SEMANA 20
Crear la ambientación
Variar la ambientación para el acto sexual agrega fuego y disipa la monótona rutina que a menudo se instala en la relación sexual a largo plazo de las parejas casadas. No es necesario que las variaciones sean costosas ni que gasten mucha energía. Incluso una pequeña modificación puede crear una perspectiva completamente nueva.
Dediquen un tiempo juntos a la generación de ideas para crear una atmósfera provocativa para sus experiencias sexuales. Elaboren maneras de apelar a los cinco sentidos: olfato, gusto, vista, sonido y tacto.
Olfato: Asegúrese de eliminar olores negativos. Limpie la habitación de modo que no huela a polvo ni a humedad. Tal vez desee abrir ventanas y permitir la entrada de aire fresco o usar una fragancia en aerosol, una vela, o un perfume. Para algunos, quemar incienso puede ser demasiado, pero otros verdaderamente disfrutan de eso.
El gusto tal vez no se aplique tanto a la atmósfera como a su interacción personal. Prepárense de modo que ambos tengan buen sabor el uno para el otro. El gusto también puede conducirlos a una conexión sexual. Por ejemplo, salir a una cena especial puede preparar el ambiente que los lleve a desear una experiencia sexual con el otro. La preparación de una merienda especial y gozar de ella como parte de su tiempo sexual es otra forma de apelar a su sentido del gusto.
El atractivo visual de su atmósfera sexual es de vital importancia. Existe aquí tanto lugar para la creatividad. La iluminación puede variar desde mantener la habitación en oscuridad total, de manera que se hagan el amor más por el tacto que por la vista, a disponer de reflectores que iluminen ciertas partes del cuarto o de sus cuerpos. Entre estos extremos se encontraría una vela o muchas velas, las luces normales de la habitación, un velador al costado de la cama, o una luz alejada de la cama.
Se pueden efectuar cambios visuales dentro del dormitorio o se puede seleccionar un ambiente totalmente nuevo. Por ejemplo, podría cambiar su ubicación en la cama o utilizar el cuarto de huéspedes.
El sonido puede afectar el ánimo y el ritmo del sexo. Tal vez desee pasar música que le agrade o tocar casetes o discos compactos de oleaje oceánico, brisas susurrantes u otros románticos sonidos de fondo.
El tacto es el sentido clave que debe ser explotado para lograr una reacción sexual. El contacto piel a piel de sus cuerpos es el toque más esencial, y puede ser mejorado mediante el uso de lociones, aceites y aseo, pero la sensación que produce la superficie donde se hará el amor también es importante. A algunas parejas les agradan las sábanas firmes, recién planchadas, mientras que otros responden a las sábanas de franela. Existen aun otros que prefieren las sábanas sedosas de satén. Hablen acerca de lo que les agrada. También varíen la sensación probando otras alternativas. La sensación de la superficie puede ser modificada completamente haciendo el amor en otro sitio que no sea la cama. Pueden escoger el piso o un acolchado sobre el piso o almohadones o un sillón de cuero o un sofá o el césped o la arena. Las posibilidades son muchas.
Pueden crear cambios para todos los sentidos al elegir una ubicación totalmente diferente. Mientras tengan asegurada la intimidad y protejan a otros de ser expuestos a su actividad sexual, pueden escoger casi cualquier sitio que les resulte positivo. Estos podrían incluir el patio de atrás de su casa, una casita en un árbol, una camioneta, una casa rodante, un automóvil, o una playa escondida.
Luego de haber definido sus criterios, analicen a fondo las posibilidades que hemos sugerido y produzcan algunas ideas propias. Luego planifiquen un sistema para determinar quién se responsabilizará de variar la ambientación para sus encuentros amorosos. Tal vez decidan que quieren cambiar una dimensión cada mes y que alternarán el que se hará responsable de dicho cambio cada mes. O quizás quieran cambiar más o menos frecuentemente, y puede ser que decidan que uno de los dos disfrute de ser creativo en la apelación a los sentidos más que el otro, de modo que la variación de la atmósfera será responsabilidad del cónyuge más creativo. Sea cual fuere su plan, proyéctenlo para que resulte efectivo para ambos.