... las cosas no volverán a ser como antes.
Esto le decía un Homo habilis a otro, paseando por un hermoso paraje en una zona de África, mientras pescaban, un día cualquiera, hace aproximadamente dos millones y medio de años.
¿El motivo? Acababan de descubrir la piedra.
En ese momento de la historia, Paleolítico inferior, todo el mundo hablaba de ello. La vida cambió. La vida les cambió.
La madera, los huesos, y otros materiales, que siguieron siendo utilizados, fueron sustituidos por la piedra, y en particular el cuarzo, la obsidiana, y el sílex (el primer valle del silicio no estuvo en San Francisco, sino en África).
La piedra fue utilizada para fabricar los nuevos instrumentos de la época, especialmente las armas de corte y percusión.
Sin ellas, eras un don nadie. Estabas fuera de mercado.
No estabas en la línea de las nuevas tendencias.
No eras singular. Tu marca personal no hubiese valido nada. Devaluada. No te habrías transformado en la dirección esperada.
No eras un mono VUCA, ni KNOWMAD. Ni...
¿Se le llamaría a ese momento La Transformación Piedestre?
El primer mono-humano, según nos dicen los expertos, apareció hace aproximadamente algo más de cuatro millones de años, resultado de la llamada hominización, que transformó progresivamente un linaje de primates en aquellos primeros humanos.
Por cierto, humanos que les tocó convivir con los grandes simios antropomórficos, que formaban, junto con aquellos primeros humanos, el grupo social de los homínidos.
Los grandes simios, hasta entonces los reyes del mambo socialmente hablando, convivieron durante más de dos millones de años con el nuevo mono de su época, que ya estaba empezando a triunfar...
Todos los otros simios querían ser como el nuevo mono.
Cuando llegó «la piedra», con el nuevo mono (Homo habilis), en el Paleolítico Inferior, todo se transformó.
Entre otras cosas, biológicamente hablando, lo que mayor transformación sufrió fue el propio cerebro de ese nuevo mono.
¿Os recuerda a algo esta parte de la historia de la humanidad?
A mí, sí. Quizá sea muy parecido a lo que ahora esté pasando.
En la nueva era, de la tecnología, del silicio, una vez más, cohabitan dos tipos de monos: los grandes simios que no pretenden asumir ningún tipo de cambio, asentados en sus resistencias y su aversión a lo nuevo, junto a otros monos, aparentemente iguales, pero que, sin embargo, están muy abiertos al cambio, a lo nuevo, siendo ellos los que, con su quehacer cotidiano, están dando lugar a una nueva especie.
El nuevo mono también está transformando su cerebro, como ya pasara con el Homo habilis, que terminará teniendo, quizá dentro de varios cientos de años, tiempo que en biología no es nada, un tamaño diferente y unos locus de funcionamiento también diferentes.
De este nuevo mono, de la transformación que el presente está llevando a cabo, y de las expectativas de futuro al que vamos abocados, quiere versar este documento.
Este manual que tienes en tus manos, querido lector, no es un libro de historia. Ni lo pretende. Así que no pondré el acento para hablar de transformación referida a otras épocas de la humanidad, que fueron mucho más Homo sapiens que la actual, y que son ya muy conocidas por todos, tales como la Edad del Bronce o la era Gutenberg o el momento de explosión de la economía global, llamado globalización... y un largo etcétera, en las que el cambio a través de la llegada de nuevas «herramientas», o a través de transformar y evolucionar las conocidas o incluso del descubrimiento de nuevas formas de uso, hizo que se produjera una gran TRANSFORMACIÓN social.
Lo que está sucediendo ahora no es totalmente nuevo. Ya se repite... Sólo es nuevo para nosotros.
La historia está en continua transformación. Desde siempre.
Todas las épocas en las que se vivieron grandes transformaciones tuvieron sus particularidades.
Su SINGULARIDAD.
Vivieron una NUEVA NORMALIDAD.
¿Cuál es la nuestra? ¿Cuál es nuestra singularidad?
¿Cuál es la nueva normalidad que impera en esta época de transformación, llamada digital?
De eso quiere hablar este libro, querido amig@.
