Sólo porque hayas terminado con tu pareja no deberías actuar de manera juvenil y hacer cosas que tu yo cuerdo y maduro no haría ni en un millón de años.
Piensa en lo que haces antes de hacerlo. Siempre es bueno mirar antes de saltar, y en este caso, esto es especialmente cierto. Una decisión tomada en caliente cuando todavía estás tambaleando por tu reciente rompimiento, de hecho probablemente no sea la mejor decisión que puedas tomar.
Tómate tu tiempo para enfriarte y pensar las cosas en profundidad antes de entrar en un modo de acechamiento. Deja a tu ex tranquilo/a hasta que puedas pensar con claridad, y hasta que ese momento llegue ocúpate en hacer algo constructivo como por ejemplo seguir adelante con tu vida.
Sal con tus amigos, haz nuevos amigos, consíguete un hobby (si no tienes ninguno), visita lugares, aprende algo nuevo, y haz cosas que siempre quisiste hacer pero para las cuales nunca tuviste la oportunidad. Este es tu tiempo de escaparte de ti mismo y de tus lamentos, así que simplemente hazlo.
Una pequeña advertencia en caso de que sigas mis consejos de “visita lugares, aprende algo nuevo, y haz cosas que siempre quisiste hacer”; hagas lo que hagas, no te envuelvas en pensamientos negativos, como por ejemplo los de que deberías estar haciendo esas cosas nuevas con tu pareja, o que sería más divertido si pudieras hacerlas con tu amado/a.
Todo eso podría ser cierto, pero por algo no están juntos, han terminado; y por otra parte, si estuviste con tu pareja por algún tiempo considerable y todavía no habías hecho nada de esas cosas que ahora forman parte de tu lista de “cosas que debo hacer”, lo más seguro es que te habría llevado un tiempo muy largo llegar a hacerlas con él/ella.
Aprovecha la oportunidad que tienes para hacer esas cosas, y laméntate por tus miserias lejos de la vista pública, porque el motivo fundamental por el que deberías hacer esas cosas que mencioné anteriormente es para escapar de tus problemas momentáneamente, ¡no para mostrarlos a todo el mundo!
Sin embargo, si encuentras que no puedes lograr ni siquiera salir de tu casa por la mañana a tomar tu taza de café con algo de la panadería como siempre, o si te da pereza incluso tan sólo pensar en ver a tus amigos los domingos como siempre, en lugar de ver a tu pareja, necesitas replantear tu situación.
Y si mientras estás en este estado mental se te ocurre alguna “brillante” idea acerca de cómo volver con tu ex, te digo “¡Por favor no lo hagas!” Este tipo de ideas son probablemente las últimas cosas que quieres en tu vida, ya que la arruinarían incluso más. Relájate, deja que el mundo se desarrolle a tu alrededor por un tiempo, y sólo entonces desarrolla algunos planes definitivos.
Descritas abajo hay algunas de las ideas más ineficaces que se te pueden ocurrir, y en el peor de los casos, poner en práctica. Todas comienzan con un “No”, así que ten cuidado, y por favor no pongas en práctica ninguna de ellas, ¡o cualquier cosa que pudiera ser percibida como un comportamiento anormal!
Como hasta ahora, las he escrito en forma de títulos primero, y después las he desarrollado en profundidad más adelante.
No te conviertas en un “acechador” - ¡creo que eso realmente lo dice todo!
No cedas ante la tentación de recriminar – únicamente generarás un desagrado hacia tu persona por parte de la gente que te rodea.
No te quejes, no divagues ni protestes – nuevamente, no es necesaria una explicación, aunque si diré que si puedes mantenerte en el molde sería excelente.
No hagas jugadas agresivas – no trates de ganar de nuevo a tu ex al intentar forzarlo/a; en su lugar, tómate las cosas con calma y usa el enfoque de la suavidad.
No te conviertas en un felpudo – este es el extremo opuesto de lo anterior. No hay nada peor que puedas hacer que convertirte en el felpudo en el cual tu ex se limpie los pies al salir de su casa.
