Tiempo de preparación: 20 minutos
La leche de almendras es supremamente alimenticia, tiene un gran poder antioxidante y, si estás buscando perder peso, es una gran aliada.
Esta receta es un poquito dispendiosa, ¡ten paciencia! Te aseguro que vale la pena y que cuando la pruebes ¡ñuuuuum! Será la única leche que querrás tomar.
Deja remojando las almendras en el agua de un día para otro. Luego, licúalas muy bien en esa misma agua. En una jarra, cuela con el trapo el agua hasta que las almendras queden completamente deshidratadas, ¡listooo!, ¿lo puedes creer? Ten en cuenta que se debe refrigerar y consumir lo antes posible.