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CITA
Cómo conseguir citas
Fase 8 del método SUS

En este capítulo verás…

• Si es necesario pagar en las citas.

• La actitud ideal para cautivarla en la primera cita.

• Un pequeño truco que te asegurará que tengas citas cuando quieras.

• Qué citas son las más y las menos recomendables.

• Ideas para llegar al sexo en la primera cita y casi sin esfuerzo.

La fase de cita tiene que ver con abandonar con la mujer el primer ambiente donde la conocimos. Puede tratarse del primer encuentro después de conocerla por internet, el segundo encuentro después de conocerla previamente en otro lugar y haber conseguido su contacto para arreglar la salida o incluso puede tratarse de una cita instantánea donde invitamos a otro lugar a una mujer que acabamos de conocer en una discoteca, bar, calle o cualquier sitio. Durante la cita generalmente se continúa con la empatía y se hace hincapié en el juego sólido, aunque algunos otros, como Martín, prefieren utilizar este segundo encuentro para intentar avanzar directamente hacia el sexo.

Las enseñanzas de Martín

Citas más recomendables

LA PRIMERA CITA IDEAL: EN TU CASA

La puedes invitar a ver películas en tu reproductor de DVD. Y por supuesto, asegúrate de tener el reproductor en la habitación antes de que ella llegue. Colocar una película de DVD en el reproductor requiere menos energía y tiempo que cocinar para ella, por ejemplo. Y menos dinero.

Esta es mi opción favorita. Porque hay que acostarse en la cama para ver lo que sea en la televisión. Y una mujer acostada en tu cama es algo de por sí interesante.

Cocina para ella

Aprende dos o tres recetas de cocina. Comer una exquisita comida es uno de los grandes placeres de la vida. Más de una vez he invitado a chicas a que vengan conmigo al supermercado a comprar los ingredientes que iba a usar para su plato. Cuando esté en la cocina, dile que te ayude a preparar el plato. Muchas mujeres van a ver esto como algo verdaderamente romántico.

Otras ideas son invitarla a tu casa a:

Uno de los grandes beneficios de invitar a mujeres a tu casa es el hecho de que puedes hacer actividades útiles de tu vida cotidiana en caso que ella llegue tarde, ya sean tareas de trabajo, de ocio, etcétera. Al proponer este encuentro, la mujer puede negarse; entonces tú le propondrás…

IR A VER ROPA: LAS MUJERES AMAN LA MODA

Es otra cita que te aconsejo por ser completamente gratuita e interesante. Puedes llevarla donde haya muchos locales juntos y cerca. Puede ser cierta calle en especial o algún centro comercial.

Lo ideal es que estos locales o centros comerciales estén a muy pocos minutos de tu casa o apartamento. Cuanta menor sea la distancia, mejor. La idea es que puedas llevarla a tu casa después de haber ido a ver ropa.

A la mayoría de las mujeres les fascina el tema de la moda. En esta clase de salidas, además, hay muchos elementos de qué hablar (pantalones, camisetas, cazadoras, calzado, etc.). Incluso puedes decirle que diseñe un look especial para ti, teniendo en cuenta las prendas que tengáis a la vista o hayáis elegido.

Otra ventaja que tiene esta cita es el ahorro de dinero. Si te vuelves exigente con tus gustos, tal vez decidas conocer a muchas mujeres antes de emparejarte con alguna y eso puede salir caro.

Citas menos recomendables

SALIR A COMER FUERA (ALMORZAR O CENAR)

La idea de salir con una mujer es que ella se sienta lo más cómoda posible en la situación. Y que la mujer, en el momento de estar comiendo, piense que tal vez tú le veas comida entre los dientes mientras ella se ríe o habla no es una situación cómoda.

Es en parte por esta razón por lo que no te recomiendo cenar en las primeras citas, a menos que comáis en tu casa y la comida que comáis no tenga condimentos pequeños que podrían meterse entre los dientes. Todo eso puede estar bajo tu control.

Pero si se da el caso arriba mencionado, después de comer ve al baño a lavarte los dientes. Puede pasar también que la mujer en cuestión sea un poco «descuidada» para comer. O lo seas tú. Y eso la haga (o te haga) pasar vergüenza y no disfrutar tanto el encuentro.

IR A BAILAR

Hay mucha competencia masculina y el alto volumen de la música puede interferir en el intento de conoceros mejor.

Recuerda que la principal idea de la cita es conocerse mejor. Crear empatía. Y el alto volumen de las discotecas no suele ayudar a eso. Es por tanto una pésima idea para las primeras salidas.

