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GREY ENTRÓ EN SU OFICINA temprano para revisar su correo electrónico. No había trabajado mucho. Al día siguiente era el uno de noviembre y decidirían en que nuevos proyectos iban a invertir hasta Enero. La investigación continuaba pero podía holgazanear en alguno de ellos. Su socio, John Whitaker y su esposa, Renée, siempre iban al Caribe durante el mes de diciembre. Y las dos primeras semanas de Enero eran frenéticas con la presentación de investigaciones a cargo de Max y Susan, John y Grey digeriendo toda la información y decidiendo en que compañías centrarse.
Pero ahora, ahora tenía tiempo para Carrie. El se divertía cuidando de ella y su ánimo se exaltó. Se reclinó en su silla. Abrió su café de Starbucks mientras examinaba el correo acumulado en su escritorio. Tomó un sobre grueso y pesado. Era una invitación.
Lo abrió y vio su invitación anual a un evento de recaudación de fondos en el American Museum of Natural History. Grey era consejero y fundador de una organización benéfica que estableció con sus tres mejores amigos de la universidad. Se llamaba “Fundación Cuatro Jinetes” Cada miembro tenía que aportar 100.000 dólares cuando se convertía en fiduciario. Anualmente se esperaba una la recepción de una aportación de 20.000 dólares a la fundación. Grey invirtió dinero y cada año donaban 40.000 dólares a varias organizaciones benéficas. Así que todas las organizaciones sin ánimo de lucro los invitaban a sus eventos recaudatorios de fondos.
El acto del Natural History Museum era su favorito y al único que los cuatro jinetes siempre asistían. Golpeó la invitación contra su mano mientras pensaba. ¡Era el sitio perfecto para que Carrie conociera a sus amigos de un modo informal. Mientras sonreía. Perfecto. Cuando Susan llegó, él dijo que fuera a su despacho.
"Quiero confirmar mi asistencia a esta invitación del Museo. Sé que hemos pasado la fecha límite, pero ... "
"Ya lo hice, Sr. Andrews."
“¿Ah, si?”
"Siempre va a ese evento y asumí, naturalmente, que este año también lo haría. Ha estado tan ... eh ... ocupado con otras cosas que me encargué de registrarle ... con acompañante. Supongo que será la Sra. Tucker "
"Ese es mi plan. Tener esa previsión es digno de un aumento, Susan,” comentó Grey riendo.
"¿Se lo puedo presupuestar?” replicó ella, sonriendo.
Susan salió de su oficina y Grey tomó el teléfono para llamar a Carrie.
"Mañana por la noche hay una gran fiesta en el Museum of Natural History. Es un evento para recaudar fondos que se celebra cada año. ¿Te gustaría venir?”
"Mañana, miércoles, ¿no? Déjame ver."
Se hizo el silencio a través del teléfono durante unos minutos.
"¿Está bien si no llego hasta las ocho o más ó menos?"
"Por supuesto. Dime a que hora vendrás y te envio un coche. Nos encontramos directamente allí”
"Perfecto. Déjame ver si puedo convencer a Dennis. Hasta luego, cariño. "
Gris empujó hacia atrás su silla, puso los pies sobre la mesa y miró por la ventana. ¿Puede ser mejor la vida?
* * * *
GREY FLOTABA EN EL aire. Carrie lo necesitaba tanto como él a ella, completaba su lista. No podía cansarse de ella. Esperar tanto tiempo hasta encontrar a la mujer adecuada había sido una agonía y ahora la tenía, quería estar con ella todas las noches. Por las noches, durante la semana, salía del trabajo a las seis para ir a su apartamento y preparar la cena, o llevarla preparada. Cuando Carrie llegaba por la noche tarde, él estaba allí para masajear sus pies, ofrecerle lo que le había preparado y hacerle el amor. Su corazón daba un brinco cada vez que la expresión de cansancio reflejada en su cara cambiaba en una sonrisa al abrir la puerta y ser recibida con un beso.
Grey estaba enamorado, locamente enamorado y había planeado llevar a Carrie el fin de semana a las montañas para ver los cambios de colores junto con Jenna y Bill en una cabaña alquilada. Cogió el teléfono y llamó a Jenna. Necesitaba hablar con ella para confirmar el plan del fin de semana y contarle la idea que había tenido para el día de Acción de Gracias.