No contactes a la familia de tu ex para averiguar cosas sobre él/ella - ¿puedes ver en qué punto esto podría conducir a tu ex a pedir una orden de restricción en tu contra, especialmente si empiezas a molestar a todos sus conocidos?
No coquetees con los/las amigos/as de tu ex – bastante claro en sí mismo, ¿no?
No sigas el ejemplo de “Ross” (personaje de la serie americana “Friends”) – Tuve mucho tiempo en mis manos cuando mi pareja se fue a otro país por asuntos de negocios, y pasé el tiempo mirando “Friends.”
Hace poco leí la siguiente experiencia real de una persona:
“Mi amigo era dueño de una empresa de construcción y conducía una camioneta pick-up entre puestos de trabajo. Muy a menudo la parte trasera del vehículo estaba llena de basura, papeles y escombros durante días. Cierta noche, y al ver tan llena de basura la camioneta, se decidió a vaciarla. Así fue que se detuvo a un lado del camino, se puso sus guantes de trabajo y al dirigirse hacia la parte de atrás, notó que había un movimiento extraño entre los escombros.
Mi amigo se acercó para investigar, y encontró a su “pegajosa” ex-novia de tres meses, escondida debajo de unas planchas de cartón mojado. Ella había estado allí todo el día. Nunca supo si pasó otros días enteros de esa manera.”
Tus intenciones podrían ser puras y tu corazón podría estar lleno de esperanza, pero si comienzas a seguir a tu ex, intentando conseguir una “reunión” con él/ella, algunas personas podrían llegar a ver esto como acoso, simple y claramente, y podrías llegar a ser tildado de “acechador.”
Necesitas cuidar que tus acciones no hablen más fuerte que tus palabras en este aspecto, ya que si las personas confunden tus sinceros intentos de volver con tu ex con algún tipo de acoso, entonces podrías terminar en prisión y abofeteado con una orden de restricción en un abrir y cerrar de ojos.
Dejando eso a un lado, si todavía estás sufriendo por haber terminado con tu pareja, y quieres echarle un vistazo al menos a tu ex para calmar tu corazón roto, por favor no vayas por los alrededores de su casa todas las mañanas escondiéndote entre los arbustos, esperando a poder tener una buena visión de él/ella antes que nadie.
Además de ser algo realmente horroroso, es también bastante inquietante pensar que necesitas a alguien hasta tal punto que no puedes vivir sin tan siquiera verlo/a apenas comienza el día.
Si ese es el caso, podrías intentar probar con algo de terapia para ayudarte a superar la obsesión con tu ex, o tal vez simplemente quieras empezar a despertar con una foto suya a tu lado.
Mantente alejado de hacer cosas que podrían conseguirte el título de acechador, y así podrás desarrollar mejor un plan adecuado para intentar recuperar su amor.
Exactamente, no mires ferozmente a tu ex cada vez que se acerque al perímetro en el que estás. Y hagas lo que hagas, por favor mantente alejado de las recriminaciones totalmente innecesarias; no le hacen bien a nadie, y mucho menos a ti.
Si por siempre te dedicas a recriminarle cosas a tu ex, o también incluso a tu pareja antes de que el rompimiento ocurra, te encontrarás privado de todos tus amigos.
A nadie le gustan las personas que se la pasan quejándose y tratando de demostrar que son la persona damnificada. Si sientes la necesidad de ceder y decir algo por el estilo, contrólate.
¿Es eso lo que realmente quieres hacer?, ¿ser recordado como el ex del infierno? Aquel que nunca paraba de quejarse y protestar, hablando hasta por los codos acerca del rompimiento y como él/ella era la parte damnificada de la pareja.
Divagar, protestar e ir por ahí como un desquiciado, seguramente no te hará muchos amigos, y muy posiblemente alejará a los amigos que te quedan. ¡Y muy posiblemente también termines con una orden de restricción puesta sobre ti!
