Ya está, es la hora de la verdad y necesitas decidir lo que quieres. Básicamente, necesitas decidir entre si en realidad quieres volver con tu ex o no. Y probablemente si has llegado a este punto, es porque tus intenciones giran en torno a la primera idea.
¿Pero eso es lo que realmente quieres? ¿Realmente quieres volver con la persona a la que dejaste, o que te dejó? ¿No estarías mejor manteniéndote alejado de esa persona, en vez de estar tratando de volver con ella?
Si estás dudando, porque lo que tuviste fue una buena relación, al menos para tu percepción actual de las cosas (porque las personas siempre recuerdan las cosas como maravillosas cuando ya no están involucradas en ellas), te haría bien pensar al menos un momento antes de ponerte manos a la obra para intentar rescatar lo posible de tu relación rota.
Pero déjame decirte algo; si quieres volver con tu ex solamente porque se te está haciendo difícil mantener una relación estable con otra persona, o incluso encontrar a alguien con quien tenerla, entonces necesitas tomarte un tiempo para examinar y pensar acerca de las razones por las cuales ocurrió el rompimiento en primer lugar.
Si ha pasado algo de tiempo desde aquel rompimiento, podrías darte cuenta de que estás usando lentes color de rosa concerniendo a tu relación y el rompimiento propiamente dicho.
Piensa si en realidad tu relación era tan buena como la recuerdas, y el motivo de la ruptura. ¿Fueron convincentes las razones, o ahora mirando hacia atrás solamente ves la parte buena del asunto? ¿Qué hay de esas épocas en las cuales no podías soportar algo de la relación, pero sin embargo seguiste aguantando tranquilamente?
¿Son superables esas razones para separarse? Y yendo más al grano, ¿tienes la voluntad para superarlos si se reestableciera la relación?
Lo he dicho varias veces antes, pero aquí va; tómate tu tiempo para determinar si realmente quieres volver con tu ex, y por qué.
Si todo es por una reacción ante el rompimiento, entonces deberías pensar acerca del motivo por el que quieres volver. Si es por alguna de las razones que mencioné anteriormente, deberías pensar larga y arduamente en ello.
Junto con la razón de por qué quieres volver con tu ex, también necesitas pensar acerca de si en realidad lo/la necesitas. Claro, puedes pensar que realmente quieres volver con esa persona, ¿pero es eso lo que verdaderamente quieres? ¿Estás preparado para enfrentar a lo que sea que causó el rompimiento en un principio?
¿Estás dispuesto a volver con esa persona, a ser parte de una relación nuevamente? ¿Estás dispuesto a tolerar todos los caprichos y manías de esa persona reiteradamente? ¿Estás dispuesto a tener que atenuar tus propios caprichos y manías para que ambos sean felices?
Lo sé, lo sé, demasiadas preguntas, y para algo tan simple como el hecho de volver con tu ex (o al menos intentarlo). Pero éstas son preguntas muy importantes y como dije anteriormente, es la hora de la verdad. Necesitas recomponerte ahora, antes de tomar cualquier decisión acerca de que harás finalmente.
En última instancia, necesitas decidir si quieres una vida y una relación con tu ex nuevamente, o si quieres crear un camino distinto para ti mismo, uno que no involucre a tu ex pareja.
La venganza podrá ser, “…un plato que se sirve frío”, para citar algún dicho, pero no es necesariamente como la hacen parecer.
Hay muchas cosas que parecerían valer la pena hacer en caliente, cuando el dolor e incluso la ira del rompimiento está sobre ti, pero lo mejor que puedes hacer en una situación como esa es hacerte a un costado y esperar a que te calmes.
Podrás estar sólo, o con amigos comprensivos, pero no tomes decisiones apresuradas o inicies planes a medio armar para volver con tu pareja. La mayoría de las veces estos planes serán contraproducentes o irán mal de alguna manera, causándote angustia y dolor.
Esto es lo último que necesitas para ti ahora, así que si quieres volver con tu ex, idealmente deberías asegurarte de que no es meramente por el placer de volver a tener a tu pareja para abandonarla cuando te convenga.