"Jenna, ¿estás lista para un viaje a las montañas?” preguntó Grey cuando ella contestó el teléfono.
"¿Por qué has esperado hasta que vaya a hacer tanto frío?" se quejó Jenna.
"Será perfecto. Excelente clima para acurrucarse ... ó ¿ya no hacéis eso Bill y tú ahora que ya estáis casados?”
"¡No te incumbe! Y dime, ¿cómo va el tercer punto de la lista con Carrie?”
"¿Si de verdad lo quieres saber, te lo cuento. Carrie es ... "
"¡Suficiente! ¡Para! Demasiado información, Grey, Demasiado... "
Rió al teléfono.
"Entonces, ¿cómo va todo el tema con ella?” preguntó Jenna.
"La he invitado para Acción de Gracias," anunció Grey.
“¿Qué?”
"Lo que te digo. Vendrá con nosotros ... espero."
"Nunca habías invitado a una mujer al día Acción de Gracias antes. Debe ser bastante buena en el tercer punto de la lista de matrimonio, ¿eh?”
"Te lo quise contar pero no me dejaste ..."
"Y todavía no quiero. ¿De veras vas a traerla por Acción de Gracias?"
"Eso es lo que dije. ¿Te estás quedando sorda?"
"¿Se lo has contado a mamá y papá?"
"Aún no. Se lo iré contando poco a poco ... "
"¿Estás bromeando? Es demasiado bueno para perdérselo. Quiero estar presente cuando lo hagas.”
"No te voy a decir cuando les llamaré."
"¡Ay! vamos, Grey."
"¿Te enfadas? Soy inmune," se rió entre dientes.
"No solías serlo."
"Yo por entonces era ingenuo. Ahora sé que lo haces para manipularme. En este momento ya no funciona tu táctica. Deja de entrometerte, Jenna." Grey empezó a pasearse por su despacho.
"Está bien, está bien. Pero me contarás su reacción, ¿no?"
"Dirán, ¡qué bonito, Grey! Nos encantaría conocerla” dijo, imitando la voz de su madre.
"Sí, pero sabes que se va a morir. Al minuto que salgas de la habitación ella muy probablemente se sorprenderá ... igual que papá. "Ya es hora de que nuestro hijo se estabilice... Como si lo estuviera oyendo."
Grey rió.
"Quiero ver como rompes tu lista de matrimonio, Grey, quiero comprarme un vestido para tu boda."
"Estoy en ello, no me presiones."
"Bill ha llegado. Te tengo que dejar."
"¡Oh! ¿es le momento para el tercer punto de mi lista?” se rió.
"Eres imposible. Adiós “ dijo Jenna y colgó el teléfono.
* * * *
CARRIE TOMÓ SU BOLSO, el abrigo y corrió hacia el ascensor. El coche de Grey estaría esperando fuera. Entró y lo llamó. El ruido de fondo de la fiesta hacía difícil entenderse y salió a la calle.
"¿Ya estás en el coche?"
"Sí, nos vemos pronto."
"Bien. Los otros tres Jinetes ya están aquí y quiero que los conozcas.”
"¡Oh, no! ¿Los Cuatro Jinetes juntos?"
"Siempre nos reunimos en esta fiesta. Quiero que te conozcan.”
"Entonces tengo que cambiarme. Necesito que el chófer me lleve a mi apartamento primero. No me tardaré mucho. No puedo aparecer con este aspecto.”
“Pero Carrie, estoy seguro que tu...”
Ella colgó el teléfono y se inclinó hacia delante sentada.
"Chófer. Tenemos que parar en un lugar antes de ir al museo.”
Le indicó al chófer la dirección y luego se echó hacia atrás mientras hacía un inventario mental de lo que tenía disponible que estuviera limpio y planchado.
La limusina oscura avanzaba por la entrada adoquinada debajo del gigante arco de piedra de color rosa que conduce al Museum of Natural History. La rotonda anterior al arco estaba llena de setos perfectamente podados, caléndulas plantadas en grupo y zinnias en colores otoñales anaranjados y dorados.
Grey se paseaba por delante de la entrada lateral del museo en la calle 77th cuando el coche llegó. Se acercó y abrió la puerta.
