El sabor de la pepitas de manzana

A veces, abrir las habitaciones de una casa es como abrir la puerta a nuestros recuerdos. La casa familiar de Iris atesora los secretos y recuerdos de tres generaciones de mujeres, al igual que su mágico jardín de manzanos, que ha sido testigo de momentos y vivencias inolvidables.

A pesar de sus muchos claroscuros, los recuerdos de Iris son luminosos, casi mágicos, y están muy ligados a las historias de su abuela y sus tías, cuyos destinos se convierten en manos de Katharina Hagena en una narración poderosa.

Una novela delicada y sutil, llena de emociones, gestos y sabores, de esas que gustarán a todo el mundo y que harán que las manzanas tengan a partir de ahora un sabor más intenso.