Con esta historia del tercero de los trillizos Marston, os he entregado otro pedacito de mi corazón, porque estos chicos se lo han ganado a pulso. Espero que hayáis disfrutado de James, Edward y Robert tanto como he disfrutado yo al escribir sus historias. Ya solo nos queda la del pequeño Jimmy, que aunque no es un Marston de sangre, sí lo es de corazón, y espero que su historia también os conquiste.
Esta familia me ha dado muchas alegrías y me ha permitido conocer, a través de las redes, a personas maravillosas y grandes lectoras. A todas vosotras quiero dirigir mi agradecimiento por vuestra confianza y apoyo, por haberme permitido entrar en vuestras vidas con cada uno de mis personajes, a los que habéis acogido con tanto cariño, y por todos los comentarios que me dejáis, ya sea en las plataformas de lectura como en las redes; me encanta conversar con vosotras. A todas, de corazón, ¡gracias!
Ninguna de estas historias habría visto la luz sin el equipo de la editorial Selecta, a quienes les agradezco de corazón por estar siempre ahí, trabajando para que el resultado final sea lo más perfecto posible. En especial, un enorme gracias a Lola, mi editora, que me acogió desde el principio con una gran fe en mis historias y que ha sido y es un gran apoyo.
Un gracias muy especial quiero dar también a Noemí y a Marina, que me han apoyado con sus valiosos consejos, me han animado siempre y me han ofrecido su amistad.
Y para terminar, mi agradecimiento a todas esas compañeras de camino que luchan como yo por crear historias maravillosas y por hacer que sus personajes lleguen al corazón de todos los lectores. Mucho ánimo a todas. Sigamos creando nuevas historias que hagan soñar.