La venganza es un motivo horrible para querer volver con tu ex, y causará dolor para todos los involucrados, no sólo a tu ex, sino que para ti también, y para cualquier otra persona que se pueda ver afectada por tus planes sin tener culpa alguna.
Piensa y considera mucho antes de poner un plan de venganza en acción, porque puedes estar seguro de que el resultado no será agradable.
Una vez que algo se ha hecho, una vez que las palabras han sido intercambiadas en caliente; palabras por las que no puedes disculparte, tendrás que enfrentarte a las consecuencias de ellas durante un largo tiempo.
Tendrás que soportar vivir contigo mismo sabiendo lo que has hecho, y a veces es más difícil vivir contigo mismo y con tus recuerdos que con otra persona.
La mayoría de las veces, si una relación se pone agria, o los temperamentos chocan entre sí y los problemas que estaban burbujeando debajo de la superficie salen a flote, entonces podrías quedarte tambaleando ante la sorpresa y la rapidez con la que las cosas ocurren, incluso si habías estado esperando a que sucediera algo como esto desde hace algún tiempo.
En estos casos, siempre es fácil enfocarse en el juego de la culpa, y culpar a la otra persona por el rompimiento de la relación. Es aquí cuando las personas a veces comienzan a obsesionarse con el “quién dejó a quien”, porque nadie quiere verse como el tonto o como el malo de la película, y eso es exactamente lo que pasará si la verdadera historia saliera a la luz alguna vez.
Por eso tendemos a obsesionarnos acerca de lo que pasó, y la mayoría de las veces cambiaremos un poco las circunstancias incluso en nuestras mentes, para mantener nuestro orgullo y dignidad intactos.
Realmente no cambia nada a largo plazo, excepto que decidas que quieres volver a estar junto a tu ex en pareja.
En esta situación, que seas el “dejador”, o el “dejado”, importa mucho, porque es de acuerdo a esto en base a lo que tomarás tus decisiones acerca de cómo volver con tu ex.
Por ejemplo, si fuiste el dejador, la persona que promovió el fin de la relación, entonces tendrás que poder caminar sobre el agua antes de que puedas tener una mínima chance de recomenzar la relación.
No importará si ahora estás arrepentido, o si has resuelto las cuestiones que te molestaban y que te obligaron a terminar con tu pareja de ese momento.
Si tu ex ha sido acosada demasiadas veces por tus métodos de conquista, podría suceder que nunca vayas a tener una oportunidad de volver con él/ella.
Si eso sucede, es mejor que vayas abandonando la idea de la reconciliación, alejándote con tu dignidad y orgullo intactos.
Por otra parte, si todavía tienes algún tipo de chance de volver con tu ex, entonces podrías tener que caminar sobre agua para probar tu valía, pero al menos sabrás que tienes una chance de conseguir lo que quieres.
Desde otro punto de vista, si fuiste el dejado, la persona que fue abandonada por una razón u otra, entonces tienes una mejor –aunque en algunos casos peor- posibilidad de reconciliación con tu ex que alguien que ha sido el dejador.
Tus posibilidades son mejores porque hay una buena probabilidad de que tu ex esté arrepentido/a por haber destrozado la relación, y porque no eres el que tiene que arreglar las cosas, ya que te han dejado a ti.
Y aquí también es donde las cosas pueden empezar a ponerse algo dificultosas, porque eres el que está en desventaja, ya que quieres volver con esa persona, cosa que no ocurre en sentido contrario.
Al ser la persona que quiere reestablecer la relación, tu posición será débil a menos que tu ex tenga deseos similares a los tuyos.
Incluso siendo el que ha sido dejado, necesitarás trabajar más duro porque tu ex te dejó por algo, y muy posiblemente, sus motivaciones fueron buenas a su manera de pensar.
Antes de ir más adelante por el camino de intentar volver con tu ex, pensé que deberíamos echar un buen vistazo a lo que te tendrás que enfrentar –sobre ti mismo- durante el período durante el cual estás intentando volver con tu ex.
Esto se trata de ti; tus fuerzas y debilidades, y lo que idealmente deberías hacer para aumentarlas, para que puedas tolerar todo el proceso hasta la conclusión de tus planes.
