Como inclinarse a un libro que conserva
una flor apresada entre las hojas
como alargar los brazos hacia un cuerpo
de mujer sin saber cómo es tañido
como engendrar un hijo oscuramente
del que sólo su nombre resplandezca
como viajar tendido sobre un carro
alto de hierba contemplando el cielo
como ver en silencio una guitarra
tensa para romper por donde crece
como hacerse temprano a la mañana
y abrir todas sus rejas a los pájaros
como arrimar la mano a una campana
y ver que nos deshoja su sonido
como comprarse un barco hacia el naciente
con marineros ciegos que lo guíen
como venir perdidos por la arena
y contemplar el agua en un espejo
casi como encontrar a Dios de cara
y no acertar temblando el buenos días:
así es entrar novicio en la hermosura
de la ciudad que peina el sol reciente.