APÉNDICE. EUROPA HACIA EL AÑO 1500: UN NOMENCLÁTOR POLÍTICO
Rusia: población, 9.000.000 (muy inseguro); gran ducado hereditario con centro en Moscú, comprendiendo Nóvgorod, Viatka, Tver y Riazán.
Moldavia: población incierta; nominalmente, principado independiente, pero sujeto por turnos a dominio turco, húngaro y polaco.
Lituania: población incierta; frontera oriental en litigio con Rusia; gran ducado gobernado desde Polonia y en conjunción con ella.
Polonia: población, 9.000.000; monarquía electiva.
Hungría: población incierta; monarquía electiva.
Bohemia: población incierta; monarquía electiva.
Alemania: población, 20.000.000; principal componente del Sacro Imperio Romano bajo la teórica autoridad del emperador electo, Maximiliano de Habsburgo, gobernante hereditario de los ducados de Austria, Estiria, Carintia y Carniola, junto con el condado de Tirol. En la práctica, Alemania era un conglomerado de unidades independientes que comprendía unos 30 principados (entre los más importantes se cuentan el Palatinado, Alta y Baja Baviera, Wurtemberg, Sajonia, Mecklenburgo y Brandemburgo), 50 territorios eclesiásticos, cerca de 100 condados y 60 ciudades libres[1].
Países Bajos: población, cerca de 6.000.000; tradicionalmente parte del Sacro Imperio Romano, luego gobernada conjuntamente con Luxemburgo y el Franco Condado por el príncipe Felipe de Habsburgo, hijo de Maximiliano.
Suiza: población, cerca de 750.000; federación de 11 cantones; parte del Sacro Imperio Romano, pero independiente en la práctica.
Dinamarca: población incierta; monarquía electiva.
Suecia: población, cerca de 800.000; monarquía electiva.
Noruega: población, desconocida; monarquía hereditaria. En teoría, desde la Unión de Kalmar (1397) se regían juntos los tres reinos escandinavos; en la práctica Noruega seguía un curso propio, como lo hacía Dinamarca, que económicamente era la más fuerte (controlando el Kattegat por medio de su posesión de Bohus, Halland y Escania), mientras Suecia estaba dividida entre dos partidos: uno independiente y otro pro danés.
Italia: término cuya significación era principalmente geográfica, pero que, en momentos de crisis política o debate cultural, podía referirse a un trasfondo lingüístico más o menos común y a una sensación del común origen en la antigua Roma, compartida por (para enumerar los principales poderes independientes de la Península): Venecia, población, 1.500.000; república y el único estado italiano con un imperio ultramarino, comprendiendo parte de Dalmacia, Corfú, Creta, Chipre y algunas colonias dispersas en el sur de Grecia; Milán, población, 1.250.000; ducado (en 1500 ocupado y administrado por los franceses); Florencia, población, 750.000; república; Estados Pontificios, población, 2.000.000; principado eclesiástico electivo, gobernado por el papa; Nápoles, población, 2.000.000; monarquía hereditaria; entre los estados italianos más pequeños estaban las repúblicas de Génova (con un dominio inseguro sobre Cerdeña), Luca y Siena, los ducados de Ferrara, Módena y Urbino y el marquesado de Mantua; Sicilia, población desconocida; reino hereditario, pero dependiente de Aragón.
España: comprendiendo Aragón, población, 1.000.000 y Castilla, población, 6.500.000; ambas monarquías hereditarias, pero gobernadas conjuntamente por Fernando e Isabel, sus respectivos soberanos, desde la sucesión de 1479.
Portugal: población, 1.000.000; monarquía hereditaria.
Navarra: población desconocida; monarquía hereditaria.
Francia: población, 19.000.000; monarquía hereditaria.
Inglaterra: población, 3.000.000; monarquía hereditaria.
Esto no agota la lista de entidades políticas que actuaban como estados independientes, bien fuera por derecho, como en el caso del reino de Escocia y el ducado de Saboya, o porque sus superiores nominales eran incapaces de controlarlos, como era el caso de algunas ciudades bálticas, como Lübeck y el área al sur del golfo de Finlandia, controlada por la Orden Teutónica de Caballeros, ambas sujetas nominalmente al Sacro Romano Emperador. Tampoco incluye un estado que no era de Europa, pero que ocupaba la mitad de ella, el Imperio de los turcos otomanos, que, a la muerte de Mohamed el Conquistador en 1481, gobernaban una extensión al oeste de los Dardanelos tan grande como la que tenían en Asia y controlaban una población balcánica al sur del Danubio que alcanzaba los 5.500.000.
[1] «Nadie consiguió nunca compilar una relación adecuada del número de unidades soberanas de Alemania», Gerald Strauss, Historian in an age of crisis: the life and works of Johannes Aventinus, 1477-1534, Harvard University Press, 1963.