DÍA 338
Un milagro sucederá en cualquier momento y en cualquier circunstancia si me alineo con el amor
No existe ningún nivel de dificultad en los milagros. Ninguno es más difícil o más grande que otro. Soy un hijo de Dios y Dios hace milagros de manera natural. Éstos están dentro del tejido del universo, y me los merezco por ser quien soy.
Así, recordando quien soy, no me pelearé con nada. Dejaré mis preocupaciones, todas las cargas y las preguntas a Dios. No voy a constreñir mi energía, sino que me relajaré en sus brazos amorosos. Desde aquí, cada circunstancia en mi vida entrará milagrosamente dentro del orden divino.
Mientras más cargas llevo, mayor será mi tentación para estresarme, preocuparme, constreñirme y tratar de controlar. Sin embargo, hoy recordaré que debo hacer lo contrario. Recuerdo que los milagros sucederán en cualquier situación que deje al amor. Hoy dejo que sucedan.