Gritarle a tu ex, ser verbalmente abusivo, o simplemente divagar acerca de diversos temas, no te dará puntos para volver con él/ella. Mantente alejado de este tipo de comportamiento, y encontrarás que eres más feliz por ello, además de poder visualizar un camino más claro para volver a ganar a tu ex.
Las tácticas por la fuerza no funcionarán nunca. No estás intentando captar la atención de tu ex por primera vez (¡si es que ese tipo de táctica funcionó incluso en aquel momento!), sino que estás intentando recuperarla, para que puedas reestablecer la relación.
Usa el enfoque de la suavidad. Usando miel siempre atraparás más moscas que usando vinagre, y esto se aplica también a la hora de reconquistar a tu ex.
Si te pones demasiado agresivo podrías darte cuenta de que no estás logrando nada útil; de hecho puedes incluso estar asustando a tu pareja.
Usa enfoques sutiles y pisa con cuidado a la hora de tratar de recuperar a tu ex. Lo mejor que puedes hacer al principio es tomarte las cosas con calma. Averigua cómo se siente tu ex acerca del rompimiento, y a partir de ahí trabaja para conseguir lo que quieres.
¿Realmente quieres convertirte en la persona a la que tu ex usa para limpiarse los pies cuando salen de su casa, siempre que quieran? ¿Realmente quieres ser tratado irrespetuosamente a causa de tus pobres métodos?
No necesitas convertirte en un mártir o en un felpudo para agradarle a la gente, o incluso para que la gente te necesite. Pueden necesitarte y también sentir agrado por ti siendo asertivo, y de esa manera encontrarás que también eres respetado, al no dejar que nadie te pisotee a su antojo.
Esta no es una cuestión de ser orgulloso o no, sino de tener dignidad, fe, y la seguridad de poder hacer lo que quieras cuando quieras, sin tener que depender de nadie más para ello.
Si hasta el momento de la ruptura tu vida con tu ex ha sido un ejemplo perfecto de lo que es ser un felpudo, entonces recuerda aquellas épocas en las que estaban juntos. ¿Hubo alguna vez una chispa al menos de respeto propiamente dicho que hayas recibido? ¿Puedes recordar alguna vez en la que tu ex no te pasó por encima?
Esta no fue culpa de tu ex, sino de ti mismo, por darle a él/ella y probablemente a todo el mundo el derecho de pisotearte a su antojo cuando se sintieran con ganas.
Piensa en lo que te atrajo de tu ex en primer lugar. ¿Fue porque te necesitaba, o porque tenía un carácter fuerte e independiente con el que te querías relacionar?
Y si todavía piensas que tu autoestima de felpudo te va a permitir volver a entablar una relación con tu ex, echa un vistazo al mundo a tu alrededor y date cuenta.
La humanidad puede haber evolucionado a vestir saco y corbata, pero eso no significa que la ley de la selva haya dejado de aplicarse. Sólo los más fuertes y preparados sobrevivirán, y en este caso, ser un felpudo no te va a poner en esa categoría.
Necesitas volverte fuerte dentro de ti mismo y tener la confianza como para poder vivir por ti mismo sin tu ex. Sólo entonces serás capaz de volver a estar con tu amado y evaluar la posibilidad de reestablecer la relación.
Esto es algo que no debes hacer bajo ningún concepto, salvo que también la familia o los amigos de tu ex formen parte de tu círculo de amistades o familiares. Molestar a la familia de tu ex buscando información sobre él/ella para ver cómo le está yendo no será nada beneficioso para ti.
Debes saber dónde poner un límite y cuándo dejar de ser una molestia, sobre todo para procurar conservar tu dignidad.
Contactar regularmente a la familia de tu ex para conseguir información acerca de él/ella, para saber cómo tomó el rompimiento, o para saber si está viendo a alguien más, no es la manera correcta de manejarse.
Esto puede significar un importante argumento a partir del cual tu ex puede no querer volver a verte nunca más, así que si quieres intentar volver con él/ella, te sugiero que te mantengas alejado de su familia y de preguntar sobre su vida, sin importar qué tan amistoso te hayas vuelto con su familia durante el transcurso de tu relación con esa persona.
