DÍA 174
Me regocijo con todo lo bueno
Hoy no dejaré de notar los milagros de la vida que me rodea. Desde las bellezas de la naturaleza hasta el poder del perdón, me asombro ante las creaciones de Dios.
Cuando mi mente se centra en un problema del mundo, recordará que los bebés siguen naciendo, la gente se enamora, el perdón sigue haciendo milagros y que donde hay amor hay esperanza. Hoy reconozco todos los increíbles regalos de la vida. Voy a tratar de ser consciente de la más pequeña demostración del milagro de la vida.
Querido Dios,
que mis ojos se abran más hoy,
que vea más
de tu fabulosa creación.
Que no me sienta tentado para centrarme en otra cosa
que no sea tu verdad.
Aun cuando sea testigo de lo que está mal,
que recuerde que en ti siempre hay un camino
para hacer que todo vuelva a su cauce correcto.
Así sea.
Amén.