SEMANA 6
Mensajes de amor

Al aproximarse el Día de los Enamorados, prepárese enviando a su cónyuge una seguidilla de mensajes de amor cada vez más explícitos. Dígale lo que desea hacer para él o ella o lo que le agradaría que él o ella le hiciera a usted. Por ejemplo, hágale saber a ella que está dispuesto a ser su esclavo de amor para servirle de cualquier forma que le aporte gozo. Hágale saber a él que puede estar a la expectativa de realizar pronto su actividad favorita, pero no explique con claridad. ¡Que siga adivinando! Por ahora ya saben lo que agrada a sus cónyuges, de modo que si les resulta divertido, hagan bromas con el asunto mientras se aproxima el día.

Ambos pueden enviar sus mensajes en una palabra, una frase, una oración, un párrafo, o una foto. Escriban sus notas en el espejo del baño, en papeles adhesivos o en cartas que él o ella reciban en la oficina. Que ella encuentre el mensaje en su cartera o portafolios, debajo de su almohada, o en un libro que está leyendo. Escriba algo en el calendario de él, en una tarjeta, e incluyala en su almuerzo o métala en la TV Guía. Gran parte del deleite de todo esto es el elemento sorpresa, así que deje que los mensajes sean descubiertos donde no se los espere.

Puede enviar toda una serie de mensajes que empiecen con:

Tú eres...

  Te amo porque...

    Me gustaría...

      Ojalá pudiésemos...

        Me enciendes cuando...

Este no es el momento apropiado para sacar a relucir algún tema que haya causado tensión en el pasado. Más bien, elija algo que sabe que podrán disfrutar ambos. Tal vez suceda que lo que más pueden disfrutar es algo no tan explícito. Si usted es el arriesgado, sea conservador en sus mensajes. Si usted es la persona vacilante o cautelosa, arriesgúese lo más que pueda. Lleve al límite su sugestividad, pero no prometa más de lo que pueda dar.

Tal vez su último mensaje puede estar adherido a un par de calzoncillos de seda para él o a alguna lencería provocativa para ella. Repito, sólo haga esto si cree que puede lograr quitarle algo de la solemnidad a su vida amorosa.