IR AL CINE

Una de las metas principales de una cita es conversar y comunicarse directamente con la mujer. ¿Cómo lograr esto? Prestando atención a lo que ella dice y hace en la cita. Y sobre todo… hablando. Por eso no te recomiendo ir al cine para esta misión.

Hasta donde yo sé, está mal visto tener una charla o diálogo en un cine mientras proyectan una película. Y conversar es uno de tus objetivos principales.

Sí te aconsejo este tipo de cita, sin embargo, si antes tienes pensado ir a otro lugar y charlar con ella antes de entrar. Y también como tercera o cuarta cita.

Días para citas

Propón que las salidas sean en la medida de lo posible las tardes de los fines de semana. No en las noches de estos, ni durante la semana como primera opción. Hay días entre semana donde hay discotecas abiertas. Dependen del lugar, pero suelen ser miércoles y jueves.

Así que puedes reservar la noche de estos días para salir a conocer nuevas mujeres y juntarte con las que ya conoces los lunes y martes por la noche si no aceptan verte las tardes de los fines de semana.

Si sigues en búsqueda de mejorar tus habilidades, reserva los viernes y sábados por la noche para salir a discotecas y no para tener citas. Usa esas noches para conocer nuevas mujeres y pulir tus habilidades.

Consejo indispensable para la cita

Trátala con confianza, como si la conocieras de toda la vida. Recuerda comunicarte al mismo nivel que antes. Si ella ha acudido a una cita contigo, es muy probable que le haya gustado la personalidad que conoció de ti hasta ese momento. Por eso, sigue comportándote de la misma manera.

Si usaste el humor burlón con ella, sigue usándolo. Si usaste el humor arrogante con ella, sigue usándolo.

Lo ideal, de cara al futuro, es que TÚ te transformes en una persona atractiva y no estés usando comportamientos forzados o «técnicas». Pero recuerda que muchas veces para conseguir un comportamiento natural tienes que empezar por estar un tiempo forzando el tipo de comportamiento específico que quieres obtener.

La caballerosidad

Abrirle la puerta del coche, de los restaurantes, de tu casa y dejarla pasar primero son gestos a tener en cuenta

¡Atención! Si ella percibe que te importa demasiado su reacción, puede restarte puntos. Si te esfuerzas demasiado en ser un caballero, también está la posibilidad de causarle desagrado por mostrarte demasiado interesado y esforzado en agradarle.

Simplemente haz estas acciones sin darle mucha importancia. Ábrele la puerta con la misma expresión con que te tomas un vaso de agua.

Origami: un recuerdo físico de ti

Esta idea es simplemente fabulosa. El origami es el arte japonés de la papiroflexia, realizar figuras con papeles. Si en una cita vas a tomar algo o a comer, puedes utilizar una servilleta para hacerle una figura con papel y regalársela al final del encuentro. Si estás en una discoteca, puedes utilizar una entrada. Esta es una gran idea porque le obsequias con un regalo hecho íntegramente por ti, le das algo que tal vez ningún hombre en su vida le dio, y además, ella se lleva un recuerdo físico del encuentro contigo. Y nunca va serte difícil encontrar un papel para usar.

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Las enseñanzas de Iván

La cita es para generar empatía

Durante la primera cita, a menos que ya hayas tenido sexo, vas estar en la fase de empatía. O sea, que la cita va a girar alrededor de la idea de que la mujer te conozca más a ti y tú más a ella.

Mentalidad antes y durante la cita

Muchos hombres con mentalidad de escasez van a una cita con una desconocida fantaseando con el comienzo de una relación seria y monógama. Mi recomendación es que la palabra noviazgo no cruce por tu mente en las primeras citas, y que no te presentes con expectativas, sino con ganas de conocer a alguien y pasarlo bien. Sé que cuesta horrores, pero ser un buen seductor muchas veces demanda autocontrol.

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Si la mujer siente que sin conocerla quieres algo serio con ella, es probable que te tache de desesperado. Compórtate siempre con mentalidad de abundancia. ¿Qué haría un hombre con muchas mujeres en una cita? ¿Se pondría nervioso? ¡No, sabe que hay muchas más mujeres! ¿Pensaría en noviazgo? ¡No, entiende que para conocer a una mujer hace falta mucho tiempo! Tómate las primeras citas con mucha calma y una vez que la conozcas un poco más, puedes empezar una relación seria. Concéntrate en pasarlo bien con ella.

¿Pagar o no pagar?

