La Habana para un infante difunto
«La Habana para un infante difunto». (1979) Es la iniciación amorosa y erótica de un niño en una ciudad, en blanco y negro, que termina coloreándose a medida que se hace elegía y crónica del ayer. En el libro todo es parodia de principio a fin. Amor y humor recorren sus páginas haciendo burla de los besos, chistes de las copulaciones, en una búsqueda de la mujer interminable como los recuerdos de La Habana y los fracasos personales del buscador, con un erotismo que vive gracias al arte de la palabra, al enlace erótico de la escritura. Para Cabrera Infante la mujer es un ser fascinante digno de amor. «La Habana para un infante difunto» es un homenaje poético a lo femenino.