Procura no dormir, Roberto, me digo… Aunque el sueño te cierre

los párpados, procura no quedarte dormido… Recuerda imágenes felices,

los cromos de México DF, los poetas de hierro en el Café La Habana…

Pero no te duermas…

No dejes que el sueño cierre la puerta… Piensa en películas de terror: Freddy,

Jason, Norman, ¡el Demonio!… Pero no te duermas… Piensa en Drácula,

en Frankenstein, en el Doctor Sinuoso… Las sombras que recorrían

los párpados de aquella muchacha… Tirada sobre un sofá-cama… Y sólo

un biombo de seda la separaba de los Ojos… Recuerda adolescentes vagando

por los alrededores de Guadalupe: los tacos de carnita, el manto

de Juan Diego, los implorantes de rodillas… ¿Qué hacías allí? Mirabas…

El tráfico de mota, los autobuses repletos, las tiendas de electrodomésticos,

los bares… Como entonces, haz un esfuerzo y vence al sueño… No dejes

que las sombras cierren (o abran) las puertas…