"Carrie, pensaba que ...” entonces se detuvo y simplemente la miró fijamente.
Llevaba un fino vestido de punto de cachemira de color crema, forrado. El vestido era de manga corta y con un escote revelador y que se adhería como una segunda piel. Adornaba su cuello con un collar de cadena gruesa en oro. En la muñeca llevaba la pulsera a juego que tintineaba con otra. Pendientes pequeños de aro en oro que se hicieron visibles cuando se apartó su lujoso el pelo. Los zapatos con tacón de aguja color anaranjado oscuro la acercaban a la altura de Grey, pensó que aún le pasaba seis pulgadas a ella. Sus pestañas maquilladas gruesamente con rímel, un toque de colorete y un color coral en los labios eran todo el maquillaje lucía. Una pequeño bolso de mano color naranja oscuro y una capa de tafetán color marrón chocolate oscuro completaban el atuendo. Grey estaba con la boca abierta. Carrie le sonrió y cerró la puerta del coche.
“¿Llego tarde?” preguntó, moviendo sus ojos.
“¡Dios mío!” murmuró él cuando recuperó el aliento.
"¿Qué?” preguntó ella, fingiendo no saber a lo que se refería.
“Estás ... estás ... increíble. Increíble, Carie.”
Ella le dio un beso en la mejilla y luego unió su brazo al suyo y se dirigieron hacia la puerta. Accedieron por la entrada principal decorada con los bustos de los fundadores del museo en bronce. Se podía oír las risas y tintineo de copas lejanas de la sala de exposiciones donde se celebraba la fiesta.
"¿Es por aquí la fiesta?” preguntó ella, siguiendo los sonidos festivos.
"Increíble,” repitió mientras se reía.
* * * *
EL MUSEO SUELE CELEBRAR sus fiestas en la gran sala de exposiciones sita en la primera planta. Las exposiciones, normalmente en vitrinas de cristal, estaban alineadas a las paredes, dejando un pasillo central largo completamente libre. Las mesas con comida y bebidas se hallaban colocadas en cada extremo lo que permitía a los asistentes mezclarse y pasear, charlando, mirando a los elementos en pantalla y reponer sus bebidas y recargar sus placas en el otro lado. A menudo exhibían una película de su progreso en nuevas exposiciones en su teatro IMAX por lo que los grandes contribuyentes pudieran ver dónde iba su dinero.
Los tacones de Carrie sonaban en el brillante suelo de mármol oscuro y pulido mientras se dirigía hacia la comida. Del brazo de Grey, los otros tres jinetes no podían dejar mirarla. Will, Spence y Bobby estaban hablando y riendo mientras Spence espiaba a Grey y Carrie. Dejó de hablar y miró a Carrie que se acercó, le dio un codazo a Will que estaba a su derecha. Will y Bobby se giraron para ver que estaba viendo.
"Carrie, estos son Spence, Will y Bobby ... los otros tres jinetes. Chicos esta es Carrie Tucker.”
Los hombres murmuraron saludos mientras sus ojos recorrieron a Carrie de arriba a abajo, mirándola de tal forma que parecía más que estaba en un bar que conociendo a los amigos de Grey. Se cambió de lugar un poco incómoda. El la tomó acercándola un poco a él. Spence tomó la mano de Carrie y la llevó hasta el bar.
"Dime, Carrie. ¿Cuánto tiempo hace que tu y Grey estáis ... juntos?"
"Unos meses, creo."
"¿Dónde la has estado escondiendo, Grey?" preguntó Will.
"¿Hace unos meses? ¡Ya! Entonces seguro que cumples todos los requisitos de la lista.” dijo Spence, dejando caer su mano.
"Grey no pasa tanto tiempo con nadie que no pase esa prueba...” dijo Bobby.
"¡Chicos, chicos! no la agobiéis, dijo Grey, tomando su mano mientras la separaba.
"¿Lista?” preguntó Carrie, con sus cejas levantadas mirando a Grey.
"No sé de lo que está hablando. Vamos a por algo de comer. Me muero de hambre,” dijo Grey, tomando el codo de Carrie con la mano.