Estas indicaciones están, como siempre, descritas en forma reducida para empezar, y luego las desarrollaré más adelante.
Sé positivo acerca de lo que va ocurriendo – una actitud negativa nunca ayudó a ganar ninguna guerra, y seguramente tú tampoco conseguirás volver con tu ex si tienes una perspectiva negativa de la vida.
No te desanimes – la esperanza es la clave de todo lo que hacemos en la vida, nunca la pierdas.
Busca el lado positivo – siempre hay uno si miras con atención.
Pelea por lo que quieres – Siempre vale la pena luchar por las cosas buenas de la vida.
Ten paciencia – tomará tiempo arreglar lo que está roto.
Usa el humor – se sabe que el humor es la panacea para todas las enfermedades y que si sólo te tomas un tiempo para sonreír y reírte, te darás cuenta de porqué es tan así.
Estar deprimido por cosas que no puedes cambiar, por cosas sobre las que no tienes ningún control, y ser negativo acerca de todos los aspectos de tu vida no te ayudará a enfrentar la realidad con una sonrisa alegre.
En cambio, trata de forzarte a ti mismo a sonreír al menos una vez al día. Sin siquiera darte cuenta incluso empezarás a sentir que tu sonrisa se está convirtiendo en algo más y más natural, y mucho menos forzada.
Con una perspectiva positiva de tu parte encontrarás que incluso un problema que parecería insuperable es algo que ahora puedes enfrentar sin mucho problema.
También comenzarás a ver pequeños cambios en ti mismo. Serás más capaz de aceptar lo que el mundo te tira, y también podrás enfrentar fácilmente tu rompimiento.
El problema que existe al intentar volver con tu ex dejará de parecer un viaje tan cuesta arriba, y más que nada, tu ex también empezará a notar estos cambios en ti.
Entonces, cuando antes podrías haber sido bastante retraído y no sentirte demasiado confiado, encontrarás que una perspectiva positiva puede cambiar las cosas hasta un grado en el que incluso tú comienzas a cambiar para mejor.
En su libro “Cómo desarrollar una personalidad dinámica”, el autor Josué Rodríguez menciona lo siguiente:
Las personas exitosas son identificables por su actitud positiva dominante, la que hace parecer que no existe nada que no puedan lograr si lo quisieran, ¡ni nada que no pudieran poseer! Es una actitud positiva que separa a los exitosos de los perdedores: una energía creada por uno mismo que nos impulsa hacia el éxito, al contrario de lo que sucede con una energía que causa la derrota de uno mismo, este tipo de energía no hace otra cosa que crear problemas y provocar muchos sufrimientos en la vida.
En una ocasión, un profesor de psicología se subió al escenario, mientras enseñaba principios de manejo del estrés a un auditorio lleno de estudiantes. De pronto levantó el vaso de agua que tenía frente a él y cuando todo el mundo esperaba la clásica pregunta de si el vaso está medio lleno o medio vació, el profesor preguntó con una sonrisa en su rostro: “¿Cuánto pesa este vaso de agua que estoy sosteniendo?”
Los estudiantes gritaron respuestas que iban a partir de un par de gramos a varios kilos.
Pero el profesor, haciendo un gesto de silencio con la mano, respondió: “Desde mi perspectiva, el peso absoluto de este vaso de vidrio y su contenido no importa. Todo depende de cuánto tiempo lo sostengo. Si lo sostengo por un minuto o dos, es bastante ligero. Si lo sostengo durante una hora exacta, su peso puede hacer que mi brazo se canse un poco. Si lo sostengo por un día consecutivo, es probable que mi brazo sufra de calambres repentinos y que luego lo sienta completamente entumecido y paralizado, obligándome a soltar el vaso y que el mismo se estrelle contra el suelo. En cualquiera de todos estos casos, el peso del vaso de vidrio no cambia, pero cuanto más tiempo lo sostengo, lo voy sintiendo más y más pesado.”
Al ver que toda la clase asentía mostrando estar de acuerdo, el profesor continuó: “Sus tensiones y preocupaciones de la vida son muy parecidas a este vaso de agua. Si piensan en ellas por un momento no pasa nada. Piensa en ellas un poco más y sentirás que ya te duele un poco. Piensa en ellos durante todo el día, y te sentirás completamente dormido y paralizado, incapaz de hacer nada más que dejarte caer.”