Quiero con este documento compartir contigo ideas, reflexiones, amenazas, elementos a cuidar, avances a tener en cuenta, modelos de cómo debe ser el nuevo liderazgo en esta nueva sociedad que ya está aquí, que ha venido para quedarse entre nosotros, y hablarte sobre los procesos que deberíamos adoptar cuanto antes para poder sobrevivir...
En fin, compartir, sin el ánimo de tener la razón, desde mi humilde conocimiento, y así poder participar en el debate actual más crucial, con mis ideas sobre este nuevo mono, que he llamado ciudadano beta... y que ya convive con nosotros.
¿Lo conoces?
Una historia cuenta que varios exploradores, con sus porteadores, avanzaban por una selva; tras varios días de caminata sin apariencia de destino claro, el guía envió a uno de sus ayudantes, experto trepador, a subir a una palmera para ver el más allá.
Lo que el trepador descubrió es que se habían equivocado de selva.
Al comunicarlo a los jefes exploradores éstos dijeron: «Calla, calla... ¿no ves que estamos avanzando?».
Y siguieron en ese camino. En esa selva.
¿Te suena?
Muchas veces no estamos en la selva adecuada, en el camino que toca, pero como también es selva, como sentimos, aun equivocadamente, que avanzamos, pues adelante... Sigamos.
Aunque no sea el camino adecuado.
Algo parecido pasa en toda transformación. A lo largo de toda la historia. Digital o no.
La visión no es lo importante. La visión adecuada, sí.
Saber que estamos en «la selva» en la que hay que estar, eso sí importa.
Que se trata del camino correcto. Eso sí marca el camino del éxito.
Que no ha habido confusiones, o si las ha habido, se están corrigiendo.
El camino no es sólo la meta, también es el rumbo.
Algo han tenido... y tienen todo tipo de transformaciones sociales que han sucedido a lo largo de la historia de la humanidad:
Siempre han necesitado de un cambio de mindset de las personas.
Un cambio en la mente.
Porque una verdadera transformación siempre es cultural o no es transformación.
Sólo se producirá una verdadera transformación si se consigue cambiar la relación de la persona con lo nuevo.
Entenderlo no será suficiente.
Un buen propósito por el que llevar el cambio necesario a cabo no será suficiente.
Mira esta ecuación matemática que claramente lo expresa:
T = C + P
La transformación necesitará de un cambio (C), aplicado de verdad, implementando, al que sumar un propósito (P), un para qué bien comprendido y aceptado.
Pero...
C = N – r
Es decir, el cambio se alimenta de la comprensión verdadera de la necesidad de cambiar (N), a la que se restarán sin ninguna duda las resistencias (r) que los individuos mantengan.
Por lo que, aun sabiendo pocas matemáticas, y sólo con hacer una pequeña sustitución:
T = (N-r) + P
Ojo: el secreto está en saber identificar, comprender, atender y tratar las «r». Las barreras resistentes a lo nuevo.
A lo desconocido. A lo que está por llegar.
Ya sabemos por qué cuando alguien no quiere cambiar, se opone, se resiste al cambio, le decimos que está erre que erre...
Toda transformación, me repito, trata y necesita de un cambio cultural.
La transformación sólo se produce si conseguimos un cambio en la mente del público que necesitamos que se transforme.
Si no, sólo será un espejismo...
Una selva equivocada.
Querido lector, al enfrentarte a la lectura de este manual, siéntete dueño de añadir o quitar todo aquello que te falte o te sobre y que tu conocimiento y experiencia quieran aportar.
Es un libro «en abierto», con algunas páginas en blanco (metáfora del autor) que han sido pensadas para ser escritas por ti, para tus anotaciones, para tus reflexiones. No dejes de leerlo con lápiz y cuaderno en mano.
Mi intención con este manual que ahora tienes en tu mano no ha sido otra que poner mi negro sobre blanco, compartir mis ideas, sobre esta nueva era que ya ha sido llamada revolución 4.0.
Compartir una tesis que, en mi modesta opinión, es fundamental en este momento de la sociedad y, mucho más en concreto, en el mundo al que yo me dedico profesionalmente, el del liderazgo, la consultoría empresarial y el management en general.
La reflexión, o tesis, que intenta defender este libro, sin ánimo de tener toda la razón, es sencilla, obvia.
