«Esto podría ser el infierno para mí.» El caleidoscopio se mueve con la serenidad y el aburrimiento de los días. Para ella, al final, no hubo infierno. Simplemente evitó vivir aquí. Las soluciones sencillas guían nuestros actos. La educación sentimental sólo tiene una divisa: no sufrir. Aquello que se aparta puede ser llamado desierto, roca con apariencia de hombre, el pensador tectónico.