040 Orientar el campo de visión en el ocular de un telescopio

LAS PRIMERAS VECES QUE UNO MIRA por un telescopio no se plantea grandes cosas. La emoción, el misterio, la belleza del cosmos, todo se mezcla. Disfrutamos y no nos planteamos nada más. Pero si la afición avanza (y si está leyendo esto es que ha avanzado), se nos plantean algunas cuestiones. Una de ellas es la orientación en el campo del ocular.

La orientación del campo ocular es primordial para localizar objetos en el cielo.

  1. Por ejemplo, queremos localizar un objeto de cielo profundo; dicho objeto está cerca de una estrella brillante, y lo primero que hacemos es centrar la estrella en el campo del ocular, luego la guía dice que el objeto en cuestión está a 3° al Este de la estrella. Muy bien, 3°, pero ¿dónde está el Este? Encontrar el Este a simple vista es fácil. Nos orientamos bien, Norte, Sur, Este, Oeste … Pero una cosa es localizar un punto cardinal a simple vista y otra mirando por el ocular de un telescopio.
  2. Lo primero que hay que saber es que la imagen que se ve en un telescopio no es la misma que la que vemos a simple vista. Las ópticas giran las imágenes en diversos ejes (horizontal y vertical) y al final nos haremos un lío y nos perderemos. Cada telescopio enseña el cielo de una manera diferente y dependiendo hacia donde apunte (Norte o Sur) esto puede cambiar.
  3. Empecemos por lo fácil y evidente, los prismáticos. Primero de todo, y esto servirá para todas las configuraciones ópticas, tenemos que dividir el cielo en dos mitades. Trazaremos una línea imaginaria que vaya de Este a Oeste, de esta manera tendremos el cielo Norte y el cielo Sur. Idealmente nos encontramos justo en el centro de la línea imaginaria. Pues bien, si apuntamos con los prismáticos al cielo Sur la orientación del campo de visión es: Norte, arriba; Sur, abajo; Este, a la izquierda; Oeste, a la derecha. Evidente, ¿No? Y si miramos el cielo Norte, desde nuestro punto ideal hasta el polo Norte, tendremos: Norte, arriba; Sur, abajo; Este, derecha; Oeste, izquierda.
  4. Seguiremos con el refractor. La partición del cielo en dos mitades, Norte y Sur, sigue en vigor. Con el refractor podemos observar el cielo a través del ocular de manera directa, o utilizando un prisma cenital. En observación directa y mirando al Sur, tenemos el Norte abajo y el Este a la derecha. En observación directa y mirando al Norte, tenemos el Norte abajo y el Oeste a la derecha. Cuando ponemos el prisma cenital la cosa cambia. Con prisma cenital y mirando al Sur, tenemos el Norte arriba y el Este a la derecha. Con Prisma cenital y mirando al Norte, tenemos el Norte arriba y el Oeste a la derecha.
  5. Y ahora el Newton. Los Newton no utilizan nunca el prisma. No lo necesitan. Por lo que la observación siempre se hace con el ocular directamente insertado en el portaocular. La partición del cielo en dos mitades, Norte y Sur, continua vigente. En observación directa y mirando al Sur, tenemos el Norte abajo y el Este a la derecha. En observación directa y mirando al Norte, tenemos el Norte abajo y el Oeste a la derecha.
  6. Los catadióptricos, sean del tipo que sean: Schmitd-Cassegrain, Maksutov … En visión directa o con prisma … En todos los casos se ven igual que el refractor. Un catadióptrico con ocular directo se ve igual que un refractor con ocular directo; un catadióptrico con prisma se ve igual que un refractor con prisma. La partición del cielo en dos mitades, sigue en vigor.