DE REPENTE, LA MÚSICA

De repente, la música.

                        Fulgor

inmemorial, emerge de lo absorto

y se estaciona

en estas anhelantes adyacencias

del silencio.

                En derredor la luz

ocupa los audibles tonos fértiles

de un inmanente gozo sin segundo

y el veredicto de la plenitud

se filtra entre la furia voluptuosa

del saxo.

                El mundo cabe en esa súbita

constancia musical de haber vivido.