LA VAGINA DENTADA

LEYENDA ZOQUE

El valiente Tumšawi, héroe y semidiós del pueblo zoque, estaba enamorado de una hermosa jovencita. Y todos los días iba a espiar a la muchacha, que se bañaba en una laguna.

Así fue como descubrió algo terrible: al terminar el día, en el momento de anochecer, la jovencita se transformaba en una vieja bruja de piel escamosa, que tenía dientes en su cosa de mujer, a la que alimentaba como si fuera una boca.

Entretanto, la mujer se había dado cuenta de la presencia de Tumšawi, y lo deseaba tanto como él a ella. Pero cuando se presentó ante su amado, dispuesta a acostarse con él, a pesar de que estaba tan enamorado, Tumšawi tuvo miedo, mucho miedo. Porque si introducía su pene en esa peligrosa boca, los dientes lo morderían hasta castrarlo. Y se negó.

Rechazada, despechada, afectada en su vanidad, la mujer encantada se transformó en volcán, provando inundaciones y temblores. Ése es el origen del volcán Chichonal.

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Los zoques son una etnia mexicana de los estados de Chiapas, Oaxaca y Tabasco.

En mitos de los Ainu de Hokkaido, en Japón, de los aborígenes de Guinea, en leyendas de varios pueblos originarios de Sudamérica, y hasta en chistes completamente actuales que circulan por la Web, la fantasía de la vagina dentada recorre el mundo, haciendo temblar a los hombres a su paso.

En Kawasaki, un suburbio de Tokio, se realiza cada primavera el Festival del Falo de Metal. El tema principal del evento es la veneración del pene, que está presente durante todo el festival en forma de ilustraciones, dulces y decoraciones. Cuenta la leyenda que un temible demonio de dientes afilados se ocultaba en la vagina de una hermosa joven. Dos veces la chica intentó casarse, pero en la noche de bodas el demonio castraba a los maridos. Su tercer enamorado le pidió a un herrero que le fabricara un falo de metal y así consiguió hacerle saltar los dientes al maldito demonio, que huyó asustado.