Grey condujo a Carrie a la mesa donde estaba la comida, lejos de los otros jinetes. Le presentó a la Responsable de Desarrollo del museo, Lila Samuels.
"¿Grey me dijo que trabajas en publicidad? A nosotros nos vendría bien un poco de ayuda en la promoción vacacional de recaudación de fondos. Este año tenemos objetivos más altos que alcanzar.”
"¿No tienen una agencia?"
"Somos una cuenta gratuita, Carrie. Nuestras agencias trabajan de forma gratuita. A veces eso no nos beneficia. No creo que ellos inviertan suficiente tiempo en nuestras peticiones.”
"Estaría encantada de reunirme contigo para almorzar y tener un intercambio de ideas.”
"¡Eso sería fabuloso!"
Mientras las mujeres estaban ocupadas coordinando sus agendas, Grey se reunió con sus amigos.
"Oye, ¿quién te dijo que tenías que mencionar la lista?” preguntó a Spence.
"Lo siento, chico. ¿No sabía nada acerca de la lista?” respondió Spence.
"¿Tu le explicarías a una chica lo de tu lista?"
"¡Diablos! no. Pero yo nunca he tenido una lista,” dijo Spence, levantando su copa de vino para dar un sorbo.
"Tal vez serías más feliz si la tuvieras," Grey le disparó.
La sonrisa desapareció de la cara de Spence."¿Estás insultando a Susan?¿Quieres que vayamos fuera y me lo dices otra vez?” dijo Spence con ira intermitente en sus ojos.
"No me refería a eso, vamos a olvidarlo, Spence. Siempre te quejas de ella. Tal vez si hubieras tenido una lista, tendrías todo lo que deseas en una mujer.”
"Estás loco,” dijo Spence alejándose de su amigo.
"¿Ah, si? Tengo todo lo que quiero con Carrie.”
Los tres hombres se detuvieron. Will y Bobby le sonrieron.
"Es cuestión de tiempo. ¿Para cuándo es la gran boda?” preguntó Will.
"No se lo he pedido todavía."
"¿Por qué no?" Bobby hizo girar su copa de vino vacía.
"Es muy reciente. Pensaba esperar hasta las vacaciones, para asegurarme “ dijo mientras un rubor se arrastraba hasta su cuello.
"Sin rencor, Grey. No sabía que ibas tan en serio” dijo Spence, extendiendo su mano.
"Lo mismo te digo. Susan es genial. Guardar la lista de cosas para vosotros, chicos “ dijo Grey, estrechando la mano de Spence.
"Si querías que fuera un profundo y oscuro secreto, no deberías habérselo contado a Bobby y Spencer," rió Will entre dientes.
"Tienes razón” dijo Grey, sonriendo.
"¿Le has presentado a tu familia?” preguntó Bobby, dandóle al camarero el vaso vacío para que lo llenara.
"Nos vamos un fin de semana con Jenna y Bill. Pensé en invitarla para celebrar el Día de Acción de Gracias ... "
"¿Acción de Gracias? Vaya, esto va en serio “ dijo Will, levantando las cejas.
"El santo Andrews Acción de Gracias poseído por un extraño. Tus padres van a flipar” dijo Spence.
"Probablemente. Tengo que estar seguro antes de meterla en la boca de lobo “ confió Grey.
"¿Por qué no te esperas otros diez años, Grey, para poder estar absolutamente seguro?”Shhhhh,” Bobby sonrió.
"La familia ... es la prueba definitiva. ¡Jolínes! cualquier mujer como ella ... nos gusta, ¿no? Pero tu familia ..., es diferente. “ dijo Spence.
Todos asintieron.
"Mi madre estará feliz que tenga dos brazos, dos piernas y respire. No debería ser un problema, " bromeó Grey.
"¿Quién respira?” preguntó Carrie, acercándose por detrás a Grey.
"Tú, cariño” comentó Grey, con un poco de rubor en sus mejillas. Pasó su brazo alrededor de su cintura y esperó que sólo hubiera oído eso de la conversación.
"¿Qué me dijiste que hacías para ganarte la vida, Carrie?” preguntó Will mientras llevaba su copa hacía sus labios.
Grey dejó escapar un suspiro de alivio cuando Carrie se involucró en una discusión con Will acerca de la publicidad.