He salido
A esperarte...
Aquellos paisajes
Se han quedado dormidos,
Atrás.
Como los muertos,
Hemos perdido la memoria,
Ya no somos
Los jóvenes alegres
Que llenaban de risa los lugares;
Firme el corazón,
Como las hojas
Que trae el otoño
En sus entrañas.
Ábreme, íntima,
Las ventanas de tu alma
Y desveladas
Arrullemos
En esta noche
Triste y húmeda
Los dolores pasados.
Bésame, amor,
Para darte palabras
Que los labios
Enciendan a tu paso
Tan sólo para ti.
Anhelame,
discreta,
En un estrépito
De abrazos postergados
Hasta que rebozemos
La alegría
De los años duros.
Con esa voz de siempre
Háblame, recordada,
Para buscar
El eco de tus pasos
Y en esa catacumba cerrada
Que es mi sombra
Resuenen
Las rebeldes, sangrantes
Palabras del adiós.
¡Ah, cuánto calle
Para encontrarte!
¡Ah, cuánto debí gastar
Para perderte!