SEMANA 38
Juego amoroso de todo el día

¿Cuántas veces lo hemos escuchado? ¡El sexo comienza en la cocina! Eso no significa necesariamente que deben empezar a darse besos o a desvestirse en la cocina. Significa lo siguiente: Si quiere que haya sexo más tarde en el dormitorio, mejor que empiece a prestarle atención a ella en la cocina. A menudo, las mujeres nos dicen: «Él llega a casa, cena, y luego se deja caer frente a la TV hasta las 11, mientras yo doy de comer y baño a los niños, los acuesto, doblo la ropa limpia y preparo los almuerzos para el día siguiente. Luego, de repente, nota que estoy viva y quiere sexo». Eso hace que la mujer quede lastimada, furiosa y desinteresada.

El juego amoroso de todo el día es muy distinto para los hombres de lo que es para la mujer. Cada sexo necesita su propio plan de diseño y ejecución exclusivos.

Para el hombre: ¿Recuerda la respuesta a la pregunta del rey Arturo en Camelot, cuando pregunta cómo tratar a una mujer? La respuesta es «¡amarla y amarla, sólo amarla!» La mayoría de las mujeres (a diferencia de los hombres) no responde \favorablemente a «Oye, ¿quieres tener relaciones sexuales?» Sí responden cuando se sienten amadas, valoradas, ayudadas, comprendidas, alentadas, elogiadas o adoradas. Pero esto no se trata de un intercambio de uno por uno: «Te adoraré si podemos tener un encuentro sexual». Esto es amor sin exigencias ni ataduras.

El día tal vez transcurra de la siguiente manera: Es sábado por la mañana. En lugar de sentarse a leer el diario, le ayuda controlando a los niños mientras ella prepara el desayuno. Luego le ayuda con la limpieza y se ofrece para ir hasta el almacén y comprar provisiones (lo cual ella pensaba hacer) mientras ella se prepara para acompañar a los niños a su evento deportivo. Luego del almuerzo cuida usted de los niños mientras ella duerme una siesta, aun cuando eso signifique que usted se pierda parte de un partido de fútbol. Luego de la cena apague la TV y converse (si ella no se desmaya). Investigue cómo está ella, lo que siente con respecto a la relación de ustedes, cómo se siente con respecto a los niños, o cientos de temas aparte de estos. Luego hágale saber cómo se siente usted con respecto a ella. Ofrezca darle placer del modo que aprendió en la Semana 37. Por supuesto, a usted le agradaría finalizar este día con una experiencia sexual, jpero no lo espere! Recuerde: Si está llevando el control del puntaje, ¡se ha quedado muy relegado! Es posible que necesite de una semana o un mes de juego amoroso antes de que ella esté dispuesta. El enfoque está puesto en el amor y el servicio; la respuesta sexual será un maravilloso producto secundario. Si una mujer nunca llega a demostrar interés aun después de semanas de expresión amorosa sin exigencias e incondicional, es posible que tenga alguna barrera sexual que requiera de ayuda profesional.

Hombres, recuerden que hay mil variaciones del día aquí descrito. Es necesario que adapten este plan a su situación y etapa de la vida particulares. Su plan de juego amoroso de todo el día necesita ser adaptado a la mujer en particular con la que esté casado.

Para la mujer: Sexualmente hablando, los hombres son menos complicados. No se desenvuelven muy bien con el abordaje indirecto. Necesitan una insinuación o un toque claramente sexual. He aquí una forma en que podría suceder eso:

Comience con un beso a la mañana que prometa más al ir avanzando el día. Controle la duración y la intensidad del beso o del toque. Quizás podría invitar a otra pareja para disfrutar de una tranquila cena esa noche. Mientras se prepara esa noche para la cena, asómese desnuda a la puerta del baño. Mantenga la mente de él centrada en usted. Justo antes de la llegada de los huéspedes hágale saber que aunque por fuera se la ve adecuadamente vestida, ¡no lleva puesta ropa interior! Luego, al servir a sus huéspedes, arrímese a él rozándolo de un modo que sólo él lo notará. ¡Posiblemente le sorprenda ver la rapidez con la que le pone fin al evento social!

O... ambos se disponen a partir para hacer un viaje de siete horas. Al alejarse de la casa hable con él de una fantasía de lo que le agradaría que le suceda en el trayecto o al llegar a su destino. Programe el cronómetro de su reloj y disfrute de un nuevo giro a su fantasía cada hora cuando el mismo suene. Su acercamiento se vuelve aun más evidente cuando se detienen para comer el picnic que ha preparado para el almuerzo. Cuando finalmente lleguen a destino es posible que ninguno de los dos pueda esperar hasta después de la cena para disfrutar del tiempo sexual juntos.

Recuerde: Pueden estar estimulándose mutuamente todo el día. ¡De eso trata el juego amoroso de todo el día en ambos sentidos!