¿Eres un hombre que les paga cenas a sus amigos, invita a copas a mujeres feas o tiene gestos generosos con todo el mundo? Si ese es el caso y eres la clase de persona a la que le gusta hacer regalos para hacer sentir bien a la gente, no hay problema en que pagues citas a las mujeres. Pero si sólo pagas para sentirte seguro de que así le vas a gustar, estás desperdiciando tu dinero.

No busques comprar el afecto de ninguna mujer; el amor es gratis… Y el sexo también. No hace falta que le pagues cenas, bebidas, entradas a conciertos, regalos caros, el hotel o el taxi. Obviamente a casi ninguna mujer le desagrada que le paguen en la primera cita. Si tú fueras mujer y estuvieras acostumbrada a que todos los hombres te paguen tus caprichos, ¿cómo reaccionarías cuando un hombre te pide que le pagues la mitad del hotel? No compres el tiempo de una mujer, no es necesario.

Tal vez la idea de no pagar en las citas no te termine de convencer, pero cuando tengas tres citas por semana, invites a las tres a cenar y a la tercera te des cuenta de que no tienes dinero para pagar la cuenta, te vas a acordar de mi consejo.

Un consejo para asegurarte de tener citas

A mí me gustaba tener citas todos los domingos, ese era mi mínimo semanal. Así que a todas las mujeres que conocía a lo largo del fin de semana (jueves, viernes y sábado) las invitaba a salir el mismo domingo por la tarde. De esa manera me aseguraba de que por lo menos alguna iba a ir. Si surgía la ocasión en que más de una confirmaba que iba a ir, cancelaba la cita con las que menos me interesaban e intentaba verlas durante la semana.

Asegúrate de que va a ir

Antes de salir al lugar de encuentro, asegúrate de que va a ir mediante una llamada telefónica o mensaje de texto. Si te contesta el teléfono y dice que no hay problema, va a ir a la cita. Suele pasar que la mujer se eche atrás en el último momento; por eso es recomendable que uno llame para confirmar.

No es divertido que te dejen plantado y muchas mujeres tienen la costumbre de hacerlo. Para evitar plantones es recomendable saber manejar bien el juego sólido. Ya que muchas cancelan citas por el miedo «escénico» que les agarra antes de ir.

Cita instantánea

Muchos asiduos al acercamiento diurno tienen la costumbre de invitar a la mujer a hacer algo poco después de acercársele. Por ejemplo, en un centro comercial después de hablar cinco minutos con una mujer, la invitan a una terraza a tomar un café. De esta manera se genera una suerte de cita instantánea el día en que la conociste, simplemente cambiando de escenario. Algunos conocidos incluso han llegado al sexo el mismo día, llevándola de la cita instantánea a su casa. Obviamente, el requerimiento es acercarse a mujeres que tengan tiempo libre y en lugares de esparcimiento.

Planificar el encuentro

Es muy importante también que planifiques tus citas. En una época de mi vida repetía la misma cita tres veces por semana con mujeres diferentes. La primera cita con una mujer era siempre igual y siempre tendía a concluir con sexo.

De esa manera, tenía todo bien planeado y pocas probabilidades de imprevistos. Lo ideal es planificar la cita teniendo en cuenta lugares divertidos gratuitos o de muy bajo coste, que ofrezcan muchas posibilidades de conversación y que terminen en sexo. Sin embargo, con el tiempo desarrollé la costumbre de tener citas más improvisadas y acordes a lo que me generaba la mujer en cuestión. En general, cuando salgo con una mujer que me gusta mucho, el sexo pasa a un segundo plano y disfruto más de conocerla personalmente.

¿Un año?

Si bien me tomó un año comenzar a tener citas con regularidad, debes recordar que empecé desde prácticamente cero con las mujeres. Durante mi primer año de aprendizaje interioricé los elementos básicos de la seducción, como la vestimenta, el lenguaje corporal, el acercamiento y el material preparado. No porque quisiera, sino porque hasta que no lo hice no logré mis primeros resultados concretos. La mayoría de nuestros estudiantes logra tener citas en menos tiempo.