Es ésta: ahora, en el momento más crucial de la Transformación 4.0, en la era de lo digital, de la llegada de inteligencia artificial como nunca antes, en el momento en el que irrumpe con mucha fuerza el IoT (internet de las cosas), en la época donde talento y tecnología se han encontrado como nunca antes, donde predomina la velocidad, de forma atractiva y aceleradamente incrementada, lo crucial es
LA PERSONA.
Poner foco en ello, y no olvidarlo en todos los procesos de transformación, será parte del éxito en el camino del cambio.
Los valores, conocimientos y actitudes necesarias de las personas cogen una mayor relevancia. Los modelos de liderazgo deben ser revisados. También todo lo relacionado con la educación, la sociedad, la política, etc. Es el momento de plantearnos seriamente que toda transformación, sin un cambio cultural, sin un cambio que pase por la forma de hacer de las personas, no transformará nada.
Es el momento clave para no confundir digitalización con transformación digital. Para no pensar que, por el hecho de digitalizarnos, ya nos transformamos.
Una cosa no siempre está directamente ligada con la otra.
Pueden coexistir juntas, o no.
Querido lector, se trata de poner el foco en LA PERSONA como la base de cualquier transformación. Así de sencillo. Así de complejo.
Con este manual te quiero dar ideas de cómo hacerlo.
Y quiero compartir, de acuerdo con mi conocimiento y experiencias, algunas «herramientas» que te permitan llevar a cabo cualquier transformación de la forma más eficiente... y fácil.
Te hablaré del pensamiento DISRUPTIVO, necesario para afrontar con cierto éxito el periodo actual de transformación.
Por favor (petición del autor), no consideres este libro como un libro de recetas, porque no lo es; ni lo pretende.
Atrévete a crear las tuyas propias. Serán las más válidas para ti.
¡A por ello!
Escribo sin ánimo de convencerte.
Sólo con la idea de compartir mis aprendizajes.
Mis propias dudas.
Algo interesante me debe estar pasando, porque cuantos más años sumo, más dudo.
Escribo este libro sin ningún interés de aleccionar a nadie.
Lo escribo desde mi mente inquieta. Sin más...
No quiero que en ningún momento el texto, en el que te vas a adentrar, te pueda confundir. Por eso quiero aclararte que éste tampoco es un libro sobre tecnología. Ni sobre sus avances; aunque en ciertos momentos los nombre.
No es un libro de futuro, sino de presente. Así lo entiendo yo.
Por lo que tampoco quiero confundirte con que puedas pensar, en algún momento del viaje durante sus páginas, que estoy siendo un cronista del futuro que nos espera. Dios me libre de ello. No está entre mis intenciones. Ni siquiera pretendo con este documento hacerte pensar cuán grande y maravilloso será el futuro digital que nos acecha.
Te pido algo más, compañero de viaje: ahora que estás iniciando la lectura de este documento... date a ti mismo el permiso de APLAZAR TU JUICIO hasta que completes toda su lectura. A lo largo del libro verás por qué te hago esta petición en diferentes ocasiones. Comprenderás la importancia que, en términos de pensamiento disruptivo, tiene la capacidad de aplazar los juicios. No de no tenerlos (¡ojo!), tan sólo de poder aplazarlos en el tiempo. Y así, además de llegar al final libre de juicio por tu parte, a mí me permitirás expresar y compartir, en un último capítulo, a modo de opinión personal, cuál es mi visión de este nuevo entorno que hemos llamado BETA. Sin ánimo de tener razón... con tan sólo la idea de aprender juntos.
Desde la máxima humildad, y desde mi modesto predicamento, quiero contarte mi experiencia en transformación de las organizaciones, mi conocimiento sobre el tema, las observaciones y aprendizajes que en los últimos tiempos, he podido hacer sobre el nuevo entorno digital, pero también muy humano, cultural, en el mundo de las organizaciones públicas y privadas, en los negocios donde a través de mi empresa Think&Action, y otras, he podido participar.
Y de cómo tendrá que enfrentarse a todo ello el nuevo líder junto a todos los CIUDADANOS de su entorno profesional y personal, que ya no pueden escapar de ser y vivir en un entorno BETA, bajo los modelos de pensamiento disruptivo y el paraguas de la digitalización.
El nuevo mono, al que me referiré en el texto con mucha frecuencia, ya habita entre nosotros.
Tú puedes ser ya uno de ell@s.
Hablo de ti...