064 Observación solar Filtros H alfa y luz visible

AUNQUE OS PAREZCA QUE REPETIMOS DEMASIADO, lo volvemos a recordar: la observación del Sol sin la protección adecuada PUEDE CAUSAR CEGUERA. O sea que ahora que observaremos el Sol con la ayuda del telescopio, seguiremos tomando las mismas precauciones que hemos utilizado a simple vista y con prismáticos. Para observar el Sol con seguridad podemos emplear diversos métodos:

  1. Método de proyección: es el mismo método que empleamos con el prismático. Se trata de proyectar el sol en una pantalla. La proyección puede ser a foco directo o con ocular. Es el método más económico, pero es laborioso de utilizar. La proyección puede ser con el ocular directo o con prisma cenital; es recomendable que proyectemos una sombra sobre la proyección para aumentar el contraste.
  2. Prisma (o Helioscopio) de Herschel: es un prisma que desvía el 80% de la luz y calor solar. Se recomienda un filtro neutro después del prisma. Actualmente no se utiliza demasiado.
  3. Filtro frontal total: colocar un filtro en la boca del telescopio. Es el método más seguro, también el más caro. Hay varios tipos de filtros: el tipo Mylar y el óptico. Antes de utilizar los filtros hay que repasarlos para certificar que no tienen ralladuras ni defectos por los que pase la radiación solar.
  4. ¿Qué observaremos? Básicamente las manchas solares. Con el recuento diario de las manchas solares se realiza una estadística, el número de Wolf, que sirve para medir la actividad solar. La estadística se hace de manera visual, se cuenta y se calcula, pero hay observadores que dibujan las manchas y controlan el desplazamiento de las mismas por la superficie solar. También se pueden aplicar técnicas de webcam para filmar en vídeo o fotografiar la superficie solar. Las exposiciones tienen que ser cortísimas y se pueden resaltar con los programas adecuados. Los especialistas en el Sol utilizan cámaras monocromáticas (B/N) y luego la colorean con una paleta de colores.

    Manchas solares en luz visible. Foto: José Muñoz Reales.

    Joanma Bullón, especialista en observación solar, en su observatorio de Aras de los Olmos, Valencia, observando el Sol con ocular electrónico conectado a una TV.

  5. Las manchas solares siguen una evolución. Nacen como poros, que solo pueden ser observados con telescopios de gran abertura, después evolucionan a mancha con una estructura característica de umbra (parte más oscura) y penumbra (parte más clara). La mancha evoluciona y crece hasta convertirse en un grupo complejo y luego empiezan la decadencia hasta la desaparición. Existe una clasificación específica, como la clasificación de Zurich, para determinar los tipos de mancha y el estado de evolución.

    Evolución de manchas solares dias 2, 3, y 4 de agosto de 2011. Foto: Joanma Bullón.

  6. Eso en cuanto a la observación en visual y con luz visible, pero los observadores modernos disponen de una herramienta que complementa el estudio del Sol: los filtros H alfa. Con ellos se observa el Sol en la banda del hidrógeno. Veremos un Sol completamente diferente, y lo que es más, podremos observar protuberancias en el disco solar. ¡Toda una experiencia!

    22 de septiembre de 2011. Sol en h alfa. Foto: José Muñoz Reales.

  7. Son filtros muy caros, pero afortunadamente se han puesto al servicio de los amateurs a un precio muy competitivo en forma de pequeños telescopios, muy compactos y bastante económicos. Con ellos podremos realizar observación visual o realizar fotografías con cámara digital o webcam como las que ilustran este capítulo. Recordad, exposiciones cortísimas.

    17 de septiembre de 2011. Detalles de protuberancias solares. Foto: José Muñoz Reales.

    Izquierda: Disco solar en luz visible Derecha arriba: Mancha solar en visible. Derecha abajo: Mancha en H alfa. Foto: Joanma Bullón.