La moraleja de esta historia es la siguiente: Es muy importante recordar que hay un tiempo para todo, aun para dejar de lado tus tensiones y las preocupaciones que te aquejan. Pase lo que pase durante el día, bien temprano en la noche haz el esfuerzo de poner todas tus cargas fuera de ti. No te duermas con ellas para que al día siguiente estén allí otra vez. Si todavía sientes el peso de la tensión de ayer, es una fuerte señal de que es hora de poner el vaso en la mesa.
La actitud positiva es un estado y una condición de tu mente que te permite manejar el estrés con optimismo y paciencia, promoviendo la esperanza y anulando la desesperación. Esto te permite permanecer inmutable ante los problemas, mantener tu atención y continuar perseverando sin frustración, y eventualmente superar todos los problemas.
Así que si has sido un pesimista y has estado lleno de pensamientos negativos, aquí tienes cómo deshacerte de tu problema, adoptar tus ansiadas metas y desarrollar una actitud positiva.
1. Cuando sientas cualquier síntoma de negatividad o de pesimismo invadiendo tu mente, inmediatamente controla tus pensamientos y detente: En lugar de eso intenta imaginar y visualizar tus recuerdos favoritos, expectativas o sueños.
2. Los expertos recomiendan otro método para hacer desaparecer los pensamientos negativos de tu mente, y es un mecanismo que involucra dos etapas básicas: La primera, en la cual se desvían hacia afuera todos los pensamientos y emociones negativas, y la segunda, en la cual se permite que la negatividad se infiltre y sea superada con pensamientos y sentimientos positivos.
3. Hablarte a ti mismo y repetir afirmaciones positivas son técnicas comprobadas para desarrollar una mentalidad positiva. Así que diseña tu charla de preparación personal y tu afirmación motivacional, y haz habitual el hablar contigo mismo frecuentemente.
4. Otra manera útil es hacer carteles o notas adhesivas que lleven palabras afirmativas y positivas como por ejemplo: “puedo hacerlo”, “el éxito es mío”, “el objetivo está a mi alcance”, etc., y colocarlos por tu casa o lugar de trabajo donde te sea posible ver los mensajes frecuentemente, durante el día y la noche.
5. Intenta que las personas altamente exitosas sean tus amigos y conocidos, y trata de pasar tiempo con ellos y conocer su enfoque. Con las amistades adecuadas es mucho más fácil que el secreto para una actitud positiva se te adhiera.
6. Empieza a leer libros y revistas positivas de auto-ayuda, o incluso mejor, las biografías o autobiografías de tus héroes. También puedes concurrir a seminarios relevantes y talleres sobre el tema.
Recuerda que una actitud positiva sólo puede ser cultivada y mantenida por ti; se logra con un desarrollo personal que es enteramente interno, por lo que nadie te lo puede quitar. Lleva mucho tiempo, esfuerzo y dedicación, pero es un elemento eterno e invaluable.
Con respecto a esto, Ralph Waldo Emerson, dijo en cierta ocasión: “Nada externo a ti tiene ningún poder sobre ti.”
Una perspectiva positiva también es buena cuando estás llevando adelante un plan para volver con tu ex, ya que al ser este un terreno repleto de dificultades, la única manera de superarlas es primero siendo positivo en todas tus actitudes.
Esto es algo que puede ocurrir de manera muy fácil durante el período que dure tu “campaña” para recuperar a tu ex. Cuando los avances son lentos o incluso no existentes, se puede volver algo muy fácil desanimarse, y en esos momentos, se hace incluso más fácil para ti el dejar ir tus objetivos y atender otros asuntos.
Sin embargo, esto puede ser positivo, ya que a veces la vida se despliega ante nosotros de diversas maneras, y tú podrías no estar destinado a recuperar el afecto de tu ex. Tal vez están destinados a permanecer siendo buenos amigos en vez de pareja y amantes.
Esto es algo que tendrás que evaluar si en algún punto sientes ganas de rendirte en tu búsqueda.