¡Esto es simplemente Estúpido! (si, con una E mayúscula). Esto es lo último que quieres hacer, y va más en torno a la sed de venganza (o estupidez pura) que otra cosa.
Juntarte con el mejor amigo o amiga de tu ex, o cualquier amigo/a en realidad, es una manera incluso más segura de alejar a tu ex de ti. Tu ex podría llegar a perdonar a la otra persona, pero tú, por otra parte, eres un caso totalmente distinto.
Ya que la relación se acabó, nunca volverás a estar tan alto en su lista como ese amigo/a con el/la que te has acostado. Además, tu ex probablemente estará pensando que deberías haber pensado bien lo que hacías antes de cometer tal atrocidad.
Sin lugar a dudas, has quebrado la regla fundamental acerca de nunca acostarte con los amigos de tu pareja (incluso si se trata de tu ex pareja). Esta es una gran prohibición que deberías respetar.
Incluso si no mantienes relaciones sexuales con esta persona, incluso un simple coqueteo puede arruinar todo; y si quieres volver con tu ex, ¿qué demonios estás haciendo tratando de coquetear con sus amistades?
Si por otra parte acabas de enterarte de que has sido dejado por tu pareja y todavía estás temblando por ello, puedes llegar a cometer el error de encaminarte en esa dirección.
Todo lo que puedo decir es que deberías asegurarte de que tu ex nunca se entere – lo cual es algo inútil por cierto, ya que la verdad siempre saldrá a la luz de una u otra manera -, o de lo contrario podrías ir de rodillas suplicándole perdón y prometiendo que nunca ocurrirá nuevamente.
Recuerda que seducir a las amistades de tu ex está fuera de tus límites, sin importar cuál sea la provocación, si tu objetivo en definitiva es volver con tu ex.
También, además del hecho de que hacerlo es algo simplemente tonto, lastimarás y avergonzarás a tu ex con tus acciones. No importa quién dejó a quién en este aspecto. Todo lo que importa es que has ido a estar con su mejor amigo/a tan pronto como han terminado.
Eso es algo vergonzoso y potencialmente hiriente para una persona, y no te ayudará para nada a que tu ex te mire con buenos ojos.
También hay probabilidades de que estés haciendo esto por despecho, por lo que encontrarás que la pseudo “nueva relación” que estás desarrollando no irá a ninguna parte.
O tal vez si te acostaste con el/la mejor amigo/a de tu ex para poder superar tus noches miserables, no le estás haciendo bien a nadie, ni a tu ex, ni a tu nuevo/a amante, ni a ti mismo.
Aprende a pensar siempre antes de lanzarte a hacer algo, incluso cuando estés en medio de un rompimiento. Esto te puede ahorrar muchos dolores de cabeza a fin de cuentas.
Esta situación es realmente clásica, al menos según mi experiencia personal. Ross, de la comedia “Friends”, puede haberla convertido en algo gracioso para los espectadores de televisión en todo el mundo, pero de hecho es algo que ocurre y a menudo.
¿De qué estoy hablando? Bueno, para ponerlo de una manera clara y concisa, tú y tu pareja o han terminado o están tomándose un “tiempo” el uno del otro, y entonces tú (o tu pareja) tienen una aventura amorosa con alguien más.
Puedo decirte desde este momento que no te ganarás el cariño de nadie al hacer esto. Es algo similar a la sección anterior, que se refería a no coquetear con las amistades de tu ex, pero se expande, por así decirlo, para abarcar a más personas.
En pocas palabras, si recién has terminado la relación, necesitas tomarte un tiempo para relajarte y pensar las cosas antes de tomar cualquier tipo de acción o decisión.
Seguramente lo último que deberías hacer es tener una aventura loca de una noche apenas ocurre el rompimiento. Emborráchate salvajemente si es necesario, pero mantente alejado de miembros del sexo al que te sientas atraído – podrías hacer algo por lo que te puedes llegar a arrepentir más adelante.