Alta en el cielo, karma

Encuentro a Yedra leyendo una cartita que iba dirigida a mí. No sé cuánto llevaba ahí, colgada como una pinza.

Aurora:

Tuviste tu oportunidad y se te llenó de sangre. Este es mi momento. No entendiste al Coronel, tu hijo no recibió ni una gota de ternura. La Yedra áspera es la única que te estima, sólo para contrariarme. Tu pequeño mundo te detesta.

Dejame limpio el lugar. Las nuevas generaciones necesitamos espacio. Ni los muertos se quieren ir. Ubíquense al costado de la gloria, donde no nos quiten el sol. Horribles sombras como cactus sin misterio se proyectan sobre nuestros cuerpos recién nacidos. Suban con sus almas destempladas y dejen al dios humano que inventaron hacer el resto. Irán a otro paisaje más acorde con su triste locura. Una planicie vacía con sonidos de trompeta, un cielo clavado de espinas. El cuadro que merecen.

Andá nomás con tus héroes nefastos a tomar el camino del olvido. La realidad me besa de frente y yo la dejo.

Basta de lamentos y ese latido inoportuno de muerta que no sabe su destino. Acá sopla un viento dulce, el amor me hizo presente, para eso estoy a continuación. Lo que no supiste conseguir es mío. Ninfa eléctrica, pero sensible, asumo tu lugar con alegría. Tu carga es mi placer.

Basta de espiar, querida. Siento el vacío de tus cavidades, cráneo lavado como una marchita deslucida. Se acabó el espectáculo. Morir es ahora.

Atentamente, Lana Carne

Yedra está decidida a terminar con todo. Lana es contagiosa. Sin ella, el mundo será inocente de nuevo. Estuvimos un rato largo juntas. La vela de su alma es mínima. No hace falta decir mucho. Su cabeza está a la vista. Hay que saber conciliar. Y en ese punto, me hace feliz.

Cargar piedras de rencor es tarea de los vivos. Y cuanto más vital, más encarnizada.

Decimos que sí sin decir nada. Nos hacemos compañía, como viejas enemigas en el lecho de muerte. Entrelazamos las manos y hacemos una promesa. No podemos seguir esperando que la fatalidad llegue sola. A la tragedia hay que ayudarla.

Yedra se compromete a actuar. Yo espero en la sombra.