DÍA 14
La santidad del presente me aleja del dolor del pasado
Cada momento revela el amor infinito de Dios. Al vivir en el presente, estoy libre y a salvo. Nada puede mantenerme atado al pasado, excepto mis pensamientos.
Me perdono a mí mismo y a los otros por los errores cometidos antes de este momento. Escojo no arrastrar el peso de mi pasado a la tierra prometida de cada nuevo día. Estoy abierto a los milagros que el presente tiene para mí en un eterno ahora.
Abandono mi fijación al pasado para vivir con intensidad el presente. Que mis pensamientos no se pierdan en la oscuridad anterior, sino que se llenen con la luz del ahora. Que mi corazón se abra al conocimiento de que todo es posible a cada momento y que Dios no se aparta por los miedos o los errores cometidos en el pasado. Perdono lo que hasta ahora ha sido y abrazo lo que ahora es. Estoy en paz con la santidad de este instante y dejo ir todo lo demás.