MARÍA ANTONIA BERGER (Fuerzas Armadas Revolucionarias), 30 años.
Licenciada en Sociología. Detenida en noviembre de 1971. Recibió una ráfaga de ametralladora la madrugada del fusilamiento en la base Almirante Zar. Herida, pudo refugiarse en su celda. Allí intentaron rematarla con un tiro de pistola. La bala destrozó el lado derecho del maxilar inferior y se alojó debajo de la oreja. Le fue extraída en el hospital de la cárcel de Villa Devoto.
En 1977, un grupo de marinos comandados por el ex capitán Alfredo Astiz confundió a Berger con la adolescente sueco-argentina Dagmar Ingrid Hagelin. Secuestró y retuvo a esa joven, quien hasta hoy continúa desaparecida.
Berger logró eludir una persecución implacable y salir del país, pero regresó a la Argentina para unirse a la Primera Contraofensiva de los Montoneros. Fue secuestrada el 16 de octubre de 1979 y se supo que su cuerpo muerto, que nunca apareció, se exhibió como trofeo a los oficiales de la Escuela Superior de Mecánica de la Armada (ESMA).
ALBERTO MIGUEL CAMPS (Fuerzas Armadas Revolucionarias), 24 años.
Estudiante. Participó de varias operaciones en Córdoba y la provincia de Buenos Aires. Fue detenido con otros compañeros en diciembre de 1970, al ocupar en Córdoba una sucursal bancaria ubicada en el barrio aeronáutico. Fue torturado en la Jefatura Central de Policía y en la seccional 109 de la policía de Córdoba. Pudo escapar con vida y lanzarse dentro de su celda al comenzar la masacre en la base, pero el teniente de corbeta Roberto Guillermo Bravo se introdujo en la celda, lo hizo ponerse de pie con las manos en la nuca y le disparó un tiro de pistola 45 a menos de un metro de distancia.
El 16 de agosto de 1977, a casi cinco años de la matanza, un grupo de tareas asaltó su casa y se lo llevó, presuntamente sin vida. Se ignoró su destino hasta que en el año 2000 su cadáver fue identificado en una tumba n.n. del cementerio de Lomas de Zamora.
RICARDO RENÉ HAIDAR (Montoneros), 28 años.
Ingeniero químico. Fue detenido en febrero de 1972, acusado de asaltar al intendente de Santa Fe, Conrado Puccio. La madrugada del 22 de agosto fue herido en el hemitórax izquierdo, después de haberse refugiado en su celda, por un oficial de 1,80 metros, tez oscura, ojos oscuros, rasgos angulosos. Como a sus compañeros, no se le prestó atención médica por espacio de nueve a diez horas.
Haidar logró salir del país hacia el exilio. Fue detenido cuando intentaba reingresar a la Argentina, desde Brasil, el 18 de diciembre de 1982. Fue visto en la ESMA. Sigue desaparecido.