Pero si realmente amas y quieres a tu ex en tu vida otra vez, y si sabes que tu ex todavía tiene sentimientos por ti, tendrás que mantenerte fuerte cuando venga el desánimo y la aparente falta de progreso, porque ésta probablemente es sólo una etapa por la que estás pasando.
Si lo necesitas, hazte a un lado y tómate un respiro. Deja a tus planes por un lado momentáneamente y dedícate algo de tiempo a ti mismo. Vete a algún lado con tus amigos si puedes, o tómate unas vacaciones lejos de todo lo que te pueda recordar a tu ex.
Hacer algo como esto puede rejuvenecerte y hacerte volver a tu búsqueda lleno de vida y esperanza.
Sin importar lo que la gente pueda decirte, siempre hay un lado positivo detrás de toda nube gris, sólo necesitas mirar con más atención y cuidado si esto no es inmediatamente aparente.
Cuenta la historia de un chino que tenía un hermoso caballo, fuerte y vigoroso. Sus vecinos siempre le decían “hay que ver la suerte que tienes”, a lo que él siempre les respondía: “no todo es lo que parece.” En una ocasión el caballo se le escapó de su rancho y los vecinos fueron a consolarle. “Lamentamos muchísimo su desgracia”, le dijeron al chino dueño del caballo. Y él les respondió: “¿Quién dice que esto es una desgracia?”
A la semana siguiente volvió el caballo, trayendo detrás de él una preciosa manada de yeguas y caballos alazanes. Los vecinos también le felicitaron por tener tanta suerte otra vez. El chino les dijo: “no todo es lo que parece.”
A los dos días su hijo montó uno de los caballos y se fue a galopar por ahí, pero cayendo, se quebró una pierna. Los vecinos del chino volvieron para “consolarle”, ya que su hijo quedó cojo de una pierna, pero él les dijo: “¿quién dice que esto sea una desgracia?”
Al cabo de poco tiempo hubo una guerra muy violenta en ese país, por lo que el gobierno empezó a reclutar soldados de todos los pueblos y ciudades. El primogénito de sus hijos se libró de tener que ir a pelear... por estar cojo de una pierna.
Cada vez que enfrentamos una aflicción tenemos dos caminos para tomar. Delante de nosotros hay dos decisiones: o decidimos lamentarnos y llorar o bien actuamos con una perspectiva positiva ante el mal acaecido.
Si la vida es un viaje, es muy raro que nos toque caminar en una ruta plana y derecha, donde no haya estorbos que nos impidan el paso. La vida es como una carrera de obstáculos, siempre se presentan una serie de problemas todos los días, los cuales debemos tratar de superarlos.
Lo importante es no agobiarnos con lo que está más adelante, pues si te enfocas demasiado en mirar los obstáculos que vendrán mañana, seguramente no verás el que tienes por delante hoy. Cada vez que te enfrentes a un obstáculo que te presente la vida, recuerda que puedes ver en él una oportunidad para desarrollar tu carácter y tu personalidad.
Incluso puedes tomar al rompimiento como el lado positivo que tu relación necesita, el tan necesitado espacio para respirar que necesitabas.
Como he dicho anteriormente, a veces no nos damos cuenta del valor que tiene algo para nosotros hasta que lo perdemos, y esto se aplica también a las relaciones.
Si has terminado con tu pareja, entonces este puede llegar a ser el tiempo lejos del otro que necesitan para poner las cosas en perspectiva.
Tú y tu ex podrían darse cuenta de que estar juntos es algo mucho mejor que estar separados, y que lo que hay entre los dos es lo mejor que les pudiera haber ocurrido.
Entonces recuerda, hay algo positivo en todas las situaciones aparentemente adversas, a veces sólo necesitas observar con un poco más de detenimiento para descubrirlo.
Rogelio cuenta brevemente su historia: “Después de un engaño de mi parte y con doce años de casados, reconozco que mi esposa me amó profundamente, pero yo no expresaba mis sentimientos como ella quería. Luego de mi infidelidad, fui detallista unos cuantos meses después de que ella me perdonó, pero con el correr del tiempo volví a ser el mismo de siempre, caí en la rutina y olvidé los “pequeños” detalles que le dan vida a una relación.