Mis citas ideales

A estas alturas no soy organizado en cuanto a la cita. Sin embargo, cuando comencé sí lo era y creo que fue productivo. En un primer momento me armé de material preparado y consejos para tener citas. Fue un área que me costó tiempo dominar y aprender a disfrutar. Mis primeras citas consistían en encontrarme los domingos en una esquina determinada, desde la cual comenzaba a pasear por uno de los barrios más bulliciosos de Buenos Aires, lleno de negocios, parques, ferias y sitios de interés. El plan era siempre el mismo: intentar tener sexo en la primera cita. Para ello había desarrollado toda una estrategia. Señalaba la cita en un momento del día que me diera alrededor de una hora de tiempo antes del anochecer; en verano en Buenos Aires eso serían las siete de la tarde y en invierno las cinco. Desde ahí comenzaba la salida, paseaba por una feria hippie en la cercanía del punto de encuentro, de ahí íbamos a un barrio chino, de ahí a una plaza donde la besaba al atardecer, desde ahí caminábamos unas diez manzanas por unas calles muy bonitas, anochecía y finalmente intentaba llevarla a un hotel. A esas alturas habían pasado unas dos horas de cita, las calles estaban menos transitadas, y nos habíamos besado. Al llegar a las cercanías del hotel, la besaba apasionadamente a unos metros de la puerta del lugar, como para calentar las cosas. Y sin decir nada ni advertirle sobre mis intenciones, la tomaba de la mano e intentaba entrar. Si se negaba le decía que si al entrar no teníamos sexo, no había problema, sólo quería estar a solas con ella en un lugar tranquilo. Increíblemente eso a veces las convencía para entrar. Realmente fue la manera más eficaz que encontré de tener sexo en las primeras citas con una mujer, ya que por aquel entonces vivía con mis padres. Sin embargo, eran más los casos en los que el acto era fallido. En esas ocasiones sonreía, le decía que no me podía culpar por intentar llevar a la cama a una mujer tan atractiva y restándole importancia al asunto la invitaba a algún bar a continuar con la salida.

Más tarde, y con mucha práctica, comencé a ser más versátil a la hora de salir. Cabe destacar que disfruto mucho de salir con una mujer interesante y conocerla antes de invitarla a mi casa. Prefiero que ese paseo sea en algún lugar que no conozco y que me interese. Unos años después de mis inicios me fui a vivir solo y empecé a tener por costumbre no besar a las mujeres hasta invitarlas a mi casa; esto resulto efectivo a la hora de que aceptasen ir a mi casa en la primera salida. Por aquel entonces la mayoría de mis citas tenían que ver con visitar un museo, un parque, comprar algo, recorrer alguna calle de tiendas o hacer alguna actividad juntos como montar en bicicleta o correr. Al igual que Martín, siempre evité inversiones grandes de dinero en las salidas y siempre preferí salidas al aire libre y económicas. Estas son costumbres que aún mantengo a día de hoy.

Como palabras finales en cuanto a las citas te diría que busques salidas que disfrutes ante todo. Que tú las disfrutes hará que la mujer las disfrute más, y si la mujer es incapaz de disfrutar de cosas que a ti te gusta hacer, tal vez no sea la candidata ideal para mantener una relación de ningún tipo. Sin embargo, en una primera etapa es muy aconsejable organizar y salir con un plan de acción que te dé seguridad.

Signos de interés y desinterés durante la fase de cita

Los signos de interés de empatía siguen vigentes durante la cita, ya que básicamente la cita consiste en aumentar la empatía en la mayoría de los casos.

A continuación, no obstante, enumeramos algunos signos de interés y desinterés específicos de la cita.

Signos de interés

  1. Que cancele algo para verte.
  2. Que llegue temprano.
  3. Que te llame para arreglar la cita si habéis quedado en eso anteriormente.
  4. Que sea ella la que te invita a salir.
  5. Que cancele algo durante la cita para quedarse más tiempo contigo.
  6. Que acepte ir a tu casa.

Signos de desinterés

  1. Que hable demasiado por teléfono.
  2. Que diga que se tiene que ir temprano.
  3. Que llegue extremadamente tarde.

NOES TEMPORALES E INSISTENCIA

Cuando le propongas la idea de citarse contigo, ella puede negarse de alguna manera. Recuerda que puede estar simplemente haciéndose la difícil, aun estando muy atraída hacia ti. Así que no te des por vencido tan rápidamente.

En el caso que estés hablando por teléfono con ella, presta atención a su tono de voz. Si notas que se muestra dubitativa, es momento entonces de insistir tranquilamente, minutos después o en otra llamada telefónica otro día. En el caso de que esto suceda por SMS o chat, intenta ver qué pasa llamándola y charlando durante un tiempo prolongado antes de invitarla a salir. Muchas mujeres atraídas se niegan a una cita cuando no has logrado el suficiente nivel de empatía.

La manera sencilla de saber si este es el caso es ver si la mujer muestra SDI manteniendo la conversación y respondiéndote. En el caso de recibir varias negaciones a tus invitaciones a salir o incluso plantones de última hora, te recomendamos agregarla al MSN o Facebook en caso de que todavía no la tengas y mantenerla ahí.

