PEMA

               Mi Pema hermosa:

               Mi corazón late fuertemente al escribir estas letras. La simple idea de saber que pueden ser éstas las últimas palabras que recibas de mí conmueve mi alma.

               Por otro lado, me siento también el hombre más afortunado de la tierra.Qué alegría ha sido conocerte desde antes de que pudiéramos hablar. He tenido el sueño dorado de cualquier hombre: crecer al lado de una princesa que con el tiempo se convirtió en la reina de mi corazón.

               Te admiro y reconozco, por tanto. En mi vida no he conocido a una mujer tan sonriente y positiva, tan carismática y amante de la vida.

               ¿Sabes?, no pude ser más afortunado en esta vida. ¡Cuánta dicha y cuánta alegría explota en cada partícula de mi ser simplemente por ser consciente de todo el amor que por ti vivo y manifiesto cada vez que respiro!

               Gracias, mi Pema hermosa, gracias por cada instante, por cada sonrisa, por cada aprendizaje, por cada momento a tu lado, que queda eternamente guardado en mi corazón.

               Suspiro profundamente al pensar que tal vez para ti pueda resultar doloroso leer estas palabras. Pero como tú una vez me lo dijiste: “La vida es demasiado corta como para no ser felices y atorarse en tragos amargos de la vida”.

               El deseo más profundo de mi corazón es que cada día de tu vida continúe en amor y en eterna realización e iluminación.¡Brilla, mujer de mi vida y de mis sueños! Si la vida te lo permite enamórate una vez más. Sé feliz siempre y comparte tu amor y tu pasión por la vida con el mundo.

               Y sé siempre el gran ejemplo de madre para Dorje y Prajna.

               Por favor, asegúrate de que Dorje, al igual que Prajna, reciban sus cartas. Y léeles estas palabras cuando consideres que sea el momento apropiado.

               ¡Te amo eternamente!

               Tu Pasang Sona