No fue porque no me nacía hacerlo, sino porque no me acostumbré a ser así. Creo que tampoco me esforcé demasiado por aprender a regalar los detalles que eran tan importantes para mi pareja. Ahora que la estoy perdiendo me duele el alma, me duele el corazón, me duele tanto verla indiferente para conmigo y lo peor de todo es que la entiendo… ella se cansó de esperar.
En este momento estoy dispuesto a casarme por iglesia, como ella quería, ya que en reiteradas oportunidades me negué aduciendo que no creía en una ceremonia como aval para nuestro amor. Ahora que quiero hacerlo me doy cuenta que he tomado esa decisión simplemente porque la estoy perdiendo y tengo un compromiso renovado para con ella, así como una cierta estabilidad económica. La cuestión es que ahora ella es la que no quiere. ¿Qué puedo hacer?”
No cometas el error de Rogelio, quien pasó por alto el valor de su pareja, dejando los “pequeños” detalles para el final. Las mejores cosas en la vida son aquellas por las que siempre vale la pena luchar. Y para acompañar esa frase, recuerda que las cosas buenas en la vida nunca se obtienen fácilmente.
Entonces, dejando a un lado el hecho de que te he estado arrojando dichos y clichés durante todo lo que va del libro, si miras atentamente lo que acabo de decir, te darás cuenta de que todas las frases que he mencionado hasta ahora son ciertas, incluso ésta última acerca de pelear por lo que quieres.
Si tú no peleas por lo que quieres, entonces nadie podrá hacerlo por ti. Es sólo cuando decides ponerte manos a la obra y luchar por lo que deseas, que puedes incluso mover montañas.
No sirve de nada esperar a que sucedan milagros o incluso que tu ex repentinamente se dé cuenta de lo que se está perdiendo en la vida al no estar contigo, porque eso no sucederá sin que te muevas para conseguirlo.
Tal vez alguien te robó a tu amado/a frente a tus narices. Fuiste lo suficientemente tonto la primera vez para dejar que eso sucediera; no repitas el error de dejar que el “ladrón” se escape silenciosamente.
No agredas física o verbalmente a esta persona. En vez de eso, desarrolla tus planes a medida y usa toda porción de encanto, atractivo sexual y lo que sea que tengas en tu arsenal; asedia el corazón y la mente de tu ex.
Si haces las cosas bien, te darás cuenta de que estás ganando la guerra sin ser ni por un momento un ladrón de corazones tú mismo.
Necesitarás cortejar nuevamente a tu ex para que vuelva contigo, usando todo lo que tengas a tu alcance, y si eso no es suficiente, entonces busca profundo dentro de ti y usa algo más.
Si quieres volver con tu ex, si él/ella te fue arrebatado por una persona sin escrúpulos que no tiene ningún respeto por las relaciones, entonces estás en todo tu derecho de pelear por lo que alguna vez fue tuyo - ¡ponte en marcha!
Junto con todo lo demás que has estado leyendo o planeando hacer, junto con todos los lados positivos que encuentres, y junto con todas las batallas que ganes, también necesitarás buscar profundamente dentro de ti y encontrar el arte de la paciencia.
Recuperar a tu ex puede llevar más tiempo de lo que puedes haber anticipado, y ceder ante la impaciencia es algo tan malo como ceder ante la desesperación. No hagas nada de eso.
Si eres una persona naturalmente impaciente, entonces aprende a controlarte. Toma control de tu impaciencia y permite que tus bien establecidos planes se desarrollen.
El humor es una de las actividades más poderosas que existen, y si lo usas en los momentos en los que te sientes como si te estuvieras ahogando en tu dolor, o cuando sientas que tu actitud positiva se está escapando, o incluso cuando se te está haciendo difícil ver el lado positivo de las cosas, está garantizado que te sentirás mejor.
Excepto, por supuesto, que prefieras hundirte en tu miseria y desesperación, para lo cual probablemente deberías dejar al humor en casa.
Sin embargo, ahora hablando en serio: no hay nada mejor para alguien que ha pasado por un rompimiento que un poco de humor. Incluso un calendario que muestre un chiste para cada día podría ser lo que necesitas para darle un buen comienzo a tu día.