Muchas veces una mujer que se ha mostrado interesada y ha respondido a tus llamadas, se niega a una salida o la cancela por estar en otra relación o estar pasando un período particular a nivel emocional. Para muchas mujeres las citas resultan una fuente de gran ansiedad. Mantenla como contacto y vuelve a hablarle e invitarla a salir periódicamente. En ocasiones, si la mujer es receptiva al diálogo, conviene relajarse con las invitaciones y dedicarse a dialogar con ella durante un tiempo prolongado antes de volver a sugerir la salida.

Puede suceder que ella se niegue a la propuesta inicial pero ofrezca otra alternativa. En este caso, está mostrando un gran interés en verte. Si no fuera así, se mostraría cortante y no propondría otra opción. Tranquilo. Vas a insistir unos días después.

NO ROTUNDO Y RETIRADA

Existen dos momentos donde lo puedes recibir. Uno es cuando propones la cita y la mujer se niega de una manera muy cortante y maleducada y el otro es durante la cita. Este último puede llegar a suceder si la mujer se enoja ante algún comentario tuyo. Sus reacciones pueden incluir abandonar la cita, echarte de su casa o irse de la tuya. Salvo contadas excepciones en las que sepas con seguridad que puedes tranquilizarla y que vale la pena, lo mejor es dejarla marchar.

Caso real: Pidamos una pizza

Autor: Martín

Salvo contadas excepciones, a mí no me gusta ir a citas con mujeres. Siempre les ofrezco como primera cita, venir a mi piso. Yo quiero sexo rápido y no pienso ocultárselo a nadie. La idea de invitarla a tu hogar, en la primera cita, tal vez te suene demasiado loca pero debes intentarla. De hecho, el 90 % del tiempo, cuando una mujer se niega a venir y en cambio propone salir a «tomar algo», suelo esquivar esa invitación de alguna manera diciendo algo como: «Me parece bien, nos ponemos de acuerdo durante la semana». Pero no hay ningún tipo de acuerdo y dejo que esa propuesta caiga en el olvido. Una semana después, la invito de nuevo a mi piso y repito el proceso si se niega nuevamente.

La opción más interesante para ella (y en tu casa), es que seas tú el que le cocine algo especialmente para ella. Puedes decirle algo como: «Quiero cocinar algo especialmente para ti. Yo me encargo de todo. Hago la comida, preparo la mesa, lavo los platos… todo. Tu sólo relájate y disfruta. Esa es mi misión». Esta idea es realmente muy buena no sólo porque estás en tu casa y tienes una cama a metros de distancia, sino también porque es una acción que posee la cuota justa de romanticismo. A muchas mujeres les va a fascinar que tú cocines para ellas. Pueden llegar a fantasear conque si en algún momento llega a tener una relación seria contigo, ella no va a tener que cocinar siempre…

Una vez quedé con una chica en mi piso y le dije que iba a cocinar para ella, pero el día del encuentro fue muy agotador y mis ganas de cocinar eran nulas. Cuando entró, le dije: «Tuve un día terrible… ¿Pedimos unas pizzas?». Ella accedió. Tras la pizza hubo sexo con gusto a mozzarella. Conozco muy bien a una persona que empezó a usar esta idea para lograr que las mujeres fueran a su casa. Les ofrece preparar su comida favorita pero cuando la chica llega, le dice la frase que ya os comenté: «Hoy tuve un día terrible… ¿Pedimos unas pizzas?». Con ese truco sucio logra que las mujeres vayan a su casa, y como no sabe cocinar, lo hace intencionadamente. No vas a usarla tú también… ¿O sí?

Lo que no debes olvidar sobre la fase de cita

• Es clave que propongas actividades que genuinamente disfrutes. Es una excelente manera de encontrar mujeres afines a ti.

• Recuerda disfrutar del momento en la cita; olvídate de planificar con vistas al futuro. Cuanto más vivas el momento, mejor lo pasaréis ella y tú.

• Planificar no es contrario a vivir el momento. Es buena idea planear la cita e intentar seguir ese plan, pero si las cosas no salen como esperabas, relájate y vive el momento.

• Como primera opción, invítalas a tu casa. Si se niegan, les propones que os veáis en otro lado. Algunas mujeres aceptarán ir a tu casa en una primera cita, pero otras no.

• Si propones citas por la noche, intenta que no sean los mismos días en que hay discotecas abiertas.