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Tercera Residencia
1935–1945
De todo lo que he hecho, de todo lo que he perdido,
de todo lo que he ganado sobresaltadamente,
en hierro amargo, en hojas, puedo ofrecer un poco.
Un sabor asustado, un río que las plumas
de las quemantes águilas van cubriendo, un sulfúrico
retroceso de pétalos.
No me perdona ya la sal entera
ni el pan continuo, ni la pequeña iglesia devorada
por la lluvia marina, ni el carbón mordido
por la espuma secreta.
He buscado y hallado, pesadamente,
bajo la tierra, entre los cuerpos temibles,
como un diente de pálida madera
llegando y yendo bajo el ácido duro,
junto a los materiales
de la agonía, entre luna y cuchillos,
muriendo de nocturno.
Ahora, en medio
de la velocidad desestimada, al lado
de los muros sin hilos,
en el fondo cortado por los términos,
aquí estoy con aquello que pierde estrellas,
vegetalmente, solo.
Out of everything I’ve done, everything I’ve lost,
everything I have gotten unexpectedly,
I can give you a little in leaves, in sour iron.
A terrified flavor, a river that the feathers
of the burning eagles are covering, a sulphurous
retreat of petals.
The undivided salt doesn’t forgive me now,
nor the constant bread, nor the tiny church eaten
by the ocean rain, nor the coal bitten
by the secret foam.
I have looked and found, heavily,
under the earth, among the frightening bodies,
like a tooth made of whitish wood,
coming and going under the stubborn acid,
close to the substances
of agony, between moon and knives,
dying at night.
Now in the center
of this speed no one takes seriously, alongside
walls that have no threads,
deep inside cut off at the ends,
here I am with the thing that loses stars,
like a vegetable, alone.
Translated by Robert Bly