RITMO EN EL CUERPO
¡Quiero bailar!
Vamos a divertirnos. No importa si estamos en la cocina de nuestro apartamento, lejos de las playas tropicales donde nos gustaría bailar… La vida hay que tomarla por el lado positivo, y mover las caderas nos producirá un inmenso placer…, que, con la práctica, se convertirá en salud.
Esto es la zumba: una disciplina de intensidad moderada o alta, a medio camino entre el baile y el fitness, que fusiona lo mejor del Caribe con lo más divertido del gym. ¿Quieres mantener la línea? ¡Just dance!
«LOS GRANDES BAILARINES NO SON GENIALES POR SU TÉCNICA. SON GENIALES POR SU PASIÓN». MARTHA GRAHAM (1894-1991), BAILARINA Y COREÓGRAFA ESTADOUNIDENSE.
La zumba es una actividad cardiovascular que combina ejercicios de fitness y pasos de bailes latinos como la samba, el mambo, el reguetón, el merengue y la salsa. En muchos casos también integra movimientos de hip-hop, danza del vientre y bailes de Bollywood.
La zumba nació de forma oficial a mediados de los años noventa, cuando el bailarín colombiano Beto Pérez le dio «forma» y unificó criterios y movimientos. Sin embargo, este seudobaile ya se practicaba de manera espontánea en las fiestas colombianas.
El término zumba podría ser una distorsión de rumba, nombre que los colombianos dan a la fiesta en general, o derivarse del verbo zumbar, vibrar.
Podríamos decir que la zumba toma lo más bailable del aeróbic y lo más aeróbico del baile latino, y el resultado es una actividad fresca, divertida, electrizante y apta para todos los públicos. Suele practicarse en ambientes desenfadados, por lo que la zumba ayuda a liberar el estrés y estimula el buen humor y la seguridad en uno mismo. Además, al entrenar el equilibrio y la coordinación, puede ser la antesala de otros bailes más complejos, sean latinos o no.
Una clase estándar de zumba dura alrededor de una hora, durante la cual el instructor va introduciendo pasos sencillos que los alumnos van repitiendo hasta memorizarlos, para formar así la coreografía. El nivel de dificultad puede variar, pero suele ser muy asequible, por lo que las clases tienen poco de técnica y mucho de movimiento.
Al tratarse de un baile de intensidad entre moderada y alta (en función del nivel), la zumba hace sudar (elimina toxinas), ayuda a quemar grasas, tonifica los músculos y mejora la resistencia cardiorrespiratoria.
No importa. La zumba empieza como una clase de fitness, de step o de cualquier otra actividad de tonificación, y a medida que se van encadenando los pasos, surge el baile: la diferencia entre un ejercicio de fitness y un paso de zumba la puede dar un simple movimiento de brazos o de cadera. Sí que es necesario un mínimo de coordinación, pero este se adquiere con la práctica. Además, la música alegre y pegadiza invita a moverse, ¡y el ritmo se coge sin querer!
Aunque no es una danza para virtuosos, sí permite llegar a niveles de complejidad notables: no hay techo, siempre hay un nuevo paso por aprender. La gran ventaja de la zumba es que se trata de una disciplina bastante libre, y permite adecuar las coreografías a las habilidades y niveles de cada uno.
«TODO EL MUNDO CON LAS MANOS ARRIBA / DÁNDOLE AL MOVIMIENTO DE CINTURA / NO TE CANSES, PONLE MOVIMIENTO DE LA VIDA / ZUMBA NENA MENEA SIN CENSURA». FRAGMENTO DE LA CANCIÓN ZUMBA, DE DON OMAR (1978), CANTANTE PUERTORRIQUEÑO.
Por lo general, los zumberos visten ropa deportiva que deja los brazos al aire y, en el caso de las chicas, también el vientre. El atuendo es cómodo e informal, y suele ser de colores alegres. Los pantalones, por ejemplo, pueden ser elásticos tipo leggings o anchos, largos hasta los tobillos o por debajo de la rodilla.
Lo único realmente importante son las zapatillas, que deben ser especiales para zumba: flexibles, blandas y ligeras, pero muy resistentes. Para las mujeres, un buen top o un sujetador deportivo también es básico.
En Costa Rica, la música latina ocupa el primer puesto en el ranking nacional. Las canciones de salsa, merengue o reguetón se escuchan en cualquier rincón del país y las fiestas de los costarricenses son toda una demostración de ritmo, gracia, sabrosura…, y resistencia cardiovascular.
En Costa Rica se encuentra la blue zone más grande del mundo: la península de Nicoya. Situada en el oeste del país, esta península es un trozo de paraíso por la belleza de sus playas, la exuberancia de sus parques naturales y el estilo de vida de sus habitantes. En Nicoya, el porcentaje de personas centenarias supera cualquier expectativa: aquí la gente goza de más salud durante muchos más años. ¿Por qué? Es una cuestión de hábitos saludables: comida natural, una vida sin estrés, sol, mar, aire limpio…, y mucho baile, ¡por supuesto!
La zumba, convertida ya en fenómeno global, ha provocado la aparición de un nuevo subgénero musical: la música zumba. Por un lado, la que comercializa Zumba® Fitness es la «música oficial» y, por otro, muchos artistas latinoamericanos han lanzado temas zumberos en los últimos años. Además, muchas canciones han sido versionadas recientemente en clave de zumba.
Desde la otra punta del mundo, además, y aunque no han sido creadas para ello, las canciones del cine de Bollywood resultan perfectas para bailar zumba (de hecho, es frecuente encontrar en la zumba movimientos típicos de las danzas orientales).
Si no sabes muy bien por dónde empezar, aquí te sugerimos una lista de doce canciones variadas, muy populares en las sesiones de zumba: Loca, de Shakira; Bailando, de Enrique Iglesias; Vida, de Ricky Martin; Dance again, de Pitbull y Jennifer López; Gangnam Style, de PSY; Zumba, de Don Omar; Que viva la vida, de Juan Saturria; Single Ladies, de Beyoncé; Chunari Chunari, de Salman Khan; Chucuchá, de Ilegales; Limbo, de Daddy Yankee, y Sheila Ki Jawani, de Vishal y Shekhar.