, criticando o aplaudiendo. Gracias sólo por haber estado a mi lado.