Lenguajes, voces, escrituras,
¿qué fragmentos
imaginarios de la vida ilustran, evalúan,
qué búsquedas de rastros de qué historias
terminan en remedos
que el tiempo avienta y la distancia anula?
Deficitarios ecos, códigos
ineficientes de señales, desordenan
la significación de las palabras:
llaves perdidas,
recipientes de noria que incapaces trasiegan
los argumentos hueros del deseo,
la trama espuria de la insuficiencia.
¿Qué más puedes decirles
a quienes tantas veces tantas descalificaciones
han esgrimido contra
los que siempre pensaron
que escribir y no hacerlo son renuncias idénticas?