Agradecimientos

Los inicios del proyecto «Icaria» se remontan al año 1978, cuando terminé la novela Morenga. El trabajo que comencé entonces se interrumpió; no daba con la estructura épica que abarcara el material y, no menos importante, no contaba con el dinero necesario para dedicarme de forma exclusiva a esa novela durante un periodo prolongado. El largo proceso de planificar, esbozar y desechar el texto, así como de escribirlo, ha tenido como resultado la influencia de un gran número de voces distintas en la obra, tanto voces literarias lejanas como voces orales cercanas. También voces que se hicieron escuchar desde los documentos, los artículos, los libros y las entrevistas.

Sobre todo le estoy agradecido a Dagmar, que me ha acompañado durante años a lo largo de este proceso de creación con espíritu crítico y exigente, así como a varios amigos: Keith Bullivant por el apoyo en la investigación histórica y por la traducción de algunos diálogos al inglés; Martin Hielscher, que durante los últimos años ha sido un importante interlocutor y cuyas sugerencias he introducido en el texto; el firme editor de mesa Olaf Petersenn; Roman Ritter, por la revisión final del manuscrito; y por supuesto al editor Helge Malchow.

A Michael von Cranach, Paul Michael Lützeler, Norbert Mecklenburg, Egon Schwarz, Patricia Reimann, Mary Rodena y Peter Sprengler les agradezco sus relevantes comentarios, y Laura Velten me ayudó a conseguir libros y documentos.

Por último me corresponde dar las gracias a los trabajadores de la editorial, que son quienes se ocupan de que esta novela llegue a sus lectores.